Madrid (EFE).- El fallecimiento de tres personas por el incendio del pasado domingo en una residencia de mayores en Aravaca ha vuelto a poner el foco en la gestión de estos centros por parte del Gobierno de Isabel Díaz Ayuso y la izquierda en la Asamblea ha solicitado la celebración de un pleno extraordinario y la creación de una comisión de estudio.
El pleno de este jueves en la Asamblea ha arrancado con un minuto de silencio por las tres mujeres fallecidas a consecuencia del siniestro y, posteriormente, la presidenta madrileña ha anunciado que la Comunidad de Madrid se personará como acusación particular si la investigación de la Policía Nacional determina que hubo alguna negligencia.
A lo largo de la sesión de control la situación de las residencias ha tensado el debate político.
Díaz Ayuso ha acusado a la izquierda, sobre todo a Más Madrid, de utilizar con fines electoralistas las muertes, desde las residencias de mayores a la foto del pato del día de la mascletá madrileña.
“Entre la utilización de las residencias, los insultos personales, los discursos apocalípticos de Madrid y el bulo del pato, usted va camino de ministra”, ha dicho Ayuso.
Críticas directas a Ayuso
Bergerot ha respondido a la presidenta que «no tiene corazón» porque «no se digna a reunirse con las familias» de “7.291 personas que murieron sin esperanza, con dolor y en soledad”: «Lo inhumano fue creer que usted podía decidir quién moría y quién vivía”, ha añadido Bergerot.
Una idea que ha repetido el diputado de Más Madrid Pablo Padilla, quien ha agregado durante su intervención que “Ayuso no es la víctima es la verdugo”.
En la misma línea, el diputado socialista Jesús Celada ha acusado al Gobierno madrileño de “ocultar información” sobre las actas de la pandemia y sobre el incendio de Aravaca, mientras el PP dice que se le acusa de «genocidio», pero «esto no va de victimismo, va de salvar la vida de los madrileños y evitar que esto vuelva a suceder”.
Ante estas acusaciones la consejera de Familia y Políticas Sociales, Ana Dávila, ha instado a los grupos de la izquierda a respetar a los 35.000 s madrileños de las residencias de mayores y sus familias, que “saben que nuestros centros son seguros”.
El tono ha ido subiendo a medida que avanzaba el pleno y las acusaciones de la oposición a la gestión del Ejecutivo regional, lo que ha llevado a varias llamadas de atención por parte del presidente de la Asamblea, Enrique Ossorio, a los diputados de las bancadas de la izquierda.
Un pleno extraordinario y una comisión de estudio para evaluar la situación de las residencias de la región
Ante el incendio de la residencia de Aravaca, la izquierda (Más Madrid y PSOE) están intentando activar diferentes iniciativas para fiscalizar la gestión de estos centros.
El grupo líder de la oposición ha solicitado un pleno extraordinario para el próximo jueves 28 de febrero para tratar la situación de las residencias de mayores en la región.
Mañana, viernes, se celebrará una Junta de Portavoces extraordinaria -tras la celebración de la Mesa de la Asamblea, en la que el PP tiene mayoría absoluta y tiene que dar el visto bueno a la reunión- para activar dicho Pleno, han indicado fuentes parlamentarias a EFE.
«Los trágicos hechos acaecidos recientemente justifican la celebración urgente de un debate en que puedan tratarse los aspectos relacionados con los centros residenciales de personas mayores públicos en la Comunidad de Madrid», han justificado desde Más Madrid.
El portavoz del grupo parlamentario socialista, Juan Lobato, ha indicado que registrarán la creación de una comisión de estudio para la mejora del sistema de atención de las residencias de mayores y centros de día en la región.
Por su parte, la líder de Vox, Rocío Monasterio, se ha mostrado a favor de la celebración del pleno extraordinario pero ha rechazado la petición de los socialistas.