Loli Benlloch | València (EFE).- La ruptura de Vox con el PP y su salida del Gobierno valenciano cumple tres meses, en los que ambas formaciones han mantenido una relación que califican de «cordial» y ha habido pocas votaciones disonantes en Les Corts, si bien la prueba de fuego serán los presupuestos autonómicos de 2025.
Carlos Mazón, que se convirtió en president de la Generalitat tras cerrar el primer acuerdo con Vox en España después de las elecciones autonómicas de 2023 y destituyó a los tres consellers de Vox la misma noche en que el partido de Abascal anunció su salida de los Ejecutivos regionales, afronta ahora el reto de sacar adelante sus segundos presupuestos.
La aritmética parlamentaria obliga al PP a buscar acuerdos para salvar unas cuentas que este año han rozado los 30.000 millones de euros: sus 40 diputados de Les Corts le dejan a diez de la mayoría absoluta, y ya no tiene garantizados los 13 votos de Vox, que ha pasado de ser «socio leal» a «oposición constructiva».
Votaciones disonantes en Les Corts
Solo cuatro días después de la ruptura unilateral de Vox, esta formación dio un toque de atención al Consell del PP al reclamar que una medida estrella, el decreto ley de simplificación de la Generalitat, se tramitara en Les Corts como proyecto de ley -está ahora en el proceso de enmiendas, que pueden cambiar su contenido- por no haber tenido tiempo para estudiarlo.
A principios de septiembre, el PP pudo sacar adelante en Les Corts el incremento del sueldo de los empleados públicos gracias a los votos de la izquierda, pues Vox votó en contra porque incluía el incremento salarial de los cargos públicos, aunque el partido de Abascal sí respaldó el decreto ley de viviendas turísticas.

En el debate sobre el estado de la Comunitat de mediados de septiembre, PP y Vox apoyaron mutuamente la mayoría de sus propuestas, con excepciones: Vox no respaldó la de los populares sobre financiación autonómica, que no se aprobó, y el PP no votó las de Vox sobre inmigración, política lingüística o impuestos verdes.
Pese a todo, la relación actual entre PP y Vox es «muy cordial», asegura a EFE el secretario general del PPCV y uno de los negociadores del pacto de gobierno, Juanfran Pérez Llorca, quien explica que en muchos puntos siguen buscando acuerdos y cree que la oposición que hace Vox es «mucho más democrática» que la del PSPV, centrado en «bloquear» iniciativas.

La relación «sigue siendo bastante directa, continuada» y «cordial», indica a EFE el síndic de Vox en Les Corts, José María Llanos, quien defiende que son menos diputados que el PP, pero «necesarios» para las políticas de «regeneración económica y social y de libertad», por lo que siguen negociando cuestiones que «difícilmente» asumiría la izquierda, aunque hay asuntos en los que no van a «ceder».
Los presupuestos, con la inmigración como clave
El siguiente paso ahora son los presupuestos de la Generalitat para 2025, que deben entrar en Les Corts antes del 31 de octubre y que Vox pide que se negocien antes con ellos si se pretende su voto a favor; el PP afirma que la negociación empezará tras presentar el proyecto de ley y será «con todas las formaciones políticas».
La inmigración es una cuestión «nuclear» de Vox para apoyar los presupuestos -que no incluyan partidas para la acogida de inmigrantes ni ayudas a entidades que «colaboran con las mafias de la inmigración ilegal»-, un voto que decidirá el partido de manera uniforme, pero teniendo en cuenta «la actitud» del PP en las distintas comunidades autónomas.
En los últimos días Vox ha registrado en Les Corts varias iniciativas sobre inmigración: una para que se expulse a todos los inmigrantes «ilegales» de la Comunitat Valenciana y se cierren los centros de acogida, y otra para que se hagan pruebas para determinar la edad de los menores extranjeros no acompañados. El PP discrepa de la primera, pero ve «con buenos ojos» la segunda.
Aprobar o prorrogar los presupuestos
Para Pérez Llorca, «muchísimas de las políticas del cambio que tienen que continuar en esos presupuestos son políticas que han contado con el respaldo de Vox», por lo que «no debe ser muy difícil conseguir su apoyo», si bien hay que ir «partido a partido y momento a momento».
En todo caso, si finalmente hubiera que prorrogar los presupuestos actuales -algo que no pasa desde 1989-, el dirigente popular no cree que restara fuerza al ‘Gobierno del cambio’ que «está cada día más consolidado», y destaca que hay mecanismos para seguir trabajando por la «transformación» de la Comunitat.
Llanos señala que la «firme voluntad» de Vox es que puedan salir unos nuevos presupuestos para 2025, aunque prorrogar los actuales no sería «un drama» ni provocaría una «crisis institucional», y agradece finalmente que Mazón le haya hecho llegar su voluntad de mantener las leyes que aprobaron juntos, entre ellas la de Concordia. EFE