Alicante (EFE).- Fátima, la mujer de 34 años que murió apuñalada a manos de su expareja en Sagunto (Valencia), decidió convivir y tener una segunda hija con el detenido tras expirar la denuncia que puso contra él en 2016, aunque hace unos meses decidió separarse.
Tras un minuto de silencio en Alicante, la delegada del Gobierno en la Comunitat Valenciana, Pilar Bernabé, ha explicado que la denuncia de Fátima contra el asesino fue en 2016 y que dos años después expiraron las medidas contra el hombre, de 39 años y al igual que la víctima marroquí.
Posteriormente, reanudaron la convivencia y tuvieron a la segunda hija, que tiene ahora 4 años, y se ha mantenido esa situación hasta hace alrededor de tres meses, cuando le mujer se separó aunque sin que haya constancia de una nueva denuncia o que expusiera su situación ante los servicios sociales de Sagunto.
La hija mayor, de 13 años, sigue debatiéndose «entre la vida y la muerte» en situación de coma inducido en un hospital tras caer por el patio interior.
El detenido por el asesinato está previsto que pase a disposición judicial a lo largo de las próximas horas, según la delegada del Gobierno, que ha insistido en la idea de lo «imprescindible» que es las mujeres o su entorno más inmediato denuncien para tratar de evitar la tragedia.

Muestras de condena en las instituciones
Las distintas instituciones de la Comunitat Valenciana se han concentrado este vienes y han guardado minutos de silencio en señal de repulsa por el asesinato de Fátima, la mujer de 34 años que murió apuñalada a manos de su expareja en Sagunto (Valencia).
El president de la Generalitat, Carlos Mazón, ha presidido el minuto de silencio convocado en Elche (Alicante), donde ha asegurado que el Consell reforzará «todas y cada una de las partidas» dirigidas al refuerzo, prevención, protección y defensa de la mujer frente a la violencia machista.
Mazón ha afirmado que la violencia machista es «una lacra inasumible y execrable» y ha deseado «la pronta recuperación» de la hija mayor de Fátima, que sigue ingresada, y de la que espera que «pueda superar no sólo físicamente lo ocurrido» sino también desde el punto de vista «anímico y humano».
En València, ante el Palau de la Generalitat se han concentrado la vicepresidenta segunda del Consell, Susana Camarero, el vicepresidente primero, Vicente Barrera, y varios consellers, como la de Hacienda, Ruth Merino, y el de Sanidad, Marciano Gómez, demás de otros cargos de la Generalitat.
«Solo con la unidad la sociedad será fuerte»
Camarero ha defendido que «solo con la unidad de todos» la sociedad será lo suficientemente fuerte para erradicar la violencia machista, y ha recordado a las mujeres víctimas que «hay salida a ese infierno» y que las instituciones están a su lado.
La también consellera de Servicios Sociales, Igualdad y Vivienda ha afirmado ante los medios que más que buscar qué ha fallado en este caso, en el que a la víctima se le retiraron las medidas de protección en 2018, prefiere «mirar al futuro» y lanzar un «mensaje de esperanza a las víctimas».
«Hay salida al infierno de la violencia. Hay expertos, hay asociaciones, instituciones, istración y sociedad a su lado. Hay recursos a su disposición para que puedan salir», ha asegurado, y ha instado a estas mujeres a pedir ayuda.
También ha instado a los entornos de las víctimas a que las ayuden, las acompañen para que denuncien de la forma que sea: «Asistiendo a una comisaría, yendo a un juzgado, pero también a un servicio social, donde hay recursos y donde pueden pedir ayuda a las instituciones».
Camarero ha lanzado, además, un mensaje «al conjunto de la sociedad y de las fuerzas políticas: solo con la unidad de todos, el consenso, el pacto y el acuerdo seremos lo suficientemente fuertes para erradicar esta violencia», y ha añadido que «las pancartas no salvan vidas; la unidad, sí».
Dos pancartas en Les Corts
En cuanto a Les Corts, han guardado tres minutos de silencio, aunque lo han hecho con dos pancartas, una con el lema «No a la violencia contra las mujeres», donde se han colocado los diputados del PP y de Vox, encabezados por la presidenta de la institución, Llanos Massó (Vox), y otra con el lema «Les Corts contra la violencia machista», que ha aglutinado al PSPV y de Compromís.
Los ayuntamientos también han guardado minutos de silencio, entre ellos el de València, gobernado por el PP y Vox, cuya alcaldesa, María José Català, ha abogado por parar esta lacra y ha afirmado: «Si sirve visibilizarla, salir a la calle, mandar un mensaje a la infancia de que esa no es la sociedad que queremos, no vamos a parar de hacerlo».
En esta concentración, los socialistas han desplegado su propia pancarta, en la que se leía «no al terrorismo machista», y los concejales de Compromís han portado carteles con el lema: «Basta de violencia machista. Nos queremos vivas».