Las Palmas de Gran Canaria (EFE).- La Unión Federal de Policía (UFP) y la Confederación Española de Policía (CEP) han rechazado este viernes que se tilde que de «asesinato» la muerte del joven gambiano Abdoulie Bah por disparos de cinco agentes en el aeropuerto de Gran Canaria, un calificativo que creen «injurioso» y orientado a «dinamitar la paz social» en Canarias.
En dos comunicados, la UFP y la CEP se quejan de un «vídeo que circula en redes sociales» de una representante de una asociación de migrantes en el que se califica de «asesinato» la muerte de Bah, un joven de 19 años con problemas mentales que fue reducido a tiros el sábado pasado tras atacar con un cuchillo a un agente.
En realidad, esa misma expresión, «no es una muerte, es una asesinato», fue el lema con el que la Federación de Asociaciones Africanas de Canarias y la Asociación de Mujeres Africanas y Afrodescendientes reunieron este jueves a medio millar de personas ante la Delegación del Gobierno en Las Palmas de Gran Canaria para exigir «una investigación transparente, justicia y reparación».
Para la UFP, resulta «inaceptable» que se acuse a los agentes de haber «asesinado» al muchacho «por su color de piel o raza» y exige al Ministerio del Interior y la Dirección General de la Policía «un respaldo público inmediato» a los cinco agentes señalados.
Lo ocurrido en el aeropuerto de Gran Canaria quedó grabado por las cámaras de seguridad del recinto. El juzgado de guardia en la ciudad de Telde ese día ya ha abierto diligencias para comprobar si la respuesta de los policías fue proporcional a la amenaza que representaba en ese momento con un cuchillo Abdoulie Bah.
«Resulta aún más preocupante que este tipo de discursos estén claramente orientados a alentar a la comunidad migrante de la isla a odiar a la Policía Nacional, creando un clima de confrontación, desconfianza e injustificada hostilidad hacia los agentes que garantizan la seguridad de todos, sin distinción de origen, nacionalidad o condición», opina el sindicato policial.
A su juicio, este tipo de discursos «no solo distorsionan la realidad, sino que alimentan la polarización y ponen en riesgo la seguridad jurídica de los agentes».
Por ello, la Unión Federal de Policía emplaza a «las instituciones encargadas de velar por la seguridad y la justicia a que actúen con valentía, condenen este tipo de manifestaciones y actúen en consecuencia», porque considera que cinco agentes que intervinieron en el incidente actuaron «conforme a la ley y en defensa de la ciudadanía».
Lo mismo opina la CEP, que defiende «como impecable» la reacción de los policías que mataron a Bah «al ver amenazada su vida y la de terceras personas».
Fue, dice, un «hecho del que nadie se alegra, pero que es la consecuencia lógica cuando alguien intenta acabar con la vida de un policía, al abalanzarse sobre él con un cuchillo de grandes dimensiones», tras haber provocado antes «escenas de miedo y pánico entre los viajeros y s del aeropuerto».
«A quienes ahora intentan agitar las aguas de la injuria y la calumnia les recordamos que ni ellos ni mil oportunistas más podrán ocultar lo evidente: la vida de nuestros compañeros corrió peligro y ellos se limitaron a proteger su vida y la de los demás», remarca. EFE