El expresidente de Ciudadanos, Albert Rivera, durante la conferencia que ha ofrecido en Tenerife. EFE/Ramón de la Rocha

Albert Rivera: Los españoles están atónitos por los privilegios de unos pocos políticos

Santa Cruz de Tenerife (EFE).- Albert Rivera, expresidente de Ciudadanos, ha manifestado que «los españoles están atónitos» viendo cómo los privilegios de unos pocos políticos «que han querido destruir el Estado» monopolizan el debate político en el Congreso y en la vida pública.

Rivera, quien ha participado en Santa Cruz de Tenerife en el foro «Diálogos para el desarrollo» junto con David Cano, director general de la consultora financiera AFI, comentó en declaraciones a los medios que en su opinión esta legislatura, como la anterior, será duradera, a pesar de las desavenencias entre los socios, porque ninguno de ellos tiene «incentivos» para que Pedro Sánchez deje de ser presidente.

«Hay una mayoría» fundamentada en «la izquierda radical y los independentistas» a la que le une «el poder» y todos los socios «prefieren un gobierno de Sánchez que un Gobierno de Feijóo», comentó Albert Rivera.

Apuntó no obstante que, a diferencia de la legislatura pasada, ahora la mayoría «está en manos de Puigdemont, un señor huido de la justicia que siempre es una incógnita», lo cual es «surrealista».

Así que, según Albert Rivera, «por mucho que haya rifirrafes permanentes, van a querer mantener el poder», si bien «desgraciadamente no para hacer reformas políticas, económicas o sociales», sino para «sustentar el poder».

A la oposición le toca «hacer los deberes, ver cómo ilusionar a los españoles con alternativas», dijo Rivera, quien manifestó que a él le gustaría «una mayoría distinta y un gobierno moderado que piense en todos los españoles, no un gobierno radical que piense en unos pocos».

En todo caso, y aunque corroboró que su etapa en la política activa está «cerrada y sellada», defendió que más allá de las ideologías, es necesario que los que gobiernen no sean «una fuente de incertidumbre» y den seguridad jurídica y una normativa estable a las empresas.

Albert Rivera consideró que se precisan grandes pactos de Estado entre los grandes partidos para abordar las reformas pendientes, pero la presencia de «fuerzas variopintas y además radicales» en la mayoría gubernamental probablemente va a impedir ese escenario.

«Ojalá me equivoque, pero no pinta que tengamos una legislatura de pactos de Estado, sino más bien una legislatura de polarización», marcada no por lo que piden empresarios, autónomos y trabajadores, sino por lo que piden unos políticos «con respecto a los delitos que han cometido».

La agenda de reformas no se va a abordar «con gobiernos más pendientes de una amnistía o de conceder privilegios a los políticos», auguró.

«La obligación principal de los partidos políticos que se supone que tienen que tener una visión de Estado debería ser sentarse en una mesa para hablar del modelo educativo, de cómo ayudar a los autónomos y a las empresas a crear empleo y de cómo reformar las pensiones o la sanidad», insistió. EFE