GRAFCVA4424. VALENCIA, 19/12/2024.- El chef José Andrés saluda a una voluntaria en la cocina central de su ONG, World Central Kitchen, durante la presentación del balance del trabajo realizado por la organización en la dana en Valencia y la valoración de la situación actual tras haber servido más de cinco millones de comidas en las últimas semanas. EFE/Manuel Bruque

José Andrés y sus «locos de la cocina» han repartido ya 5 millones de comidas tras la dana

GRAFCVA4422. VALENCIA, 19/12/2024.- El chef José Andrés saluda a una voluntaria en la cocina central de su ONG, World Central Kitchen, durante la presentación del balance del trabajo realizado por la organización en la dana en Valencia y la valoración de la situación actual tras haber servido más de cinco millones de comidas en las últimas semanas. EFE/Manuel Bruque

GRAFCVA4434. VALENCIA, 19/12/2024.- Voluntarios preparan comida en la cocina central de la ONG, World Central Kitchen, durante la presentación por parte del chef José Andrés del balance del trabajo realizado por la organización en la dana en Valencia y la valoración de la situación actual tras haber servido más de cinco millones de comidas en las últimas semanas. EFE/Manuel Bruque

GRAFCVA4425. VALENCIA, 19/12/2024.- Voluntarios preparan bocadillos en la cocina central de la ONG, World Central Kitchen, durante la presentación por parte del chef José Andrés del balance del trabajo realizado por la organización en la dana en Valencia y la valoración de la situación actual tras haber servido más de cinco millones de comidas en las últimas semanas. EFE/Manuel Bruque

València, (EFE).- La ONG World Central Kitchen, capitaneada por el chef José Andrés, llegó a Valencia el mismo día de la dana, el 29 de octubre, y desde entonces un «grupo maravilloso de locos de la cocina» ha permitido repartir más de cinco millones de comidas entre los afectados y la reactivación de 35 negocios locales en los municipios devastados por la riada.

José Andrés ha hecho este jueves un balance de los 51 días que esta organización lleva en Valencia, donde tiene previsto seguir al menos hasta el próximo mes de enero «y si hay que estar febrero y marzo también», ya que tiene previsto preparar un menú especial con pavo en Navidad o el roscón de Reyes el 6 de enero.

WCK llegó el mismo día de la dana


Los equipos de emergencia de WCK llegaron a Valencia la misma noche del 29 de octubre y, guiados por el principio de que «el plan se escribe solo, con los equipos sobre el terreno», comenzaron a repartir comida en Paiporta y Catarroja «de una forma muy loca, sin ton ni son, y donde parecía que nada tenía sentido».

«Es lo que hacemos siempre: nuestro primer lugar es la calle, nunca es crear un centro de mando», explica para detallar que comenzó entonces la llegada de cocineros de Valencia y de equipos de WCK de Madrid, Ucrania, Gaza, Líbano o Carolina del Norte, a los que se han ido sumando hasta un total de 15.000 voluntarios.

«Era imposible moverse, la gente a lo mejor no tenía dinero, los cajeros automáticos se habían ido, las tiendas habían desaparecido, las personas mayores no podían bajar porque no había ascensores y había que subirles la comida», explica el chef, que añade que fueron miles los voluntarios que por su cuenta y riesgo les llevaban el agua y comida que hiciera falta.

Según el chef, aunque las cosas sucedían de forma organizada, «los momentos más bonitos eran cuando sucedían de forma espontánea. Si planeas puedes estar haciéndolo durante un mes y nunca vas a saber cuál es el plan correcto, pero si te adaptas en el momento eres capaz siempre de estar cubriendo las necesidades puntuales que tiene la gente. Durante muchísimas semanas».

Importancia de la comunicación


Además de la comida, el apoyo de la emergencia ha ido más allá y desde la ONG se han proporcionado generadores, bombas de agua e internet vía satélite para ayudar a los servicios de emergencia tras la devastación ocurrida tras la dana que, según Andrés, ha sido «muy fuerte y potente por el lugar y lo masivo que ha sido».

