Pablo Herrera |
Santa Cruz de Tenerife (EFE).- La vela canaria contará en París 2024 con tres representantes: Joaquín Blanco, Andrés Barrio y Tara Pacheco, que, según han manifestado a EFE los dos primeros, irán a esta cita olímpica con el objetivo de dejar al deporte canario «donde se merece».
Andrés Barrio y Tara Pacheco competirán en la modalidad de Nacra 17 y Joaquín Blanco en ILCA 7.
Blanco selló su plaza este pasado martes tras su participación en el Trofeo Princesa Sofía, en Palma de Mallorca, donde mantuvo una lucha hasta el último segundo con el también canario Joel Rodríguez, mientras que los primeros canarios en certificar su plaza fueron Barrio y Pacheco en agosto de 2023 en el Campeonato del Mundo de Clases Olímpicas en La Haya, en Países Bajos.
En una entrevista con EFE, el regatista grancanario confiesa haber vivido las últimas horas con mucha emoción, aunque «tampoco hay demasiado tiempo para celebrar» y ahora toca «prepararse con todas las ganas» en una campaña olímpica que será corta y que exige «un minisprint» de cara a los Juegos Olímpicos.

El deportista de ILCA 7, que arribará a París a sus segundos Juegos tras su concurso en Río 2016 y haber quedado a las puertas de Tokio 2020, indica que, a diferencia de su participación en Río, «ahora vengo con la sensación de poder competir con los mejores” y marca «un objetivo muy realista» de conseguir acceder a las finales y «por qué no intentar aspirar al diploma olímpico, pues hablar de medallas es anticipado».
Blanco afirma que la cercanía de la cita olímpica exige «apretar los dientes» en los entrenamientos y llegar «en un buen pico de forma» en una categoría sumamente igualada y que «en una jornada puede dejarte dentro o fuera», por lo que su prioridad en el corto plazo es «conocer bien» las aguas de Marsella, sede olímpica para las competiciones de vela.
No guardarse ningún esfuerzo
Andrés Barrio también atiende a EFE y asegura que tienen en la cabeza «llegar lo mejor preparados» a la cita olímpica de París 2024 con el propósito de conseguir un buen resultado y no sentir que dejaron «nada guardado en el bolsillo por no realizar el esfuerzo».
En cuanto a objetivos, el regatista de Nacra 17 prefiere no marcar objetivos concretos para su participación olímpica en una campaña que ha sido accidentada con una luxación de hombro de Tara Pacheco de por medio.
Barrio resalta la dificultad que tuvo la obtención de la plaza olímpica tras llegar a la cita mundialista de La Haya «en una carrera a contrarreloj» por la reciente creación de su pareja deportiva con Tara Pacheco, de la que elogia que «gracias a su experiencia conseguimos la máxima efectividad» en el proceso de adaptación.
Además, confiesa que alrededor de un mes antes del campeonato en La Haya tenían unas deficiencias técnicas «grandes» en la popa de la regata y sufrieron un incidente cuando Barrio se encontraba atando unos cabos al barco desde el agua y una lancha que vino a colaborar le golpeó con la proa en el cuello, lo que provocó que no navegaran hasta 6 o 7 días antes del evento y con la idea de «no hacerme daño».
Barrio explica que la Nacra 17 «es un barco bastante duro de navegar» que exige constante carga física en los brazos, y al «no poder descansar tanto» para recortar tiempo de puesta a punto al resto de rivales, «supone llevar el cuerpo al 99,9% de su límite» y puede producir lesiones.

La experiencia de Pacheco, olímpica en Río 2012, Río 2016 y Tokio 2020, «nutre a diario al equipo» porque «sabe cuáles son los puntos importantes a tratar en una campaña olímpica» y sirve de mentoría a Barrio, que afronta sus primeros Juegos Olímpicos.
El regatista del Real Club Náutico de Gran Canaria señala que se encuentran preparando la participación olímpica con entrenamientos, preparación del barco, preparación física y mental para una prueba que impone «mayor presión» que cualquier otra prueba en la que haya participado.
Tara Pacheco y Andrés Barrio viajarán a Marsella a mediados de mayo, aunque no podrán entrenar en la marina olímpica hasta 20 días antes del inicio de los JJ.OO, pero sí por los alrededores para aclimatarse a la zona.
La vela canaria: una base joven muy fuerte
Para Barrio y Blanco supone «un orgullo» representar a Canarias en París 2024 y sostienen que darán lo máximo para «ponerla donde se merece», y Blanco proclama que «los pocos canarios que somos vamos a darlo todo».
Coincide con Blanco en que la vela canaria «está muy presente» en el equipo olímpico y representa la buena salud del deporte en las islas, que, según ambos, se debe a que en Canarias se dan las condiciones idóneas para navegar a diario, «lo que nos hace muy completos» y ayuda a tener «una base joven muy fuerte».
En este sentido, Joaquín Blanco señala «la gran ayuda» de una saga familiar que ha dejado su impronta en la vela canaria, tanto con su padre Joaquín Blanco Roca, olímpico en Los Ángeles 1984 y campeón del mundo en 1977, como su abuelo Joaquín Blanco Torrent, padre de la vela moderna en Canarias.
No obstante, Blanco asegura que él intenta «seguir su propio camino», una senda que escribirá su siguiente página junto a Andrés Barrio y Tara Pacheco representando a Canarias y a España en la vela olímpica. EFE