Burgos (EFE).- La industria de la moda está abordando un cambio de paradigma, del que deben participar diseñadores y consumidores, centrado en abandonar el modelo comercial de fast fashion y apostar por la moda de proximidad, duradera y de calidad, en la que tomen protagonismo diferenciador el reciclaje y las prácticas sostenibles.
“Tenemos que tener en cuenta que nuestro mundo, aunque no se dice, es el segundo más contaminante”, ha recordado la diseñadora Elena Iglesias, representante de la firma zamorana Ángel Iglesias, en declaraciones a los medios en el marco del evento Espacio Moda Castilla y León que se ha celebrado en el Fórum Evolución de Burgos.
La industria de la moda lleva un ritmo “excesivamente rápido”, pero los diseñadores en la Comunidad están trabajando por frenarlo, apostando por el slow fashion, “dejar de contaminar como lo estamos haciendo, de tirar ropa diariamente a toneladas” e imprimir a sus creaciones el valor añadido de la proximidad y la sostenibilidad.
“Nosotros intentamos ser sostenibles, producimos en España y, en muchos casos, en Castilla y León; intentamos comprar tejidos en los alrededores”, ha insistido la diseñadora, y producen prendas de calidad, “que no duran una temporada”, en un cambio de mentalidad que todavía está dando sus primeros pasos pero que es el futuro de la moda.
Así lo ven las nuevas generaciones, jóvenes diseñadores como Marta Maté y Manuel Pérez Rivera, dos de los quince emprendedores que han participado en el showroom-concurso organizado en el seno de la nueva pasarela de la moda de Castilla y León.

La palentina Marta Maté ha asegurado que, si bien es cierto que el fast fashion “sigue ahí” no lo es menos que “tanto el consumidor como el diseñador tienen que ser conscientes de que eso no es viable” y, por ese motivo, sus propios diseños apuestan por la sostenibilidad y el reciclaje de materiales.
El que ha presentado al concurso es un vestido realizado con reciclado de tejidos de cuero, de chaquetas y faldas, combinado con aros de madera de cortinas, que se completa con un bolso que está hecho con rellenos de sujetador, restos de media o cuero.
Por su parte, el vallisoletano Manuel Pérez Rivera, también ha presentado un modelo orientado a la sostenibilidad; un traje unisex desmontable que, a través de diversas combinaciones de solo cinco variables, es capaz de ofrecer 120 posibilidades diferentes de prenda.
Ánimo, perseverancia, fuerza y suerte
Los diseñadores Concha Ceballos, Baro Lucas, José Martín y Elena Iglesias se han acercado a conocer las propuestas de los diseñadores emergentes, al mismo tiempo que les han dado algunos consejos, todas orientados a la importancia del trabajo, el esfuerzo y la perseverancia, pues la moda es un mundo muy complicado que requiere de “fuerza” y “suerte”.
Concha Ceballos ha asegurado que tienen que “enfocarse y tener mucha perseverancia, no rendirse nunca, digan lo que digan y pase lo que pase; continuar hasta el final”, porque, como ha indicado Elena Iglesias, “es un sector duro, rápido y complicado», pero sobre todo no hay que perder la «ilusión”, ni tener miedo.
En esta idea ha ahondado José Martín, quien les ha recomendado paciencia, “que es esencial”, y “darle caña”; se aprende estropeando las telas, por muy caras que sean, ha insistido. No hay que tener miedo, “es preferible estropear un tejido que no hacer nada”, ha asegurado.
Los cuatro diseñadores, junto con Fashion SA, Silvia Fernández y Fely Campo, han desfilado este jueves en la última jornada del Espacio Moda Castilla y León, iniciativa impulsada por CEOE y la Consejería de Industria, Comercio y Empleo. Antes que ellos, este miércoles se han podido ver las colecciones de María Lafuente, Raquel Tomillo, Natacha Arranz Atelier, Eulalia Mateos, By Imelda, Santiago García y Ainhoa Salcedo.