Patricia Carro|Burgos (EFE).- El reto más importante al que se enfrenta la Universidad de Burgos, tras cumplir 30 años, es promover un sentimiento de pertenencia con el objetivo de impulsar un modelo 4.0, centrado en las necesidades del entorno y vinculado al desarrollo tecnológico, para crear el talento que marcará el futuro de la sociedad.
“Lo que ya está siendo escaso, y va a serlo a partir de ahora en los próximos años, es el talento, y el desarrollo de las sociedades va a depender como siempre pero más ahora de ese talento”, ha apuntado el nuevo rector de la UBU, José Miguel García, en una entrevista con la Agencia EFE, tras tomar posesión del cargo el pasado 15 de enero.

Ha insistido en que, más allá de tecnologías, combustibles o elementos químicos -esos denominados ‘tierras raras’ y que son claves para dispositivos tecnológicos- “lo que realmente va a definir el desarrollo de las sociedades son las personas”, y la Universidad tiene que apostar por su formación, adaptada al entorno, atendiendo a la vertiente tecnológica pero sin descuidar la humanista.
“La Universidad 4.0 es una universidad centrada en las necesidades del entorno, vinculada con el desarrollo científico-tecnológico, y todas las oportunidades que ofrece, pero también con la parte humanista que es especialmente relevante para el desarrollo humano”, ha insistido García, para que pueda contribuir a la riqueza, el desarrollo socioeconómico y el bienestar de la sociedad.
Matemáticas, la gran olvidada
En esa idea de atender las demandas del entorno se enmarca la puesta en marcha del grado de Matemática Aplicada y Computación, la gran novedad de la UBU junto con Medicina, que se empezará a impartir en el próximo curso académico.
“Las matemáticas son fundamentales en este mundo moderno de desarrollo tecnológico”, ha asegurado el rector, que ha recordado que todo gira en torno los datos, su análisis y procesamiento desde la inteligencia artificial hasta el mundo digital, y cualquier iniciativa empresarial que busque la eficiencia, aumentar su capacidad de predicción y adaptación o incluso su negocio.
“Y todo eso lo hacen los matemáticos”, ha incidido, así que para las empresas es “crítico” contar con profesionales formados en matemáticas, y en el caso de la UBU, el grado permitirá además complementar otras titulaciones, como elemento fundamental para el desarrollo económico.
Más títulos para la Universidad de Burgos, más campus, más financiación
José Miguel García ha insistido en que la Universidad de Burgos está apegada al territorio, por eso su principal objetivo para esos seis años de mandato es generar esa sensación de pertenencia en la sociedad, “que es lo que va a generar la confianza y un futuro brillante para la UBU”.
Continuarán apostando por la descentralización, ampliando los títulos en el Campus de Miranda de Ebro y trabajando para poner en marcha el Campus de Aranda de Duero, en ambos casos atendiendo a las demandas de los ayuntamientos, del tejido socioeconómico y en negociación con la Junta, para concretar la financiación.
En el caso de Aranda, el rector mantendrá en próximas fechas una reunión con el alcalde de la ciudad para conocer las obras de rehabilitación del centro cívico Virgen de las Viñas y estudiar la instalación de espacios universitarios, y García recuerda que no todo se limita a grados o máster, hay también opciones de títulos propios, además de toda la oferta de extensión universitaria.
Igualmente, la UBU está pendiente de la rehabilitación del antiguo Hospital de la Concepción, en el que el Ministerio de Cultura invertirá 30,5 millones para recuperar el inmueble y destinarlo a Archivo Histórico Provincial y usos de la Universidad de Burgos, y cuyas obras arrancarán ese 2025.
García está convencido de que el Hospital de la Concepción será un realidad en tres años y medio y, si bien la Universidad tiene claro el proyecto, con propuestas como crear la Casa del Estudiante o actividades de extensión universitaria, sabe que toca redefinirlo para adaptarlo a nuevas necesidades, siempre con el objetivo de que sea un agente dinamizador del entorno.
Éxito de la Universidad de Burgos en investigación
La investigación seguirá entre las prioridades del nuevo equipo rectoral, de mano del proyecto ‘UBU Innovación’, una apuesta por la generación de proyectos de investigación y empresas con base científico-tecnológica que generen empleos de alto valor para la sociedad.
El rector considera que la UBU “lo está haciendo muy bien” en materia de investigación, captando fondos de convocatorias competitivas nacionales e internacionales, y ha insistido en que sus posibilidades y el porcentaje de éxito es superior a la media nacional y europea: “competimos sin complejos, nos sentimos cómodos y nuestros grupos de investigación han avanzado muchísimo”, ha señalado.
Burgos mira hacia la IA y la robótica como ventaja competitiva para su grado de Medicina
El rector ha anticipado además que la medicina del futuro, una medicina preventiva y de precisión, en la que juegue un papel destacado la Inteligencia Artificial y la robótica, será la seña de identidad del grado de Medicina que comenzará a impartir la Universidad de Burgos (UBU) en el curso académico 2026/2027, y en cuyo plan de estudios, selección de profesorado y definición de infraestructuras trabajan actualmente.
Los estudios de Medicina están regulados en un porcentaje muy alto, del 85 %, ha reconocido García, aunque ellos cuentan con una ventaja competitiva para tratar de diferenciarse del resto de universidades: Burgos arranca ahora su proyecto formativo.
“Nuestra singularidad es la inserción en el entorno y la capacidad tecnológica”, ha recordado, así que apuestan por diseñar un nuevo grado en Medicina sustentado en las nuevas realidades tecnológicas, la inteligencia artificial o la robótica, “empaquetándolo” hacia una medicina del futuro, una medicina preventiva y de precisión.
García ha afirmado que empiezan “en el momento adecuado” y, si bien es realista y sabe que están ante un reto complejo, no exento de dificultades, también destaca que cuentan con el apoyo de la sociedad, del tejido económico y hay voluntad política, el apoyo de la Junta de Castilla y León, en materia de financiación como de infraestructuras.EFE