Santa Cruz De Tenerife (EFE).- El sindicato CCOO ha pedido este miércoles al Gobierno de Canarias que elabore un plan de salud mental específico para los centros educativos ante una situación que percibe «alarmante», pues la pandemia ha detonado «un volcán» de incremento de casos de estrés y angustia entre alumnado y docentes.
José Ramón Barroso, secretario general de la Federación de Enseñanza de CCOO en Canarias, ha realizado esta petición en una rueda de prensa en la que ha presentado la jornada divulgativa «La salud mental en la educación», organizada por el sindicato en Santa Cruz de Tenerife, y en la que se ha expuesto el barómetro internacional del bienestar del personal en este ámbito.
Esta iniciativa ha surgido en el sindicato por la preocupación que ha motivado el aumento de suicidios en adolescentes, el uso y abuso de psicofármacos y el aumento de casos de salud mental entre los de la comunidad educativa, y Barroso ha recordado que ha expirado el plan de salud mental de Canarias y no se sabe si hay una evaluación o si se va a renovar.
Por ello el pasado sábado durante una reunión del Consejo Escolar de Canarias el sindicato planteó a la Consejería de Educación un plan específico que sea «potente y realista» para atajar un problema que puede ir en incremento hacia 2035, cuando alcancen la adolescencia los alumnos que vivieron su niñez en el confinamiento.
Al respecto Cuqui Vera, secretaria de Internacional de la Federación de Enseñanza estatal de CCOO, ha señalado que después del confinamiento de 2020 la situación es alarmante por sus efectos negativos en la salud mental y física, para añadir que buena parte del profesorado se siente infravalorado y muestra estrés, angustia, ansiedad y depresión.
Tratar los problemas de salud mental es la asignatura pendiente de la educación española porque si antes de la pandemia una de cada seis personas tenía una afección de este tipo ahora es una de cada dos, ha afirmado la dirigente sindical.
Para evaluar la situación CCOO ha participado en el barómetro internacional de la salud mental en la educación con una encuesta a más de 3.000 de la comunidad educativa española, en su mayoría de la escuela pública, y de la que se desprende que más del 40 por ciento del profesorado padece ansiedad.
Un 65 por ciento opina que sus condiciones laborales son muy estresantes, algo en lo que influye el uso de herramientas digitales y la imposibilidad de promoción en la carrera y que afecta especialmente a los docentes de más de 55 años.
Todo ello lleva a que el 73 por ciento de los encuestados esté insatisfecho con su situación y que el 84 por ciento no se sienta valorado ni por las familias ni por el resto de de la comunidad educativa, y en ello influye además la carga laboral derivada de realizar tareas burocráticas.
La dirigente sindical ha señalado además que un 25 por ciento de los docentes ha sido víctima de situaciones violentas, entre las que se incluyen insultos, humillaciones y agresiones físicas o verbales, de las que ha sido testigo un 44 por ciento de ellos, y que no sólo provienen de los alumnos sino de otros del centro.
Lo que es sorprendente, ha continuado Cuqui Vera, es que el 84 por ciento de los profesores va a clase estando enfermo, lo que muestra su compromiso.
No obstante, ha criticado que un alto porcentaje de los docentes conoce sus derechos en materia de salud mental pero sólo un 31 por ciento puede acceder a los recursos necesarios para solventar su situación, por lo que ha exigido «apuestas valientes por parte de la istración educativa para hacer frente a este desafío, los datos son preocupantes».
Para Nany Pizarro, de la Secretaría de Salud Laboral de CCOO, hay una «infradeclaración» de bajas laborales relacionadas con la salud mental de los profesores, pues sólo se consideran como tal unos 30 casos al año en todo el país, y ha pedido un plan integral en este ámbito con la necesaria formación en los centros de salud.
Actualmente el Ministerio de Educación dedica unos 5 millones de euros a esta cuestión, lo que CCOO considera más adecuado para una campaña de comunicación que para un plan efectivo, y ha asegurado que la falta de recursos está provocando daños a la salud de alumnos y docentes, un asunto «lo suficientemente grave como para no hacer un paripé» y entre otras medidas ha pedido una reducción de las horas lectivas.
Por su parte Francisco Vera, del Instituto de Estudios Educativos y Sindicales de CCOO, ha precisado que se debe tener en cuenta la salud mental con perspectiva de género, pues el colectivo docente está «muy feminizado» y no se tiene en cuenta esta vertiente.
Además ha comentado que «parece que se ha caído un velo» en lo referente a abordar el problema de los suicidios entre adolescentes pero, ha añadido, no se está haciendo desde el ámbito de la prevención para afrontar «el incremento sosegado» que se refleja en este ámbito. EFE