El portavoz del gobierno regional de Castilla y León, Carlos Fernández Carriedo, ofrece una rueda de prensa tras el Consejo de Gobierno, este jueves. EFE/Nacho Gallego

Castilla y León no ve problema en el «pinganillo» ni el idioma, sino en no entenderse

Valladolid (EFE).- El portavoz de la Junta de Castilla y León, Carlos Fernández Carriedo, ha asumido este jueves que el problema de la Conferencia de Presidentes que se celebrará mañana en Barcelona no está en el uso de pinganillos -para traducción- ni el idioma que utilicen los presidentes autonómicos, sino en no «entenderse» para alcanzar acuerdos, algo que ve difícil por la falta de preparación de los temas por parte del Gobierno de España.

En la rueda de prensa posterior al Consejo de Gobierno, preguntado por si el presidente de la Junta, Alfonso Fernández Mañueco, también se ausentaría de la reunión en caso de que no le hablen en castellano, como ha anunciado su homóloga madrileña y compañera del PP, Isabel Díaz Ayuso, el portavoz ha dicho que el uso de pinganillo no le «molesta», pero ha lamentado que mientras las autonomías gobernadas por el PP han planteado propuestas encima de la mesa el Gobierno sólo ha puesto «los pinganillos».

La polémica del «pinganillo» ha venido dada por el anuncio realizado por el Gobierno en el sentido de que, por primera vez en este foro, los presidentes autonómicos de comunidades donde está reconocida la cooficialidad de su lengua podrán utilizarla -Galicia, País Vasco y Cataluña-, por lo que se ha organizado un servicio de traducción simultánea.

Ha recordado que en el caso de Castilla y León, por medio de Mañueco, trasladará mañana sus inquietudes sobre la necesidad de alcanzar un acuerdo multilateral de reforma del modelo de financiación autonómica, su negativa a la condonación de la deuda autonómica, la necesidad de tomar medidas para paliar la escasez de profesionales sanitarios y el desarrollo de infraestructuras energéticas y ferroviarias, entre otros asuntos.

«Han conseguido que en vez de hablar de los problemas reales estemos hablando de los pinganillos o la lengua en que quieran hablar algunos presidentes autonómicos», ha resumido.

Sin respuesta a la «carta» de Sánchez sobre vivienda

El portavoz se ha quejado de que el Gobierno no haya aprovechado la reunión preparatoria para entregar a los gobiernos autonómicos documentación sobre las propuestas que se debatirán a instancia suya y, en concreto, al ser preguntado por la propuesta para un nuevo pacto sobre vivienda, que incluya una mayor aportación de las autonomías y la imposibilidad de vender las viviendas protegidas para asegurar que siguen dando servicio público para facilitar el a la vivienda de otras familias.

En este sentido, Carriedo ha lamentado que ayer se enteraran «por la prensa» de esta propuesta de acuerdo en materia de vivienda y que fuera después de su publicación por parte de algún medio de comunicación cuando el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, envió una carta «que no concreta mucho el contenido de la propuesta».

«Una pena», ha lamentado el portavoz, quien no ha entrado en el fondo de la cuestión sobre las medidas adelantadas por Sánchez sobre vivienda, sino que únicamente ha alertado de que la financiación de acuerdos en esta materia ya es mayoritaria por parte de la Junta de Castilla y León y que, en anteriores foros, el Gobierno ya comprometió la construcción de 180.000 viviendas y la creación de una empresa pública, sin que haya habido avances al respecto. EFE