Toledo (EFE).- El secretario general de CCOO en Castilla-La Mancha, Paco de la Rosa, ha advertido este jueves de que el «diálogo social va despacio» en la región y ha adelantado que 2024 será «un año perdido».
En una rueda de prensa en la que ha expuesto los principales retos del sindicato para 2024, De la Rosa ha lamentado que para este año no se ha reservado presupuesto para la creación de un Instituto de Seguridad y Salud Laboral, que debería servir para reducir el número de accidentes laborales en la comunidad autónoma.
«Un año perdido, de 4 que tiene la Legislatura», ha advertido De la Rosa.
También será un año perdido, a su juicio, para la puesta en marcha de un servicio público de empleo, que esté participado por los agentes sociales, ya que ha afeado que tampoco se ha reservado partida presupuestaria para ello.
Y ha reprochado que tampoco se pondrá en marcha el servicio para la mediación en conflictos individuales.
Pide que los discursos vayan acompañados de presupuesto
Por todo ello, el secretario general de CCOO en la comunidad autónoma ha considerado que el diálogo social «va despacio» en Castilla-La Mancha y ha reclamado al Gobierno regional que «los discursos no se queden solo en buenas palabras, sino que vayan acompañados de presupuesto».
Asimismo, también ha solicitado mejoras en los servicios públicos, como la educación o los servicios sociales, y en sanidad -además de pedir más personal- ha pedido recuperar el complemento de carrera profesional, suprimido en la región desde 2012.
De la Rosa ha reflexionado que para ello es necesario tener una «financiación suficiente».
Y por ello, ha denunciado que la financiación autonómica actual es escasa en fondos para Castilla-La Mancha y «desproporcionada con otras comunidades autónomas».
Ofrece «ir de la mano» con García-Page para pedir una nueva financiación autonómica
En este sentido, ha ofrecido al presidente regional, Emiliano García-Page, que este mismo miércoles ha denunciado una década de retraso en la puesta en marcha del nuevo modelo de financiación autonómica, ir «de la mano para pedir al Gobierno central» un nuevo sistema de financiación
Además, otros de los retos que se ha fijado de la Rosa para 2024 son lograr la subida del Salario Mínimo Interprofesional (SMI), un asunto sobre el que ha confiado que «habrá buenas noticias» esta semana o la próxima y reducir la jornada laboral, si bien ha calculado que en Castilla-La Mancha se podrían contratar a 15.000 trabajadores al mes si se eliminaran las horas extraordinarias que se hacen «en negro».
Ha confiado, asimismo, en que se pueda mejorar la regulación del despido; avanzar en igualdad, pues ha denunciado que solo el 35 por ciento de las empresas que están obligadas a tener un plan de igualdad lo tienen, y mejorar la conciliación de la vida laboral y familiar.
CCOO, primer sindicato de clase con el 45 % de los delegados sindicales
En cuanto al balance del sindicato, De la Rosa ha reivindicado que es el primer sindicato de clase de Castilla-La Mancha, ya que representa el 45 % de los delegados sindicales de la región, 15 puntos porcentuales por encima del siguiente.
«Hemos ganado las elecciones en todos los sectores de actividad de Castilla-La Mancha, en lo público y en lo privado, y ello nos legitima para sentarnos a negociar en todos los ámbitos, con todas las patronales y con la istración», ha defendido de la Rosa.
Por ello, ha sostenido que el empeño de CCOO es que «el diálogo social sea real y su velocidad sea de crucero».
El sindicato suma 7.000 afiliaciones nuevas en 2023
También ha destacado que CCOO ha registrado en 2023 un total de 7.000 nuevas afiliaciones, lo que le ha llevado a decir que CCOO es «un sindicato plenamente autónomo, que no necesita nada más que las cuotas de afiliación de los trabajadores para funcionar desde el punto de vista económico».
En concreto, ha detallado que la actividad del sindicato depende en un 90 por ciento de recursos propios.
Así, y ante las críticas de otros sindicatos por la recepción de subvenciones, ha defendido que CCOO «recibe fondos de programas derivados del diálogo social, no son para gastos corrientes de la organización ni para soportar la estructura de personal».