La iglesia de la Vera Cruz, uno de los epicentros de la Semana Santa de Valladolid, luce desde este martes una nueva cúpula en sustitución de la anterior, desplomada el pasado 25 de junio sin que se produjeran daños personales y artísticos.EFE/R. García

Valladolid recupera su perfil con la nueva cúpula de la Vera Cruz

Valladolid (EFE).- La iglesia de la Vera Cruz, uno de los epicentros de la Semana Santa de Valladolid, luce desde este martes una nueva cúpula en sustitución de la anterior, desplomada el pasado 25 de junio sin que se produjeran daños personales y artísticos en las numerosas esculturas de madera policromada de Gregorio Fernández.

Una grúa de grandes dimensiones ha necesitado de tan sólo tres horas para encajar los tres elementos de la nueva estructura: la parte decorativa (cruz, veleta y bola dorada), el chapitel, y la linterna que ha sido encastrada en una media naranja construida en ladrillo y reforzada con madera de pino.

Seis meses después

En apenas seis meses desde el desplome por colapso de toda la estructura -menos de tres desde el comienzo de las obras de restauración- ha recuperado su estructura original una iglesia terminada de construir en 1595 como sede de la cofradía de la Vera Cruz, la más antigua documentada en la ciudad, fundada en 1498.

«Desde noviembre hemos estado trabajando todos los días, incluidos los de Navidad, para cumplir con el plazo previsto (21 de enero)», ha explicado a EFE Javier Rivero, jefe de obras y miembro de la segunda generación de Fernando Rivero Restauración, la empresa de Valladolid que se ha encargado de la reconstrucción y montaje.

Ya solo quedan algunos remates externos y la decoración del interior de la cúpula con la recreación de las molduras y policromías originales, por lo que en condiciones normales, «si todo va bien», la cofradía, vecinos y visitantes podrán disfrutar de la iglesia de la Vera Cruz durante la próxima Semana Santa (del 13 al 20 de abril).

Restauración y recreación

La cruz que corona toda la estructura y la veleta han sido restauradas en gran medida, mientras que la bola es completamente la original y de nuevo cuño son el chapitel, forrado con pizarra de Galicia, y la linterna octogonal, hecha en madera con revoco tradicional, ha añadido.

Entre las novedades destaca la recuperación de cuatro ventanas de la linterna, hasta las ocho que tuvo en su origen y que durante la década de los noventa del pasado siglo se redujeron a la mitad.

Tanto los elementos de nueva construcción, recreación y ensamblaje, como la restauración de piezas originales, han seguido su curso en una nave del polígono industrial San Cristóbal donde han permanecido hasta el final de los trabajos y su traslado hasta el templo.

El presupuesto de las obras, en torno a medio millón de euros, ha sido financiado por el Ayuntamiento de Valladolid, archidiócesis y Junta de Castilla y León: «La Vera Cruz y la calle Platerías volviendo a su ser. Seguimos!!!», ha escrito el alcalde, Jesús Julio Carnero, en un mensaje difundido a través de una red social junto a una fotografía del conjunto restaurado.

Desplome

El pasado 25 de junio, pasadas las 13 horas, la cúpula colapsó por el deterioro del material, cayó a plomo desde una veintena de metros y dejó un boquete de unos diez de diámetro a la altura del crucero, sin que se produjeran daños personales, ya que en esos momentos cinco obreros se encontraban en la terraza del templo junto a la cúpula.

El templo había cerrado sus puertas dos días antes tras una alerta de los técnicos responsables de una obra, presupuestada en 150.000 euros financiados por la Junta de Castilla y León, y que en principio no obedecía a los riesgos estructurales detectados con posterioridad.

Tampoco sufrieron años, más allá de la acumulación de polvo, las tallas y conjuntos escultóricos que Gregorio Fernández labró para la cofradía durante el primer tercio del siglo XVI, un valioso patrimonio histórico y artístico que cada año sale en andas o a hombros de los cofrades de la Vera Cruz durante la Semana Santa.

Técnicos de la Fundación Las Edades del Hombre inspeccionaron su estado y dirigieron su traslado hasta la cercana catedral e iglesia de San Miguel para su depósito temporal, conservación y seguridad, durante las obras de la Vera Cruz. EFE