La figura de 'The Inflatable Refugee' en la platea del Gran Teatre del Liceu. EFE/Sergi Panizo/Liceu

El Liceu acoge la gran figura hinchable ‘The Inflatable Refugee’ para reflexionar sobre el drama de los refugiados

Barcelona, (EFE).- Una gran figura hinchable de seis metros de altura, que quiere simbolizar la deshumanización de los refugiados, ‘The Inflatable Refugee’, ocupa hasta el 30 de junio el Salón de los Espejos del Gran Teatre del Liceu, poniendo en relieve el contraste entre el mundo de la ópera y la situación de los refugiados.
Los artistas belgas Schellekens & Peleman son los autores de esta obra, que hoy también ha ocupado durante un corto espacio de tiempo la platea del teatro, y que representa a un refugiado sentado, con un salvavidas naranja en el cuello.
Sus creadores la han realizado coincidiendo con la crisis migratoria actual, buscando generar, allí donde se ha instalado, el «contraste», la «reflexión», la «conciencia social y el diálogo profundo».

Una figura exhibida en distintos escenarios


Antes de recalar en el Liceu, se ha podido ver en Venecia (Italia), Uppsala (Suecia), Copenhague (Dinamarca), Malines y Ostende (Belgica), Melbourne (Australia) y Breda (Países Bajos).
La figura está compuesta con el mismo material que se utiliza para construir las barcas de los «traficantes de personas» que cruzan el Mediterráneo, un material, según destacan los artistas, «demasiado frágil para resistir las olas, dejando a los pasajeros de estas embarcaciones extremadamente vulnerables».

Sentido del humor con un toque surrealista


Los artistas visuales destacan por unas piezas que surgen de la observación de la sociedad y que buscan, a través del arte, que se reflexione sobre la actualidad, sin olvidar un cierto sentido del humor y un toque surrealista.
Les gusta mostrar su obra en espacios en los que la gente no espera encontrarse con su arte, ahora en el Salón de los Espejos, antesala de los palcos y la platea del Gran Teatre del Liceu de Barcelona, lugar habitual de reunión de los asistentes a la ópera, especialmente, en los descansos de las obras, que suelen ser de larga duración.

Imagen de ‘The Inflatable Refugee’ instalado en el Salón de los Espejos del Liceu. EFE/Mario Wurzburger/Liceu


Schellekens&Peleman defienden que el arte tiene la «capacidad de asumir el papel de una voz poderosa y visionaria en la sociedad» y que debería formar parte de la vida cotidiana.
La instalación, ‘The Inflatable Refugee’, se enmarca dentro del proyecto ‘Liceu de las Artes’, que integra diferentes disciplinas artísticas con la ópera como sujeto principal.
Desde que el director artístico Víctor Garcia de Gomar accediera al cargo, hace cinco años, ha pretendido convertir el coso operístico en un Centro de las Artes, en el que confluyan diversas formas de creación, desde las artes visuales, a la antropología, la filosofía, la poesía o la ciencia.
Desde el primer día de su mandato, dejó claro que en una «sociedad líquida y llena de factores cambiantes» quería que el teatro fuera un centro de «preguntas en el que el interrogatorio fuera un símbolo permanente». EFE