Soria (EFE).- La Guardia Civil ha esclarecido veintiséis robos con fuerza cometidos en provincias de Castilla y León, Castilla-La Mancha, Madrid y Aragón, tras detener en la localidad madrileña de Alcalá de Henares al supuesto autor de los hechos, un hombre de 43 años que ha ingresado en prisión por orden judicial.
El subdelegado del Gobierno en Soria, Miguel Latorre, acompañado del teniente coronel de la Comandancia de Soria, Sergio Peñarroya, han informado este jueves de la denominada operación “Jarrón”, sobre seis robos con fuerza cometidos en Soria, tres en Burgos, uno en Madrid, tres en Zaragoza, diez en Segovia, dos en Guadalajara y uno en Toledo.
Además de atribuirle los robos con fuerza en las cosas, los agentes consideran al arrestado, de nacionalidad rumana, supuesto autor de un delito de tenencia ilícita de armas, un delito de robo de vehículo a motor y otro de falsedad documental cometido al utilizar placas de matrícula dobladas.
El detenido fue puesto a disposición del Juzgado de Primera Instancia e Instrucción Número 1 de Almazán (Soria), que ordenó su ingreso en prisión.
Durante la noche del 26 al 27 de abril del año pasado se registraron cinco robos con fuerza en las cosas en la provincia de Soria.
Concretamente se trató de un robo en un bar de la localidad de Almazán, tres robos con fuerza en restaurantes de Medinaceli y un robo en una iglesia de Barahona, tras lo que se inició la investigación correspondiente por parte de la Unidad Orgánica de Policía Judicial de Soria.
Estos delitos fueron cometidos empleando técnicas y herramientas muy especializadas, como extractores de bombines de cerradura, inhibidores de frecuencia para anular los sistemas de alarma, detectores de señales radiofrecuencia y GPS para detectar las vigilancias de las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado.
Además, fue utilizado un vehículo robado con placas de matrícula “dobladas” para llevar a cabo los desplazamientos a los lugares de comisión de los robos sin ser identificado.
Una vez localizado el lugar donde se almacenaban los efectos sustraídos, el pasado 21 de diciembre los agentes practicaron una entrada y registro en una vivienda en la localidad de Alcalá de Henares, con la autorización judicial correspondiente.
En el registro, la Guardia Civil encontró 1.500 euros en efectivo, tres armas cortas, armas prohibidas (dos de defensa extensibles, spray de defensa y un bastón estoque), extractores de bombines y llaves para forzamiento de cerraduras e Inhibidor de frecuencias.
Además, halló un detector de señales RF y GPS, multitud de efectos procedentes de los robos, joyas sustraídas, kit para pesaje y análisis de pureza de joyas y 33 décimos de lotería nacional de Navidad (sustraídos en los establecimientos de los robos).
También los agentes recuperaron el vehículo robado que el detenido utilizaba para la comisión de los hechos delictivos.
