Lugo (EFE).- Ante la representación de una parodia de la Última Cena en la ceremonia de inauguración de los Juegos Olímpicos en París, el obispo de Lugo, Alfonso Carrasco, ha convocado a la comunidad diocesana a participar este jueves -día 1 de agosto-, a partir de las 20:00 horas, en la catedral y en las parroquias que quieran unirse, a tener un “gesto especial” en honra de la Eucaristía”.
“Para nosotros es grave, ante todo, la banalización radical del Evangelio, la negación ante el mundo entero de su significado propio por parte de tan gran institución, que implica a estados y naciones”, precisa en un escrito dirigido a la comunidad diocesana.
Según el obispo de Lugo, “es una forma de normalizar el rechazo de la fe cristiana, contradiciendo lo más íntimo y precioso de la vida eclesial y denigrando directamente a la persona de Cristo, la realidad de su amor y su entrega hasta la muerte por la salvación de todos”.
“Por nuestra parte, sentimos la necesidad de reafirmar nuestra fe”, insistió.
Desde su punto de vista, “banalizar el corazón de nuestra fe, la entrega de Cristo en la Eucaristía, daña la dinámica más honda de nuestra conciencia y también de nuestra vida social”.
Por ello, añade, “no podemos aceptar que deje de resonar ante nuestros contemporáneos, y para nosotros mismos, el anuncio cristiano según su verdadero significado; que no llegue a ser conocido realmente, ocultado por imágenes desorientadoras como la de esta ceremonia”.
En ese sentido, propone “hacer juntos este próximo jueves” un “gesto especial de adoración al Señor”, para expresar “el reconocimiento por el amor inmenso que nos dona, nuestra fe” y “nuestro dolor por los pecados, por todo lo que contradice su presencia en nuestra vida y en la vida social, como ha sucedido de manera tan pública y expresa en la inauguración de los Juegos Olímpicos”, concluye.