Foto de archivo de un guirre en Fuerteventura. EFE/Carlos de Sáa

La política agraria europea favorece la reproducción del guirre canario

Huelva (EFE).- El aumento del éxito reproductor del guirre canario en los últimos años podría estar relacionado con un descenso de la presión de la ganadería sobre el ecosistema y un aumento de la productividad primaria, asociada con el nivel de vegetación, propiciado por la Política Agraria Común (PAC).

Esta es la principal conclusión de un nuevo estudio desarrollado por científicos de la Universidad Miguel Hernández de Elche y la Estación Biológica de Doñana (EBD-CSIC), que ha arrojado luz sobre las complejas interacciones entre las condiciones ambientales, los recursos disponibles y las políticas comunitarias sobre ganadería que afectan al éxito reproductor de esta especie amenazada.

El estudio, según ha informado la EBD-CSIC en un comunicado, ha sido posible gracias a los 22 años de monitoreo intensivo financiado por el Gobierno de Canarias, Cabildo de Fuerteventura, dos proyectos europeos LIFE y el Ministerio de Ciencia e Innovación.

El guirre canario es una subespecie de alimoche endémica de Canarias que estaba ampliamente distribuida por el archipiélago hasta finales del siglo XX, cuando sufrió un declive que llevó al borde de la extinción.

A pesar de haber cuadruplicado su población desde entonces, hoy está clasificada como una especie en peligro de extinción con unos 400 individuos localizados en Fuerteventura y Lanzarote.

«En este estudio, hemos puesto de manifiesto cómo las variaciones en la cantidad de ganado motivadas por los cambios de la PAC han provocado reacciones en cascada en la cadena trófica», ha explicado Lola Fernández-Gómez, investigadora de la Miguel Hernández.

Fuerteventura es conocida por su cantidad de cabras, siendo la especie de ganado mayoritaria. Sin embargo, con los cambios en las ayudas de la PAC, el número de cabezas de ganado se redujo en 2013 de 100 a 50 por km2, provocando cambios en la vegetación de la isla.

Durante el primer periodo de estudio, del año 2000 al 2012, con alta densidad de ganado, la productividad primaria y el éxito reproductivo del guirre se redujeron; por contra, de 2013 al 2021, cuando la densidad de ganado fue menor, hay un aumento del nivel de productividad primaria y un incremento del éxito reproductivo.

«De este modo comprobamos que la vegetación que sirve de refugio y alimento para muchas especies de vertebrados de los que esta especie se alimenta, influye de forma positiva en el éxito reproductor del guirre», ha concluido la investigadora de la UMH.

Foto de archivo de un guirre sobrevolando la localidad de Tiscamanita, en Fuerteventura. EFE/Carlos de Saá

Factores de riesgo

La población de guirre es una de las pocas poblaciones mundiales de alimoche que sigue una tendencia al alza. Históricamente, los factores que han reducido la mortalidad de esta subespecie han sido los accidentes en líneas eléctricas y el veneno.

Ambos se han ido corrigiendo gracias a ambiciosos proyectos LIFE que han conseguido modificar muchos tendidos eléctricos y reducir la mortalidad. Sin embargo, otros factores de mortalidad están emergiendo en los últimos años.

«El principal es el riesgo de colisión con aerogeneradores que se están instalando en la isla y que se prevé que crezcan exponencialmente en los próximos años», señala José Antonio Donázar, profesor en la EBD-CSIC y coautor del estudio.

Los resultados de este estudio han puesto de manifiesto que esta población de carroñeros está conectada a las dinámicas del ecosistema.

El equipo científico subraya la importancia de comprender cómo funcionan estas interacciones entre los diferentes elementos que componen las cadenas tróficas, ya que cambios mínimos en las condiciones ecológicas pueden tener consecuencias directas en etapas que son cruciales para el desarrollo de la población, como es la reproducción.

«El futuro del guirre pasa por la consolidación de la actual población atajando los riesgos emergentes y gestionando adecuadamente sus efectivos en relación al medio y a usos humanos tradicionales, como a la ganadería. Para ello es necesario seguir trabajando en la línea que propone este estudio», ha explicado el investigador de la Estación Biológica de Doñana. EFE