Santa Cruz de Tenerife (EFE).- El empresario ruso afincado en Gran Canaria Vladimir Kokorev, condenado a dos años y tres meses de cárcel y 20 millones de euros de multa tras confesar que blanqueó 58 millones no declarados de sus negocios con Guinea Ecuatorial, consiguió reunir un patrimonio inmobiliario de más de 28 millones de euros, adquisiciones que utilizó para esconder sus ingresos ante Hacienda y que serán decomisados.
Así figura en la sentencia de conformidad alcanzada con la Fiscalía Anticorrupción, ratificada íntegramente por la Audiencia Provincial de Las Palmas, con lo cual los acusados eluden entrar en prisión, pero deben hacer frente a multas en efectivo de más de 35 millones de euros.
Además de la multa de 20 millones de euros y los dos años y tres meses de cárcel para Kokorev, pena que ya ha cumplido en prisión preventiva, se condena a su esposa a un año y once meses de prisión y quince millones de multa, a su asesor fiscal Juan Arencibia a un año de cárcel más multa de 500.000 euros y a dos hermanas de este a multas de 10.000 euros cada una.
Como penas rias del delito, la Audiencia Provincial procede al decomiso de los inmuebles, por ser producto del blanqueo de capitales
La sentencia, de 58 páginas, concreta el decomiso de trece propiedades inmobiliarias en Las Palmas de Gran Canaria, Madrid, Las Rozas y Villaviciosa de Odón (Madrid).
El valor total de las adquisiciones inmobiliarias en España asciende a casi 28,5 millones de euros, que estaban a nombre de los acusados o de las sociedades instrumentales del entramado que utilizaban para mover el dinero blanqueados, de acuerdo con la sentencia.
Los 35 millones de euros de la multa que ha de pagar el matrimonio saldrán de las cuentas que ya tenían embargadas en Suiza.
Según los hechos probados, el empresario, junto a Juan Arencibia, blanqueó 58 millones no declarados de sus negocios de compraventa de buques de carga y pasajeros a la República de Guinea Ecuatorial a través de un entramado societario controlado por Vladimir Kokorev y su esposa Yulia Maleeva, en ocasiones con las hermanas del asesor fiscal como pantalla.
También obtuvieron ingresos por la asistencia técnica y comercial a la República de Guinea Ecuatorial y a empresas privadas en ese país. EFE