Madrid/Valladolid (EFE).- Casi todas las comunidades autónomas han recuperado con creces los recortes en el Estado de bienestar iniciados en el primer lustro de la década pasada como consecuencia de la crisis financiera, fundamentalmente gracias al apoyo del Estado a través de los recursos extraordinarios por la pandemia, aunque en el caso de Castilla y León figura entre las que apuntan un ligero descenso, del 0,4 por ciento.
En el caso del gasto social por habitante, Castilla y León se anota un índice de 98, ligeramente por debajo de la media autonómica, establecida en el 100.
Estas son dos de las principales conclusiones del informe dado a conocer este martes por Fedea sobre ‘El gasto en sanidad, educación y protección social en las CC.AA., 2015-2022’, que indica que el gasto total, sin transferencias entre istraciones públicas, ha aumentado en un 33,2% en términos nominales entre 2015 y 2022, aunque también aporta datos sobre 2011.
En el caso del registro entre 2025 y 2022, Castilla y León anota un incremento en el gasto social total real del 8,8 por ciento, lo que la sitúa con la quinta menor variación, lejos del 14,8 por ciento establecido a nivel general entre las autonomías.
Educación, Servicios Sociales y Sanidad
Por sectores, en Educación el incremento (2015-2022) fue el más bajo entre las autonomías, con un aumento del 4,4 por ciento, lejos del 12,6 por ciento detectado como media autonómica y más aún de Navarra, donde la subida fue del 26,2 por ciento.
En Protección Social, Castilla y León anotó en ese mismo periodo un incremento del 22 por ciento, por debajo de la media autonómica (32,5%) y lejos del 92,1 por ciento de aumento máximo localizado en Baleares.
Por último en materia de Sanidad, Castilla y León se anotó un incremento del 13,4 por ciento en el mismo periodo, frente al 21,2 por ciento de media autonómica y el 29,5 por ciento del aumento máximo radicado en Canarias.
El documento aporta también datos sobre el ajuste fiscal realizado por las autonomías entre 2023 y 2015 y el saldo medido en términos de Contabilidad Nacional (CN), con Castilla y León con un ajuste fiscal del 0,7% sobre el PIB, ligeramente por debajo de la media autonómica (0,8%), y con un saldo deficitario del 0,7%, también ligeramente por debajo de la media (-0,7%).
Fedea plantea que entre 2015 y 2023 Castilla y León registró un incremento de 1,5 puntos porcentuales sobre el PIB en recursos no financieros, mientras que la media autonómica se fijó en los 2 puntos, con Navarra (5,1) y Canarias (5,6) a la cabeza.
También señala el informe que la variación de los recursos sujetos a entregas a cuenta y liquidación del Sistema de Financiación Autonómica entre 2015 y 2023 aumentó en Castilla y León 1,1 puntos porcentuales sobre el PIB, mientra que la media autonómica se estableció en los 1,3 puntos de incremento.
En términos de empleos no financieros, el documento de Fedea sitúa a Castilla y León con un incremento de 0,8 puntos porcentuales sobre el PIB -la media autonómica fue de 1,1 puntos-.
Estado del bienestar
Detalla que el aumento de los gastos del Estado de bienestar se ha repartido de la manera siguiente: el gasto en sanidad ha aumentado un 40,6 %, en educación un 30,7 % y en protección social un 53,8 %.
En términos reales, debido a las elevadas tasas de inflación registradas en los últimos años, los incrementos han sido menores y el gasto total, descontada la subida de precios, ha aumentado en un 14,8 %, el gasto en sanidad en un 21,2 %, en educación el 12,6 % y en protección social el 32,5 %.
Por comunidades, el gasto en general se ha incrementado en todas ellas, más en Canarias, Navarra y la Comunidad Valenciana, y menos en Extremadura, Asturias y Cantabria.
Fijándose en el gasto real en las partidas de bienestar social entre 2011 y 2022, afirma que ha crecido tanto en el conjunto del país como en la mayor parte de las regiones y que, salvo en Castilla-La Mancha y en Asturias, «se han recuperado con creces los recortes en el estado de bienestar iniciados en el primer lustro de la década pasada».
Destacan los crecimientos de Baleares (23,7 %), Canarias (19,3 %) y País Vasco (15,7 %) y en el lado contrario llama la atención sobre la reducción del gasto en Asturias (-4,5 %) y Castilla-La Mancha (-10,0 %) en el citado periodo, mientras que en el caso de Castilla y León el retroceso fue del 0,4 por ciento.
En el caso de Castilla-La Mancha, señala que esta región no ha recuperado aún el nivel de 2011 dado que fue la que más había ajustado el gasto entre 2011 y 2014 -durante la etapa de Gobierno de María Dolores de Cospedal-, reduciéndolo cerca de un 25 % en términos reales.
Se fija asimismo en el nivel de gasto en el Estado del bienestar por habitante ajustado y muestra una diferencia notable entre las diferentes comunidades, con País Vasco (125 puntos sobre 100) y Navarra (124) al frente y Galicia (92) y Baleares (93) en el lado contrario, con Castilla y León en 98 puntos.
En conjunto, señala, las comunidades autónomas han sido el nivel de la istración que más ha ajustado el déficit entre 2015 y 2023 (0,8 % del PIB).
