Un camión de Bomberos en labores de extinción de un incendio forestal en Corbalán (Teruel), este mes de agosto. EFE/Antonio Garcia

Aragón cierra la campaña de incendios con 939 has quemadas, un 71% por debajo de la media histórica

Zaragoza (EFE).- Aragón ha cerrado la campaña de incendios forestales de este año con un total de 939 hectáreas quemadas, un 71 % por debajo de la media histórica (3.312 has) y un 11 % menos en cuanto al número de fuegos contabilizados, 155 frente a los 175 de media en los últimos veinte años de la serie.

Las estadísticas de la campaña de este año, del 1 de junio al 30 de septiembre, han sido dadas a conocer por el consejero de Medio Ambiente y Turismo del Gobierno aragonés, Manuel Blasco, en una rueda de prensa hecha con la directora general de Gestión Forestal, Ana Oliván, y la jefa del Servicio de Gestión de los Incendios Forestales y Coordinación.

El consejero ha señalado en su balance global que este año estaba siendo «extraordinariamente bueno» en cuanto a la lucha contra los incendios forestales debido a unas condiciones meteorológicas no desfavorables, a la eficacia del operativo puesto en marcha y a la gran coordinación conseguida con otras istraciones, especialmente las comunidades autónomas limítrofes, o con la Unidad Militar de Emergencias (UME).

Un camión de Bomberos en labores de extinción de un incendio forestal en Corbalán (Teruel), este mes de agosto.
Bomberos en labores de extinción de un incendio forestal en Corbalán (Teruel), este mes de agosto. EFE/Antonio Garcia

Una coordinación, ha explicado, que se evidenció en algunos de los incendios mayores registrados, el producido el 12 de agosto en el municipio turolense de Corbalán, que arrasó 192 hectáreas forestales antes de ser extinguido.

«Cuando se declara un incendio no hay colores políticos que valgan, todos van a una», ha resaltado Blasco, que ha insistido en que los fuegos «no entienden» de límites territoriales, por lo que la coordinación es «clave».

Condiciones climatológicas

Respecto a las condiciones climatológicas de la campaña, aunque la prolongada sequía hacía temer un número mayor de incendios y de superficie quemada, las tormentas modificaron las previsiones negativas iniciales.

En este sentido, las estadísticas aportadas que la situación de mayor riesgo (rojo) se dio entre la segunda mitad de julio y la primera de agosto, fechas en las que se concentraron los mayores incendios tras el registrado en Biota el 3 de julio (460 has): los de Pueyo de Aragüás (134 has), Luesia (132) y Corbalán (192).

Además, ha resaltado el consejero, las buenas condiciones climatológicas no sólo incremento la eficacia de los servicios de extinción sino que evitaron que se produjeran los llamados ‘grandes incendios’, al no afectar ninguno superficies de más de 500 hectáreas.

Respecto a las causas, el responsable político ha destacado que un 90 % tuvieron un origen conocido, de los que un 26 % se debieron a causas naturales (rayos principalmente), un 20 % a accidentes, un 20 % a negligencias y un 24 % a actos intencionados.

Blasco ha incidido en la necesidad de potenciar las actuaciones frente a las negligencias, con campañas informativas a la población, y a las acciones intencionadas en colaboración con las fuerzas y cuerpos de seguridad y la justicia.

Las estadísticas muestran, además, en cuanto a los incendios por negligencias que un 32 % fueron causados por motores y máquinas, un 26 % por quemas agrícolas y un 9 % por fumadores, un dato este último que ha causado sorpresa al consejero tras las campañas informativas puestas en marcha desde años atrás.

Balance de 2024

En lo que va de año, hasta la finalización de la campaña, tanto el número de siniestros registrados con el número de hectáreas quemadas también muestran valores por debajo de la media histórica.

Así, entre el 1 de enero y el 30 de septiembre se produjeron 266 incendios frente a la media histórica de 368 un 27 % menos), con un total de 1.476 hectáreas quemadas frente a la media de 3.815 (un 61 % menos).

Una brigada de bomberos en Terue
Una brigada de bomberos en Teruel. EFE/ Antonio García

La jefa del Servicio de Incendios Forestales ha resumido en su intervención que la eficacia de los equipos de prevención y extinción junto a las condiciones meteorológicas favorables y a la colaboración con otras istraciones y las poblaciones locales habían favorecido una lucha eficaz contra los incendios forestales.

Ha añadido que aunque la primera causa de los incendios son los rayos, la mayoría de los siniestros se originan por la mano del ser humano, a través de accidentes, negligencias o acciones intencionadas.

Se ha mostrado convencida tras aportar estos datos de que «casi la mitad de los incendios registrados se podían haber evitado».