Barcelona, (EFE).- La lenta superación de la extrema sequía y la suavidad térmica que vive Cataluña se traducen en intensas polinizaciones invernales y primaverales, por lo que se prevé una primavera dura para las personas que sufren alergia.
Es la previsión que ha dado a conocer este jueves los investigadores de la Red Aerobiológica de Cataluña (XAC) del Instituto de Ciencia y Tecnología Ambientales (ICTA) y del Departamento de Biología Animal, Biología Vegetal y Ecología de la Universidad Autónoma de Barcelona (UAB).
En Cataluña, cerca de dos millones de personas padecen alguna patología alérgica respiratoria, provocada por polen en un 40% de los casos.
Se prevé que los casos se duplique en 2050, pues el cambio climático y la contaminación están modificando los patrones de polinización y aumentando la alergenicidad del polen.
Según los investigadores de la XAC, las personas alérgicas a los pólenes invernales podrían estar experimentando en Cataluña los síntomas habituales de esta época e, incluso, algunas personas sensibilizadas podrían haber empezado a sufrir síntomas de alergia.
A principios de 2025, las polinizaciones invernales de ciprés, avellano, fresno y parietaria han sido significativas, superando las medias históricas (aunque no los máximos históricos) registrados desde 1994, según la UAB.
Alergia hasta abril
El período de riesgo de alergia comenzó en enero y podría extenderse hasta finales de abril para el ciprés, y hasta el verano para la parietaria.
Las polinizaciones invernales y primaverales han sido y serán intensas en parte por la lenta superación de la extrema sequía de los últimos años y la suavidad térmica, según los investigadores de la XAC.
En este contexto, la previsión es que las polinizaciones primaverales de especies arbóreas (plátano, sauce, álamo, olmo, arce, pino, morera, roble-encina, abedul y olivo) comiencen con normalidad y con fuerza, y tendrán la duración habitual, según los investigadores.
Las polinizaciones de primavera-verano de especies herbáceas también comenzarán con normalidad y fuerza, pero su duración será superior a lo habitual debido a las lluvias previstas.
A pesar de temperaturas algo superiores a las habituales, la mayoría de las plantas han liberado el polen en su período habitual, sin adelantos; solo los olmos y los sauces han polinizado con unas semanas de retraso.
Si bien las lluvias -que han caído en los últimos tiempos y han contribuido a reducir la gravedad de la sequía- producen el efecto de limpiar puntualmente la atmósfera de pólenes y esporas, también favorecen que los pólenes de hierbas y las esporas de hongos aumenten posteriormente y prolonguen su presencia.
Los modelos meteorológicos indican que los meses de marzo, abril y mayo serán ligeramente más cálidos de lo habitual y con un régimen de lluvias habitual de primavera. EFE