VALLADOLID, 07/03/2025.- Representantes de UGT y CCOO en Castilla y León se concentran este viernes en Valladolid para manifestar su compromiso sindical con la igualdad real entre mujeres y hombres, en la víspera del 8M.EFE/Nacho Gallego

UGT y CCOO ven avances en igualdad ante el 8M pero alertan de la amenaza de la ultraderecha

Valladolid, 7 mar (EFE).- UGT y CCOO de Castilla y León han valorado este jueves, ante la celebración mañana del 8M, los avances que se han dado en igualdad entre hombres y mujeres con el incremento del SMI y la reforma laboral, aunque han alertado de la amenaza global de la ultraderecha, conquistando espacios que no tenían con amenazas como en el caso de Castilla y León hacia el derecho al aborto.

Así lo han transmitido este viernes las responsables autonómicas de Mujer e Igualdad en ambos sindicados, Yolanda Martín, en CCOO, y Victoria Zumalacarregui, en UGT, en un acto sindical en la plaza de la Universidad de Valladolid, en el que arropadas por varias decenas de sindicalistas han detallado su manifiesto conjunto para mañana 8 de marzo, Día Internacional de la Mujer, que plantean con el lema: «Igualdad real, compromiso sindical».

Imagen de archivo de la manifestación con motivo del Día Internacional de la Mujer del 2023 en Valladolid. EFE/Nacho Gallego.

Mañana en las calles en las manifestaciones del 8M

Mañana ambos sindicatos respaldarán las manifestaciones de las coordinadoras de mujeres en toda la comunidad, donde la brecha de género en la tasa de actividad se sitúa en 2024 casi en un 10% (9,42%); y la de empleo es de 10,37 puntos porcentuales de diferencia; con ocho de cada diez empleos a tiempo parcial desempeñados por mujeres en Castilla y León.

Zumalacarregui ha valorado el incremento de los salarios o que la brecha salarial entre hombres y mujeres haya disminuido gracias al salario mínimo interprofesional, la reforma laboral y a distintas leyes que se han hecho en planes de igualdad.

Mejora la igualdad con SMI y reforma laboral pero falta mucho, mucho

Por ello, en este 8 de marzo enfocarán hacia esos buenos resultados aunque «sin olvidarnos de que falta mucho, mucho, mucho por conseguir» para seguir reduciendo la brecha salarial y defendiendo los planes de igualdad.

Y en cuanto al reciente informe del Consejo de Cámaras de Comercio de la comunidad que indica que cuatro de cada diez empresas no tienen protocolos de acoso sexual en el trabajo, pese a ser obligatorio independientemente de su tamaño, tanto la responsable en Igualdad de UGT como su homóloga en CCOO, Yolanda Martín, han pedido más inspecciones de trabajo para que eso se cumpla.

El acoso sexual que no cesa

Martín también ha «sacado pecho» de la labor hecha en negociación colectiva, en convenios sectoriales, introduciendo cláusulas antidiscriminatorias hacia la mujer, cláusulas que igualen las oportunidades entre mujeres y hombres; o en la negociación de planes de igualdad y también en la negociación de los protocolos de prevención del acoso sexual y del acoso por razón de sexo.

La responsable de Igualdad de CCOO se ha referido a los recientes casos de acoso como el de Rubiales o en el entorno político; y pese a las mejoras ha advertido de que falta mucho camino por recorrer y se ha referido a la «amenaza global de la ultraderecha que está conquistando espacios que antes no tenía».

El recuerdo de Vox en la Junta

«Lo hemos tenido aquí, también en Castilla y León y en cualquier momento esto puede volver a suceder. Vimos cómo tuvimos una amenaza hacia el derecho al aborto de las mujeres con ese protocolo fantasma que se lanzó», ha recordado.

Y por ello ha demandado que hay que unir fuerzas, en un camino duro para que esos derechos no se pierdan; lo que requiere además de una voluntad empresarial y una voluntad desde todas las partes del Gobierno y, por supuesto, desde la ciudadanía.

Martín ha vuelto a reivindicar que se dignifiquen los cuidados, un sector con un alto porcentaje de mujeres tanto en el ámbito privado como en el ámbito público que supone «un nicho de empleo muy importante en Castilla y León», con trabajos que deben tener «una valoración tanto económica como de condiciones de trabajo».