Miguel López, que ha estado 37 años al frente de la Coordinadora de Organizaciones de Agricultores y Ganaderos ,COAG Andalucía, durante su intervención en el XI Congreso Regional. EFE/José Manuel Vidal

López se despide de la COAG-A con un mensaje esperanzador sobre el futuro del campo

Sevilla, (EFE).- Miguel López, que ha estado al frente de la COAG-A durante 37años, se ha despedido de la secretaría general de esta organización con un mensaje esperanzador sobre el futuro del campo, aunque ha alertado de los «peligros que acechan al sector por la falta de apuesta de la UE por la soberanía alimentaria».

En la clausura del XI congreso de COAG-A, en el que se ha producido el relevo en la secretaría general por Juan Luis Ávila, que es secretario provincial en Jaén, Miguel López lo ha definido como el «fin de una etapa» tras estar vinculado a esta organización durante 46 años, y ha afirmado que una «organización no es un dirigente, que es el pastor o el que da la cara, sino el resultado de muchos esfuerzos y sacrificios personales».

Miguel López, que ha tenido un reconocimiento general para todos los que le han acompañado en su larga etapa al frente de la COAG, ha pronunciado un discurso apasionado y directo, en su estilo campechano que lo ha caracterizado durante estos años, que ha sido ovacionado por las más de mil personas asistentes, sobre todo agricultores procedentes de toda la región, así como representantes políticos o ex altos cargos de Agricultura de la Junta.

Soberanía alimentaria

La COAG «ha sido el proyecto de su vida y ha merecido la pena», ha confesado Miguel López, quien ha valorado el trabajo de esta organización para avanzar hacia un modelo de agricultura social y familiar, que es la que fija la población a las zonas rurales y gestiona el territorio.

López COAG-A
Miguel López, que ha estado 37 años al frente de la Coordinadora de Organizaciones de Agricultores y Ganaderos COAG-A, durante su intervención en el XI Congreso Regional. EFE/José Manuel Vidal

No obstante, ha advertido de los retos a los que se enfrenta la agricultura por la «bomba de relojería» que representa Estados Unidos y sobre todo por los «pasos atrás de la UE» en la soberanía alimentaria que se la están cargando con los acuerdos preferenciales con otros países y que son «perjudiciales para los productores y para los consumidores» europeos porque llegan productos «nocivos para la salud».

«No puede ser todo dinero, mercado y especulación cuando aquí se hace mejor» y, por eso, ha reivindicado la necesidad de que la UE ordene los mercados internos para garantizar la soberanía alimentaria en un marco de seguridad y con precios razonables que permitan mantener un tejido productivo que fija población y gestiona el territorio.

También se ha despedido de la ejecutiva Eduardo López, secretario de organización, que ha proclamado la independencia política de la COAG-A y su carácter horizontal en la toma de decisiones y ha defendido que el discurso de las organización no debe ser solo rentas o precios sino incorporar lo social y medioambiental», así como defender el legado y el reconocimiento del campo que «alimenta a toda la población».

La «voz del campo que trabaja de verdad»

El nuevo secretario general de COAG-A, que ha agradecido a Miguel y a Eduardo haber dedicado toda una vida en «dar la voz al campo que trabaja de verdad», ha valorado que hayan conseguido una organización con independencia política absoluta con una implantación potente y por su defensa del interés del campo por encima de la presión política y económica.

Juan Luis Ávila ha reivindicado una alianza firme y contundente con la sociedad en defensa de la soberanía alimentaria para que entienda que «se juegan la salud de sus hijos y poder comer tres veces al día» y ha alertado que se han producido este año 333 alertas sanitarias en frutas y hortalizas importadas.

En su intervención, el secretario general de COAG, Miguel Padilla, ha destacado la «pasión» en la defensa del campo y la nobleza de Miguel López, así como los logros conseguidos en su etapa como fue la lucha por el gasóleo profesional, que ha supuesto los agricultores y ganaderos «se hayan embolsado 5.000 millones desde que en 2005 se aprobó gracias a Miguel López».

En el acto de clausura ha participado el consejero de Agricultura, Ramón Fernández-Pacheco, que ha agradecido ser el defensor de la «agricultura con mayúscula de Andalucía» y por su capacidad de diálogo y su predisposición a llegar a acuerdo.

También han asistido al Congreso de la COAG, que se ha clausurado en Sevilla, las exconsejeras de Agricultura de la Junta en la etapa del PSOE Clara Aguilera y Carmen Crespo, en la etapa del PP, entre otros representantes políticos como alcaldes, subdelegados y parlamentarios de todos los partidos, y el presidente de la Confederación Hidrográfica del Guadalquivir, Joaquín Paéz. EFE