Níjar (Almería), (EFE). La provincia de Almería se ha consolidado como uno de los principales productores europeos de dipladenia, una planta ornamental de vistosas flores en forma de trompeta que adorna terrazas y jardines de toda Europa. En el corazón de este sector se encuentra Semilleros Laimund, cuyas instalaciones en Níjar están dirigidas por el ingeniero técnico agrícola Guillermo Murcia.
Con cerca de 40 hectáreas dedicadas a este cultivo en la provincia, los invernaderos almerienses exportan semanalmente más de 50 camiones cargados de dipladenias hacia mercados como Alemania, Francia, Italia y Dinamarca.
“En Laimund, cada año producimos alrededor de tres millones de plantas de dipladenia”, detalla Murcia, quien subraya que la mayor parte de la producción se destina a Europa Central y del Norte, donde esta especie es especialmente demandada en primavera.
Flor de los difuntos
La dipladenia, una planta de origen tropical, es conocida por su resistencia y su capacidad para florecer de manera continua. Se cultiva en múltiples formatos, desde macetas pequeñas hasta estructuras ornamentales como arcos, pirámides y cascadas florales. “El formato en forma de arco es especialmente popular en países como Francia y Alemania”, explica Murcia.

“Históricamente, era una flor que en Francia se utilizaba mucho en los cementerios; era la flor de los difuntos, como en España pueden ser los crisantemos”, añade. Además, destaca que “cuando llegan a estos mercados, lo hacen totalmente florecidas y con color inmediato”.
El ciclo de cultivo comienza en julio y se prolonga hasta la primavera del año siguiente. “Las primeras plantas salen hacia la semana 12 del calendario anual y estamos en campaña hasta la semana 20”, señala el experto. Este proceso incluye tareas delicadas como el enraizado de esquejes, el pinzado manual de los tallos y el guiado de las plantas sobre tutores de bambú para conseguir formas compactas y atractivas.
Atención frente a plagas
Murcia resalta que el cultivo de dipladenia requiere especial atención frente a plagas como la mosca blanca o el Fusarium.
“Trabajamos con técnicas de control biológico, como la liberación de insectos auxiliares y el uso de extractos vegetales para combatir plagas”, explica. No obstante, el cultivo presenta ciertas complejidades debido a nuevas plagas, como ciertos tipos de trips, lo que obliga a extremar las precauciones para garantizar la sanidad vegetal sin comprometer el respeto al medio ambiente y la salud.

En cuanto a la sostenibilidad, Murcia subraya que las instalaciones de la empresa están diseñadas para recoger el agua de lluvia en dos embalses propios, lo que permite reducir el consumo hídrico. Además, el uso de sistemas de riego por goteo optimiza el aprovechamiento del agua y garantiza que la planta reciba la cantidad justa de nutrientes.
“En primavera, cuando la demanda de agua es mayor, sombreamos los invernaderos para reducir el consumo sin afectar la calidad del cultivo”, detalla Murcia. Asimismo, destaca que la recogida de agua de lluvia en los embalses permite utilizarla sin recurrir a otras fuentes.
Una planta de bajo mantenimiento
El cultivo de dipladenia en este semillero también se compagina con la producción de otras plantas ornamentales y hortícolas.
Durante el verano trabajamos con injertos de tomate, pimiento y otras plantas hortícolas. Luego, en otoño, comenzamos con el cultivo de pascueros, que se mantienen hasta Navidad, para después centrar el espacio en la dipladenia”, indica Murcia.
Una vez llega a los hogares, esta planta es apreciada por su bajo mantenimiento. “Con regarla dos o tres veces por semana en verano y una vez cada siete o diez días en invierno, es suficiente”, afirma el técnico.
También se recomienda ubicarla en espacios con luz natural, pero sin exposición directa al sol durante las horas más intensas del día. Su resistencia y versatilidad la convierten en una opción ideal para balcones, jardines y terrazas.
“La dipladenia es una gran desconocida en el mercado nacional, pero su resistencia y floración continua la convierten en una opción ideal para jardines y terrazas”, concluye Murcia, quien anima a los consumidores españoles a descubrir esta joya ornamental producida en Almería. EFE