Valladolid (EFE).- La Junta de Castilla y León ha declarado este jueves la emergencia cinegética en casi cuatrocientos términos municipales de la comunidad, en Salamanca, Ávila, Palencia y Segovia, por la sobrepoblación de ungulados como jabalíes, corzos o gamos, según publica el Boletín Oficial de Castilla y León.
En la rueda de prensa posterior al Consejo de Gobierno autonómico, el consejero de Medio Ambiente, Vivienda y Ordenación del Territorio, Juan Carlos Suárez-Quiñones, ha indicado que el objetivo de esta orden es la reducción de la población silvestre de estas especies, la cual tiene una incidencia en la zoonosis entre animales.

Aunque el consejero ha indicado que es «difícil» determinar la población de la fauna silvestre, sí que ha asegurado que esta ha aumentado en los últimos años, por lo que reducirla durante «el tiempo que sea necesario» hasta que se logre una «disminución clara» es el objetivo principal de esta orden.
Entre las medidas que incluye esta orden, se encuentra la de facultar a los titulares cinegéticos a realizar controles poblacionales en cualquiera de las modalidades de caza mayor, quedando sometidos únicamente al régimen de comunicación, dentro de los términos en los que se declara la emergencia.
Asimismo, al objeto de «incrementar la eficacia de las acciones», en los ganchos al jabalí, ya se trate de acciones de caza sostenible o de controles poblacionales, podrá emplearse un número de perros superior a treinta y se permitirá que el número conjunto de cazadores en los puestos fijos y de batidores pueda llegar hasta treinta y nueve personas.
Lobos para el control de ungulados
Preguntado en la rueda de prensa por el reciente estudio de la Universidad de Valladolid (UVa) y el CSIC que propone el aumento de la población de lobos para el control de los ungulados, el consejero de Medio Ambiente ha desechado esta posibilidad ya que «la población del lobo está en claro aumento» y eso no ha conllevado la disminución del número de ungulados como el jabalí o el corzo.

Sin embargo, cuestionado por si Castilla y León tiene entonces ya elaborado el censo de población del lobo para afirmar que su población está en «claro aumento», Suárez-Quiñones ha reconocido que el Ejecutivo autonómico aún no tiene finalizado dicho informe, pero los datos que poseen hablan de que la población del lobo está en «claro aumento».
«Hace cuarenta años la población del lobo era de 500 y ahora hay más de 2.000», ha comparado el consejero de cuando el lobo ibérico estaba en serio peligro de extinción.
Finalmente, la Junta de Castilla y León también ha publicado este jueves la orden por la que se aprueba el Plan de Gestión del Jabalí en la Comunidad de Castilla y León, que permitirá, entre otras cosas, que este ungulado pueda ser cazado «en cualquiera de las modalidades de caza mayor».
Del mismo modo, la orden contempla que no se establecerá superficie mínima exigible para el desarrollo de monterías y ganchos y no se establecerá limitación para la repetición de monterías a lo largo de la temporada cinegética, entre otras medidas.EFE