El chef ha destacado la importancia de la comunicación en una tragedia como esta y ha explicado que los primeros días trajeron casi medio centenar de «satélites» que iban situado en los lugares que lo necesitaban.

Además, llevaron a Bonaire bombas muy potentes para ayudar a los equipos de la UME «en un momento donde el número de muertos empieza a ser un tema social o político por desestabilizar».

«Nunca se sabe, y es importante que los números se sepan. Lo he visto en muchas emergencias, no sé por qué el número de muertos es una cosa que siempre se convierte en una cosa extraña, que está en el aire», ha dicho.

«Era muy importante que se supiera que realmente en Bonaire, como gracias a dios sucedió, hubo gente que hizo las cosas también muy bien y allí pues no se encontró absolutamente a nadie y muy pocos coches», ha afirmado.

También explica que en ocasiones le preguntaban: «¿Dónde está el Gobierno?», y al respecto ha dicho: «Al final el Gobierno somos todos, no deja de ser lo que la gente espera que esté ahí para que les ayude en momentos puntuales, desde el día a día o en la emergencia. A mí me da mucha esperanza porque este es el país que realmente tenemos».

«Creo que si algo hemos aprendido de esta dana es que tenemos equipos increíblemente capacitados. Lo he visto muchas veces con la UME, que somos capaces de instalar un hospital de campaña en cuestión de 48 horas», ha valorado.

También reconoce que la gente tiene derecho a preguntar por qué se tardó tanto, pero afirma que en las emergencias «las primeras 48 horas son siempre muy complicadas. Todos han sido afectados, hemos visto policías que han muerto intentando salvar coches, bomberos salvando a sus familias. ¿Cómo van a ir a salvar a otros y tienen que salvar a las vidas propias?».

Además, se ha referido a los miles de coches que hay apilados tras la dana en distintos lugares, y tras destacar que España tiene las mejores compañías del mundo en desguaces y chatarra, y ha apostado por activar más compañías para acelerar la limpieza de todos esos vehículos que siguen apilados y «que no dejan de ser todavía un peligro».

El impacto de las ONG en cifras


Este es el impacto en datos que ha dejado en estos 51 días la ONG de José Andrés en València: más de cinco millones de comidas, entre ellas un millón de comidas calientes, más de 300.000 sándwiches, 435 toneladas de verdura y fruta fresca; 60 toneladas de pan, y diez toneladas de pescado.

Además, desde su llegada a las zonas afectadas por la dana en la provincia de Valencia, instalaron más de 72 puntos de distribución fijos en 70 poblaciones afectadas y 400 repartos puerta-a-puerta diarios para grupos con movilidad reducida. WCK ha llegado a distribuir directamente hasta 60.000 comidas diarias.

También activaron el comercio local facilitando la reapertura de 35 negocios en Albal, Picanya, Paiporta, Massanassa, Catarroja, Alfafar, Sedaví y Algemesí, que se convirtieron en puntos de distribución gratuita de 10 toneladas diarias entre pan, verduras, frutas y pescado.

Asimismo, en colaboración con el Banco de Alimentos de Valencia, repartieron 27.000 cajas con ingredientes además de cajas de Navidad, y de cerca de 15.000 voluntarios, entre ellos Isabel Muñoz, de 79 años y natural de Casinos (Valencia), cuya hija estaba en Chiva incomunicada y, explica a los periodistas: «Tuve que aparecer donde me necesitaban porque la estaban ayudando a ella».

El Centro de Turismo de Valencia alojó la primera cocina central el 1 de noviembre, la segunda se instaló en el Hotel Meliá el 2 de noviembre, y el 15 de noviembre construyó en solo tres días la cocina central de gran capacidad en el Tinglado 2 del puerto de València, con capacidad para producir hasta 100.000 comidas diarias.