Joe Talbot, vocalista del grupo británico irlandés IDLES , en la primera jornada de pago del festival Primavera Sound, que se celebra estos días en el recinto del Forum de Barcelona. EFE/ Alejandro García

IDLES, Parcels y todas las guitarras del Primavera Sound

Guillermo Cabellos y Sara Corsellas

Barcelona (EFE).- Pese a que este primer jueves de Primavera Sound estaba llamado a ser una gran fiesta electrónica, las formaciones clásicas con guitarras al frente como IDLES, Parcels, beabadoobee o Cassandra Jenkins han reclamado también su cuota de protagonismo en el festival.

Hasta tres veces han chillado al Parc del Fòrum «Free Palestine» los británicos IDLES, que se han presentado con un directo enérgico, reivindicativo y ruidoso que ha comenzado con ‘Colossus’ como premonición de los pogos que se formarían en la pista, antes de que en ‘Gift Horse’, Lee Kiernan, guitarrista de la banda, se lanzara a surfear sobre el público.

Con la misma fuerza han sonado en la voz de Joe Talbot ‘Mr Motivator’, ‘Car crash’, ‘The wheel’ y ‘Never fight a man with a perm’, que han acompañado a algunas novedades de ‘TANGK’, su último trabajo, como son las poderosas ‘A Dancer’, ‘Pop Pop Pop’ o ‘Gratitude’.

El guitarrista del grupo británico irlandés IDLES Lee Kiernan en la primera jornada de pago del festival Primavera Sound, que se celebra estos días en el recinto del Forum de Barcelona. EFE/ Alejandro García

También ha habido hueco en este Primavera Sound para que los de Bristol recuperaran del baúl punk temas de ‘Brutalism’, su álbum debut, como han sido ‘Divide & Conquer’ y ‘Mother’.

Otra formación clásica que se ha hecho con el Parc del Fòrum ha sido Parcels, que con su frescura inclasificable –tanto entran en el indie pop como en el funk o el soul–, han logrado retener a unos cuantos antes de que la masa se moviera a ver a Charli xcx.

Así, los australianos afincados en Berlín han cantado desde la serenidad que otorga tener esas líneas de bajo incontestables himnos como ‘Lightenup’, ‘Tieduprightnow’ o ‘GamesofLuck’.

También han brillado la versión unplugged de ‘Leaveyourlove’, cantada con la única compañía de un teclado y una pandereta; la enérgica ‘Everyroad’, servida con la instrumentación completa; y ‘Overnight’, usada como inicio y final del show.

Un rato antes, a media tarde, la artista británica de origen filipino beabadoobee ha dejado ver su lado más íntimo con una muestra de ‘This Is How Tomorrow Moves’, su último trabajo, del que ha desgranado temas como ‘California’, ‘Take a bite’ y ‘Real man’.

La cantante y compositora británica Tahliah Debrett Barnett (d), más conocida por su nombre artístico FKA Twigs, en la jornada de este jueves del festival Primavera Sound celebrada en el recinto del Forum de Barcelona. EFE/Alejandro García

Con una estructura musical que recuerda a esas canciones compuestas en una guitarra acústicas en la soledad de la habitación de la infancia, beabadoobee ha encandilado al Fòrum a través de ‘The perfect pair’, ‘Beaches’ o ‘Apple cider’.

En paralelo a esto, la cantautora de Virginia Kate Bollinger ha atraído a los asistentes hacia el escenario Estrella Damm, donde esta rara avis folk ha comenzado su actuación con ‘What’s this about (La La La La)’, una pieza introspectiva y nostálgica que abre su álbum debut ‘Songs from a thousand frames of mind’, y con el mismo ritmo melancólico ha seguido con ‘God interlude’, ‘Any day now’ y ‘Devices’.

Para el final del concierto, y con la pista de baile ya llena, la artista se ha reservado sus temas más íntimos acompañada por el piano, como han sido ‘Lonely’, una de las piezas más conmovedoras del disco que evoca la tradición de las baladas pop minimalistas; ‘I see it now’, donde aborda la vulnerabilidad del proceso creativo en tiempos de aislamiento; y ‘All this time’, planteada como conclusión reflexiva del disco y del concierto.

Y entre el ritmo frenético del festival, la cantante norteamericana Cassandra Jenkins ha pausado al público con el dream-folk de su último álbum, ‘My light, my destroyer’, un trabajo calmado en el que eleva melodías cotidianas con su tristeza luminosa, con canciones como ‘Devotion’, ‘Aurora’ u ‘Omakase’, y también temas de su anterior disco, ‘An overview on phenomenal nature’, como ‘Michelangelo’, ‘Crosshairs’ y ‘Hard drive’.

Las ovaciones de la audiencia han dado paso a más canciones, como ‘New bikini’ y ‘Clams casino’, que siguen la línea de exploración de sentimientos como el duelo, la pérdida, la soledad y el aislamiento, y que reafirman el compromiso de Jenkins con su revolución tranquila y su música a contracorriente, que combina indie rock con guitarras, new age, sofistipop y jazz.