Madrid (EFE).- El Premio EFE ha reconocido este jueves el periodismo de «entrega» y de servicio público de la delegación de la Agencia en Valencia, cuyo equipo se volcó en la cobertura de la dana ocurrida el pasado 29 de octubre y que provocó la mayor tragedia de la historia reciente en esta Comunidad.
La comisión encargada de decidir este reconocimiento ha coincidido en distinguir al equipo de Valencia con su delegado, Adolfo Ibarra, a la cabeza, por «trabajar con profesionalidad y sin descanso en un suceso medioambiental que todavía está generando titulares».
Dicha comisión ha estado integrada por el presidente de EFE, Miguel Ángel Oliver; el director Corporativo, Eduardo Riesco; el director de Información, Leandro Lamor; la presidenta del Consejo de Redacción, Raquel Godos, y el delegado de EFE en Viena, Jordi Kuhs.
Cobertura que traspasó fronteras
La cobertura de la catástrofe, que generó 7.200 fotografías, 17.000 textos, 850 vídeos y centenares de publicaciones en redes, tanto de lo ocurrido en Valencia como en varias localidades castellanomanchegas, fue una tarea coral a la que se sumaron profesionales de varias delegaciones de la agencia. La repercusión de este trabajo traspasó las fronteras españolas.
La comisión ha puesto en relieve el gran esfuerzo realizado por la delegación de Valencia al completo y el hecho de que «los compañeros, incansables en su labor y en ocasiones incomunicados durante largo tiempo, pisaron el barro y recorrieron kilómetros y kilómetros en aquellas dramáticas jornadas, igual que lo hicieron miles de voluntarios para ofrecer su ayuda a los afectados».
Una fotografía de EFE de una montaña de vehículos apilados en una calle de Picaña (Valencia) dio la vuelta al mundo y ayudó a comprender la magnitud de la tragedia. Otra instantánea de la Agencia del rostro de la reina Letizia salpicado de barro en Paiporta (Valencia) se convirtió en una imagen para la historia.
«Fue el resultado del buen hacer de un proyecto colectivo, anónimo, que englobó a muchas personas, una manera de hacer periodismo propio de EFE», ha subrayado la comisión evaluadora al describir la excelencia y la «entrega» ofrecida por todo el equipo profesional de la oficina en Valencia.
Trabajo y el servicio público
La Agencia EFE se vio obligada además a verificar numerosos bulos, un empeño en el que resultó fundamental la visión de los reporteros, fotógrafos y cámaras desplazados sobre el terreno.
La catástrofe originada por una Depresión Aislada en Niveles Altos (DANA) causó 230 víctimas mortales (222 en la Comunidad Valenciana, 7 en Castilla-La Mancha y 1 en Andalucía) y afectó a 78 municipios. Sus dimensiones totales todavía están por evaluar.
El Premio EFE es un galardón que estuvo vigente entre 1977 y 1983, instituido por la agencia durante la presidencia de Luis María Anson, y fue el precursor de los actuales Premios Internacionales Rey de España de Periodismo.

Esta distinción, que valora el trabajo y el servicio público de los equipos profesionales de la Agencia EFE, es de carácter honorífico y no tiene dotación económica. Casi cincuenta años después de su creación, la Dirección de la Agencia propuso reinstaurarlo en 2024.
En palabras del presidente de la Agencia EFE, Miguel Ángel Oliver, «el Premio EFE se recupera para reconocer el servicio público de los profesionales de la Agencia. Es merecido e ilusionante distinguir la labor, la mayoría de las veces anónima, de nuestros equipos en España y en todo el mundo”.
El premio EFE será entregado durante la ceremonia de los Premios Internacionales Rey de España de Periodismo 2025 y los galardonados recibirán una pieza escultórica conmemorativa de María de Frutos, Premio Nacional de Artes Plásticas en 2015 y experta en escultura y joyería.
El equipo de EFE Valencia agradece el premio
La delegación de la Agencia EFE en la Comunitat Valenciana ha agradecido la distinción que, subraya, «destaca el valor de servicio público que prestan las delegaciones de EFE ante tragedias de esta magnitud».
Así lo ha expresado el delegado de EFE en la Comunitat Valenciana, Adolfo Ibarra, quien ha resaltado el elevado compromiso y esfuerzo que mostraron «desde el minuto uno» todos los componentes de la plantilla ante una evidencia: «Nos encontrábamos ante unos momentos desgraciadamente históricos».
«Y teníamos la responsabilidad de informar desde aquí al resto del mundo, que, literalmente, tenía sus ojos puestos en nosotros y lo que aquí ocurría» después de que el 29 de octubre una dana provocara la mayor catástrofe de la historia reciente de la Comunitat Valenciana.
Ibarra ha destacado además que se hizo un trabajo muy intenso -7.200 fotografías, 17.000 textos, 850 vídeos- y coral, que no habría sido posible sin la colaboración de hasta quince compañeros de otras delegaciones que se turnaron para desplazarse a València en las semanas más complicadas de la tragedia, cuando la carga de trabajo se hizo inabarcable para la plantilla de la Comunitat Valenciana.