Valladolid (EFE).- La Fiscalía ha atribuido al único investigado por la muerte de Esther López, Óscar S.M., la supuesta autoría de un delito de homicidio, las acusaciones particulares de asesinato, y la defensa ha solicitado el sobreseimiento, cuestiones sobre las que la jueza decidirá a partir del 8 de enero.
Las partes personadas en la causa han acudido este viernes al Juzgado de Instrucción Número 5 de Valladolid para fijar su posición respecto al investigado por el caso de Esther López, desaparecida el 13 de enero de 2022 y hallada muerta el 5 de febrero de ese año en una cuneta en Traspinedo (Valladolid).
Unas cuarenta personas se han concentrado frente al edificio de los Juzgados con pancartas en las que se podía leer «Justicia para Esther» y con gritos de «asesino», entre otras expresiones, en medio de una visible presencia policial ante la sede, a la que el investigado ha entrado a bordo de un vehículo.

Ante la jueza, la Fiscalía ha reproducido el escrito que ya había presentado previamente para pedir que el procedimiento se transforme en tribunal del jurado, en el que ya había planteado un posible homicidio y omisión del deber de socorro, han explicado fuentes jurídicas a los periodistas.
Las acusaciones insisten en el delito de asesinato
La acusación particular que representa a la hermana de la víctima mortal ha expuesto la existencia de un delito de asesinato, omisión del socorro, detención ilegal, secuestro y lesiones agravadas, en la misma línea que la acusación particular que representa a los padres de Esther López, mientras la defensa de Óscar S.M. ha reclamado el sobreseimiento de la causa respecto al único investigado.
La abogada del investigado ha explicado que desde su perspectiva «no hay indicios racionales de imputabilidad» para Óscar S.M.
Respecto a la causa fundamental de la muerte de la víctima que se baraja, que es el atropello, la letrada ha explicado que hay una máxima en todos los atropellos que establece que en el cuerpo de la víctima y en el vehículo debe quedar algún rastro del arrollamiento.
«En el vehículo de Óscar no hay ningún rastro de atropello, las inspecciones oculares primeras descartaron los daños exteriores e interiores» y hay un vídeo que se publicó en prensa en el que el coche está «impecable», aunque después apareció un daño, una pequeña abolladura, que «todavía no se nos ha explicado» cómo y cuándo se ha producido, ha sostenido.

En cuanto al cadáver, no presenta ningún vestigio, ni ninguna partícula, ni ningún rastro, ni nada que implique a Óscar S.M., ha explicado la abogada, quien ha detallado que lo único que apareció fueron unas partículas de color azul que podrían ser compatibles con una pintura azul, y el coche de Óscar no es azul.
La defensa ha pedido «muchas diligencias de prueba» y más declaraciones, sobre todo por acreditar la fecha en la que aparece el cadáver en la cuneta.
La acusación ha mantenido hoy que fue el 13 de enero cuando se depositó allí el cadáver y «nosotros mantenemos que es imposible» como mantuvo casi todo el mundo que participó con las batidas realizadas para buscar el cuerpo antes de su hallazgo, ha añadido.
Fecha clave: a partir del 8 de enero
Acerca de la práctica de esas diligencias de prueba, la instructora del caso decidirá después del 8 de enero por escrito y optará por itir o no itir esas solicitudes y si sigue adelante con el procedimiento respecto a Óscar o dicta el sobreseimiento.
El abogado de la hermana de Esther López ha especificado que lo que la jueza decidirá a partir del 8 de enero mediante un auto será sobre la prueba que ha pedido la defensa, mientras ninguna de las acusaciones, ni la pública ni la particular, ha pedido prueba alguna porque entienden que «está suficientemente acreditado».
Se ha trata de «una instrucción que ha sido ejemplar», con un informe de la Guardia Civil como «yo creo que no se ha visto ninguna instrucción en España y que desde luego deberá ser valorado posteriormente en juicio», ha remarcado el letrado.
El abogado ha dicho que la defensa ha pedido una «multitud de pruebas», unas demandas que, a su juicio, suponen una estrategia de la defensa de «pedir mucho para que me den algo».
Para el letrado, ninguna de estas pruebas tiene relación con el hecho más relevante, que es el asesinato; tienen que ver con el hallazgo del cuerpo sin vida, que ya se dijo que fue «muy dificultosa» y que la propia persona que lo encontró lo hizo «por pura casualidad».
«Lo lógico y lo natural es ir a juicio y que ahí se decidan todas las cuestiones», ha resumido. EFE