Santander (EFE).- El Gobierno de Cantabria invertirá 37 millones de euros en renovar y modernizar el sistema de gestión de datos de la sanidad pública, para ampliar la capacidad de almacenamiento que «se está agotando», mejorar la respuesta de los procesos y aumentar los sistemas de ciberseguridad.
El Consejo de Gobierno ha aprobado este jueves la inversión, que se llevará a cabo a través del Contrato de Colaboración Público Privado (CP) del hospital Valdecilla, que es donde se encuentra el centro de gestión de datos de la sanidad cántabra y será donde se instalen los nuevos servidores y los sistemas asociados.
El consejero de Salud, César Pascual, ha explicado en una rueda de prensa posterior a la reunión del Gobierno que la inversión se encuentra por debajo del 5 % (4,87 %) de la modificación prevista en el contrato de Valdecilla y se llevará a cabo a lo largo de los próximos nueve años.
Renovación inmediata
La inversión, que correrá a cargo del Gobierno de Cantabria, se financiará a lo largo del plazo que aún queda de vigencia del contrato y será la empresa encargada de los servicios no sanitarios de Valdecilla (Ferrovial) la que lleve a cabo la renovación del sistema siguiendo las directrices técnicas de la Consejería.
Pascual ha aclarado que la renovación de los sistemas comenzará de forma inmediata y se prevé que este completada en un año. «Esto nos coloca en una situación puntera», ha valorado y ha defendido la necesidad de llevar a cabo ahora esta inversión por que las infraestructura donde se gestionan los datos «se va a agotar a corto plazo».

El motivo de esta situación, según ha explicado, es el incremento «sustancial» que se ha producido en los datos que generan las nuevas tecnologías que se han introducido en el Servicio Cántabro de Salud, que incorporan imagen digital en alta definición o inteligencia artificial, entre otras innovaciones.
Más capacidad del sistema
Pascual ha detallado que esta inversión viene condicionada por la necesidad de aumentar la capacidad de almacenamiento y gestión de los datos para hacer frente a nuevos proyectos como el de imagen digital, o para atender innovaciones como la anatomía patológica digital o la genética y genómica molecular, y servicios como la teleasistencia a pacientes crónicos atendidos en domicilio.
Servirá también para aumentar la protección en ciberseguridad frente a ataques que se están produciendo al sistema y para aplicar las innovaciones que se están produciendo en materia de bases de datos. «No tenemos suficiente tecnología para cubrir la demanda estimada en los próximos cinco años», ha apuntado.
«Con las tendencias actuales agotaríamos los recursos en 2025; si se mantiene el crecimiento, la memoria estaría al cien por cien y ya no podríamos seguir creciendo», ha incidido.
Pascual, de hecho, ha advertido de que si no se hace nada, en enero de 2027 los sistemas podrían decaer y el almacenamiento no se podría posible gestionar con los tiempos de respuesta adecuada.
«Necesitamos una renovación en las infraestructuras, en los servidores del centro de proceso de datos principal que está en Valdecilla, pero también en el de Sierrallana y por tanto hay que hacer una inversión tecnológica en los servidores con un incremento de los mismo para incrementar la capacidad de computación», ha concluido el consejero.