Imagen de archivo de una persona pidiendo en Valladolid.EFE/Nacho Gallego

El 6,4% de los habitantes de Castilla y León: con pobreza material y social severa

Valladolid, 26 feb (EFE).- El 6,4 por ciento de la población de Castilla y León estaba en el 2023 en situación de pobreza o carencia material y social severa, el 1,4 por ciento más que el año anterior y el más alto desde que se publica este indicador, el 2014, cuando el indicador estaba en el 4,6%, con el 2,5 del 2019, antes de la pandemia, como menor dato, según la encuesta de condiciones de vida que ha publicado este lunes el INE.


En el 2023, un 22,4 por ciento de la población de Castilla y León estaba en riesgo de pobreza o exclusión social en el 2023, la denominada tasa AROPE, tres décimas más que en el 2022, en este caso por debajo del AROPE del 2014, que fue del 26,5 por ciento en esa comunidad, que tuvo en el 2019 su menor indicador con un 16,8 por ciento.

Imagen de archivo.EFE/Nacho Gallego


14.124 euros de renta media por castellanoleonés


La renta media por persona, con datos del 2022, fue de 14.124 euros en Castilla y León, la undécima mayor del conjunto autonómico, ligeramente por encima de los 14.082 de promedio nacional, pero lejos de los 18.189 de País Vasco.


Y esos 14.124 euros supusieron un 6 por ciento más que los 13.323 de renta media del año anterior en Castilla y León.


En el conjunto nacional, el porcentaje de población en riesgo de pobreza o exclusión social (la denominada tasa AROPE) aumentó medio punto porcentual en 2023 hasta el 26,5 % mientras que la población con «carencia material y social severa» escaló hasta el 9 %, la tasa más alta desde 2015.

El riesgo de pobreza relativa pasa del 17,8 al 18,2%


Según la Encuesta de Condiciones de Vida difundida este lunes por el Instituto Nacional de Estadística (INE), dos de los tres componentes de la tasa AROPE mejoraron: el riesgo de pobreza relativa -indicador que refleja cuántas personas tienen ingresos bajos en relación al conjunto de la población-,que bajó del 20,4 al 20,2 %; y el porcentaje de población con baja intensidad en el empleo (con poca actividad), que pasó del 8,7 al 8,4 %.


Pero el tercer componente de la tasa empeoró: el porcentaje de población con carencia material y social severa subió del 7,7 al 9 %. Este concepto analiza factores como no poder permitirse ir de vacaciones al menos una vez al año; comer carne, pollo o pescado cada dos días; o mantener la vivienda a una temperatura adecuada.


En Castilla y León además del incremento de la población con carencia material y social severa, también aumentó el riesgo de pobreza relativa, que pasó del 17,8 del 2022 al 18,2 por ciento de la población en el 2023.


Ese 18,2 por ciento es el tercer mayor porcentaje después del 20,4 del 2014 y el 18,4 del 2015, con de nuevo el dato del 2019, antes de la pandemia de la covid como menor indicador, con el 12,9.

Baja nueve décimas, al 7,3%, los hogares con baja intensidad laboral

Y en cuanto al componente de la población de cero a 64 años que vive en hogares de baja intensidad en el trabajo, se situó en el 7,3 por ciento en el 2023, en ese caso nueve décimas menos que el 8,2 por ciento del 2022, aunque por encima del 6,8 de los años 2019 y 2020.


Las tasas AROPE de riesgo de pobreza o exclusión social más elevadas se dieron en el año 2023 en Andalucía (37,5%), Canarias (33,8%) y Extremadura (32,8%).


En el lado contrario, País Vasco (15,5%) y Comunidad Foral de Navarra (17,2%) presentaron las tasas de riesgo de pobreza o exclusión social más bajas.

La novena menor tasa Arope y de pobreza


Castilla y León, con ese 22,4 por ciento, la novena menor del conjunto autonómico.


Respecto a las tasas de riesgo de pobreza, las más elevadas se dieron en Andalucía (30,5%), Extremadura (27,6%) y Canarias (26,1%).


País Vasco (10,2%), Comunidad de Madrid (12,9%) y Comunidad Foral de Navarra (13,8%) presentaron las tasas de riesgo de pobreza más bajas.


En este caso, el 18,2 por ciento de Castilla y León fue también la novena menor del conjunto autonómico.

Sube la población que no puede irse de vacaciones el fin de semana


La encuesta recoge además que un 28,6 por ciento de la población de Castilla y León no puede permitirse irse de vacaciones fuera de casa al menos una semana al año (33,1 nacional), cuando hace un año ese porcentaje estaba en el 28,1.


El 26,1 por ciento de los castellanoleoneses no tienen capacidad para afrontar gastos imprevistos (37,1 nacional), cuando hace un año era el 27,1 por ciento, con un recorte del 1 por ciento.


Y el 9,6 por ciento (10,4 en el 2022) tiene retrasos en pagos relacionados con la vivienda principal o compras a plazos (13,6 nacional), y el 7,7 ( 6,8 en 2022 y 6,7 en 2021) tiene mucha dificultad para llegar a fin de mes (9,3% nacional).


Atendiendo a las dificultades para llegar a fin de mes, Andalucía (13,6%), Extremadura (11,0%) y Canarias (9,9%) fueron las comunidades autónomas con mayores porcentajes de personas que llegaban a fin de mes con “mucha dificultad” en 2023.


Las que presentaron los menores porcentajes fueron La Rioja (4,8%), Illes Balears (5,2%) y Principado de Asturias (5,6%).EFE