La consejera de Hacienda y Relaciones con la Unión Europea del Gobierno de Canarias, Matilde Asián, ha respondido este viernes en comisión parlamentaria a preguntas sobre las instituciones que presentan un mejor resultado en cuanto a la gestión de los Fondos Next Generation en las islas o la publicación de convocatorias en el marco del Plan de Recuperación, Transformación y Resiliencia. EFE/Miguel Barreto

La consejera de Hacienda y Relaciones con la UE anuncia un plan para mejorar la baja ejecución de los fondos Next Generation

Santa Cruz de Tenerife (EFE).- La consejera de Hacienda y Relaciones con la Unión Europea del Gobierno de Canarias, Matilde Asián, ha anunciado este viernes que su departamento va a poner en marcha un plan para mejorar la baja ejecución de los fondos Next Generation, aprobados por la Unión Europea para la recuperación económica tras la pandemia.

Canarias tiene asignados con cargo a estos fondos 1.588 millones de euros y desde 2021 hasta el 31 de octubre de 2023, las obligaciones reconocidas ascendían a 380 millones, dijo la consejera, lo cual equivale a un 24% del total.

Los fondos que la UE asigna a España se reparten entre las comunidades autónomas en las conferencias sectoriales y están orientados a la transformación de la economía hacia la transición verde y la digitalización.

El área con más fondos asignados en Canarias es la de transición ecológica, con 501 millones, un tercio del total, pero el nivel de ejecución sólo llega al 4,13%.

En el resto de áreas la ejecución están en torno al 25% o el 30%, detalló la consejera en respuesta a la diputada del PP Rebeca Paniagua.

«Hay que dar un impulso a estos fondos», reconoció Asián, y por ello se va establecer un plan específico que incluye modificaciones normativas «para corregir defectos y trabas».

También hay problemas con la incorporación de nuevo personal y su adaptación a la rigidez en la contratación, pese a que el anterior gobierno «hizo un esfuerzo al respecto», explicó Asián, para quien «la incardinación entre el aparato istrativo con estas personas que llegan de fuera es complicada».

«Vamos a cuidar el tema del personal y las unidades istrativas que se crearon» para los fondos Next Generation, «vamos a hacer un análisis y pondremos en marcha un plan para incentivar el grado de ejecución de estos fondos», aseguró.

La consejera, que también respondió a las inquietudes del diputado de CC José Manuel Bermúdez sobre las dificultades de las istraciones públicas para ejecutar los fondos por la premura de los plazos, reconoció que el a esta financiación no es fácil ni está exenta de burocracia, lo que se traduce en demoras en las resoluciones de las licitaciones y subvenciones.

Señaló que son las respectivas consejerías las que en el marco de las conferencias sectoriales deberán plantear al Estado y este a la Unión Europea las mejoras que demandan ayuntamientos y cabildos en una tramitación «farragosa y complica».

José Manuel Bermúdez denunció ante la consejera que pese a la oportunidad que suponen estos fondos europeos para la transformación y resiliencia, los «hitos y objetivos» que se establecen son muy difíciles de cumplir.

En concreto, se publican convocatorias de subvenciones con plazos «extraordinariamente cortos» para proyectos que requieren mucha elaboración y trabajo previo, dijo Bermúdez.

También se quejó de que no se permita financiar proyectos que ya están en marcha, aunque se acomoden a los objetivos.

Protestó Bermúdez porque en otros casos los plazos de ejecución comienzan a contar sin que la convocatoria de subvenciones hayan sido resuelta, con lo cual es imposible avanzar, porque uno de los requisitos para empezar es tener una resolución favorable.

Los plazos de ejecución deberían empezar a contar a partir de la resolución efectiva de la convocatoria, demandó Bermúdez.

Puso como ejemplo unas subvenciones para la instalación de energías renovables en edificios de las istraciones públicas, que tienen que estar ejecutadas antes de fin de año sin que aún se haya resuelto la convocatoria por parte del Gobierno de Canarias. EFE

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