Exposición en la Biblioteca Nacional de España sobre el escritor Miguel de Unamuno. EFE/ JP Gandul

La Biblioteca Nacional revisita a Unamuno, un hombre «casado» con la historia de España

Madrid (EFE).- Un hombre «casado» con la Historia de España aunque siempre «a punto de divorciarse de ella», así es el Miguel de Unamuno que muestra la exposición ‘Unamuno y la política. De la pluma a la palabra’, una cita que reúne 165 piezas de la vida del autor de la sentencia «vencer no es convencer».

Desde hoy y hasta el 8 de diciembre la Biblioteca Nacional de España acoge esta exposición que «permiten dejar constancia del pensamiento de Unamuno», según ha dicho durante la presentación a los medios este miércoles el director de la Biblioteca Nacional, Óscar Arroyo.

Comisariada por Colette Rabaté y Jean-Claude Rabaté, muestra un hombre «casado» con la historia de España aunque siempre «a punto de divorciarse de ella», han explicado este miércoles.

Por su parte, Jean-Claude Rabaté ha afirmado que Unamuno siempre intentó «restituir el contexto histórico» del país y por eso la exposición indaga en los «vínculos indisolubles» que unen al escritor y filósofo español con la historia de su país a lo largo de más de cincuenta años.

Selección de documentos iconográficos y textuales

En concreto, esta muestra que es una síntesis de la exhibición que se celebró en la Hospedería Fonseca de la Universidad de Salamanca entre octubre de 2021 y marzo de 2022, está realizada a partir de la selección de numerosos documentos iconográficos y textuales a veces olvidados o inéditos como cartas, artículos de prensa, discursos o conferencias.

Presentación de la muestra 'Unamuno y la política. De la pluma a la palabra', este miércoles, en la Biblioteca Nacional en Madrid.
Presentación de la muestra ‘Unamuno y la política. De la pluma a la palabra’, este miércoles, en la Biblioteca Nacional en Madrid. EFE/ J P Gandul

Estructurada en siete partes, la exposición recoge las reflexiones de este intelectual hasta el ‘vencer no es convencer’ pronunciado en el Paraninfo de la Universidad de Salamanca el 12 de octubre de 1936, un hombre al que «nadie consiguió callar a pesar de la censura, las destituciones o el destierro», según los comisarios.

Comienza con el despertar político de Unamuno (Bilbao, 1864-Salamanca, 1936) durante su juventud, cuando escribió su primer artículo; y llega hasta la Guerra Civil española de 1936, lo que posibilita realizar un recorrido por su pensamiento político a través de momentos clave de la Historia de España como la Guerra de Cuba, la Gran Guerra, el Desastre de Annual, la República o la propia Guerra Civil.

Miguel de Unamuno -el primero en utilizar el término intelectual como sustantivo- fue apodado como el ‘jabalí de las Cortes’ porque «no podía someterse a la ideología de ningún partido», han señalado los comisarios.

Hasta el final de su vida se presentó como un liberal pero, como ha resaltado Colette Rabaté, «no era un dogma sino un sistema que le permitía pasar por encima de las diferencias».

Cartas

En este sentido son fundamentales las cartas del escritor y filósofo ya que revelan mucho acerca de las posturas políticas de Unamuno, «un hombre con una gran coherencia en su pensamiento», según la sa. «Fue como cualquier hombre: pudo equivocarse y cambiar de opinión», ha añadido.

Además, las cartas enseñan «mucho de su carácter», por lo que se pueden «corregir muchos prejuicios» sobre su personalidad.

El visitante también podrá entender los avances que se han hecho en el conocimiento de su pensamiento político, que se caracterizaba por el pacifismo, el anticolonialismo y el antipatriotismo, ya que Unamuno, según los comisarios, estaba «en contra de cualquier movimiento violento por lo que no podía entender cómo la religión podía apoyarlos en ocasiones».

Los comisarios de la nueva exposición sobre Unamuno en la Biblioteca Nacional Colette (i) y Jean Claude Rabaté durante la presentación de la muestra.
Los comisarios de la nueva exposición sobre Unamuno en la Biblioteca Nacional Colette (i) y Jean Claude Rabaté durante la presentación de la muestra. EFE/ J P Gandul

Un rechazo al patriotismo que se hacía evidente, han agregado, en su disgusto por el libro ‘Don Quijote’ al entender que la obra de Cervantes representaba a «la nación española» y el hidalgo Alonso Quijano representaba «al pueblo español».

Una opinión contraria a la de la época en la que vivió este bilbaíno que pensaba que la lengua era «la raza», que una lengua común es lo que realmente une a todos los hombres.