Valladolid (EFE).- Los precios se moderaron al 2,8 en febrero en Castilla y León en tasa anual, seis décimas menos que en enero y con el mismo dato que la media nacional, y los alimentos y bebidas alcohólicas subieron un 5,8 por ciento respecto a hace un año.
El Instituto Nacional de Estadística (INE) ha publicado este jueves los datos del IPC de febrero que recogen que respecto a enero los precios subieron tres décimas en Castilla y León, una menos que la media nacional.

El IPC registró tasas anuales positivas en todas las comunidades autónomas en febrero. Extremadura presentó la más elevada (3,3%) y La Rioja y Comunidad Foral de Navarra las más bajas (ambas 2,5%). Castilla y León se situó en la media nacional, con ese 2,8, igual que Asturias, Cantabria y Murcia, con el sexto mayor IPC en ese mes.
Entre el 3,2 de Burgos y el 2,3 de Valladolid
Por provincias, los precios subieron en febrero en tasa anual entre el 3,2 por ciento de Burgos y el 2,3 de Valladolid.
En Ávila y Salamanca el IPC de febrero fue del 3,1, del 3 por ciento en Segovia y el 2,9 en Zamora, con el 2,7, igual que la media autonómica, en León y Palencia, y el 2,6 en Soria.
Con este dato, los precios han subido en los dos primeros meses del año cuatro décimas en la comunidad, lo mismo que la media nacional.
Por grupo y en dato anual, los precios de los alimentos y bebidas no alcohólicas subieron un 5,8 por ciento, el 5 por ciento el alcohol y tabaco, el 2,8 el vestido, 2,2 la medicina y 2,1 el transporte, con un 6,4 la restauración. Sólo el grupo de la vivienda se ha abaratado un 3,1 por ciento en el último año.
Destaca la bajada del precio de la calefacción, alumbrado y distribución de agua, que es un 9,4 por ciento más económico que hace un año, con una caída mensual del 2,7 por ciento.
Aceites y grasas, un 47,7% más caras que hace un año
En alimentación, el grupo de aceites y grasas está un 47,7 por ciento más caro que hace un año, y un 5,2 por ciento más caro que en enero.
También destacan las subidas en la carne de ovino del 13 por ciento y del 10,3 del porcino, respecto al mismo mes del 2023, aunque ambas se han abaratado un 3 y un 0,6 por ciento respecto a enero.
En la cesta de la compra de febrero también se ha encarecido un 8,3 por ciento el pescado fresco y congelado, que está un 4,5 más barato que en enero.
La leche está un 1,4 por ciento más barata que hace un año y una décima menos que en enero. Y las legumbres y hortalizas frescas cuestan un 1,9 por ciento menos que hace un año, tras el -6,2 por ciento de recorte respecto al mes anterior. EFE