Sevilla (EFE).- La Consejería de Universidad busca soluciones a la carencia de profesorado médico en los grados de Medicina. Lo hace mediante creación de la figura pionera en Andalucía del ayudante doctor. Tendrá vinculación clínica al sistema sanitario público.
Este novedoso perfil no existe actualmente en el marco estatal ni en otras normas autonómicas. Su desarrollo atraerá más talento al Servicio Andaluz de Salud (SAS) y a las universidades. Así lo ha informado la Consejería en un comunicado.
La orden fijará las condiciones y requisitos para la contratación y la actividad del ayudante doctor con vinculación clínica. En el borrador se propone que tenga consideración de personal de la universidad. Asimismo que la dedicación al desempeño asistencial y a las labores de docencia y de investigación sea equilibrada. Trata de facilitar la acreditación y estabilización de este personal.
Asimismo, plantea que la remuneración del profesorado ayudante doctor con vinculación clínica sea la misma que la estipulada para la categoría de ayudante doctor de universidad. También que esa retribución será asumida al 50 % por la institución académica en la que desarrolle su labor y por el SAS. Este organismo dependiente de la Consejería de Salud y Consumo debe hacerse cargo, además, de la parte correspondiente a guardias, complementos y continuidades.
A tiempo completo
Al margen de esta futura orden de la Consejería de Universidad, el marco normativo de referencia también establece que la contratación de ayudante doctor para Medicina será a tiempo completo y no podrá ser inferior a un año ni superior a cinco. Puede prorrogarse si se hubiera concertado por una duración inferior a la máxima.
En cualquier caso, el tiempo total de los contratos de ayudante doctor en la misma o diferente universidad, no podrá exceder de ocho años.
La categoría de ayudante doctor vinculado al sistema sanitario público está orientada a los jóvenes médicos que hayan finalizado su periodo de especialización a través del MIR. Deberán estar en posesión del título de doctor.
Los candidatos a obtener esta plaza se incorporarían a la universidad a una edad aproximada de 30 años. Pueden alcanzar la siguiente etapa, la de contratado doctor con vinculación clínica o profesor titular vinculado, a los 36 años. Esto es algo que ocurre actualmente a una edad superior a los 40 años. Así se adelanta la carrera académica de este personal en seis años.
Renovar la plantilla docente
Esta medida contribuirá, además, a renovar la plantilla docente. Lo hace al favorecer la incorporación de profesionales sanitarios a las facultades de Medicina en etapas muy tempranas.
Tanto la Conferencia Nacional de Decanos de Facultades de Medicina de España como el Foro de la Profesión Médica han alertado de la insuficiente plantilla docente de carácter clínico. Se trata de una carencia de casi 4.000 profesores con la previsión de que la situación se agrave y esa cifra se eleve hasta los 5.000 en el año 2030.
Además, se incide en rejuvenecer ese profesorado ante el alto índice de jubilaciones de sus . La edad media supera los 50 años, por encima del resto de personal docente e investigador en otras áreas de enseñanza.