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| Por María José Rey y Lázaro García |
Santiago de Chile (EFE).- A las puertas de que organice junto a FIFA el Mundial Sub-20 de 2025, el fútbol chileno vivió en 2024 su particular «annus horríbilis», plagado de denuncias judiciales en la ligas nacionales, polémicas en la selección nacional, escándalos sexuales, violencia en las canchas y una profunda crisis económica y financiera, agudizada por la opacidad de la dirigencia, que ha puesto en riesgo el fútbol formativo y le ha alejado de la elite mundial.
Ni la primera división se ha salvado de los escándalos y las denuncias que se concentran en torno a la Asociación Nacional de Fútbol Profesional (ANFP), y en particular a su presidente Pablo Milad, a quien la prensa local señala como uno de los principales responsables de la crisis transversal y estructural que atraviesa las categorías inferiores y se plasma en la selección.
El triunfo de Colo Colo bajo la lupa
Colo Colo se proclamó campeón en una liga irregular, jugada a trompicones, con numerosos partidos aplazados, que animó una renacida Universidad de Chile, que al final denunció un trato favorable para el «cacique» tras desestimarse una denuncia por una supuesta ilegalidad cometida por el entrenador albo, Jorge Almirón.
En el reclamo, que llegó hasta el Tribunal de Arbitraje Deportivo (TAS), «los laicos» denunciaron que el argentino violó el reglamento. Alegaron que se comunicó para dar indicaciones en un partido en el que estaba suspendido, lo que desató la polémica.
Otras denuncias similares, vinculadas con el «fair play» financiero y la opacidad de las cuentas de los clubes, que son sociedades anónimas, mantienen en vilo la Primera B y la Segunda División, con los casos de Barnechea y Deportes Melipilla, respectivamente.
Caos en el fútbol chileno
Barnechea, equipo de la capital, era cuarto y accedía a la definición de la liguilla de ascenso, pero fue descalificado por problemas con la licencia de clubes y perdió todos los puntos conseguidos en la temporada, sentenciando su descenso a la Segunda División, y alterando la tabla de posiciones.
El conflicto sigue sin resolverse, mientras la ANFP enfrenta un recurso de protección interpuesto en la Corte Suprema de la justicia ordinaria. Esta acción representa una infracción al estatuto de FIFA, CONMEBOL y del propio ente rector del fútbol chileno, generando tensiones adicionales.
Melipilla, por su parte, ganó la final de la segunda categoría ante Deportes Concepción obteniendo su boleto a la Primera B para 2025, pero su rival ingresó una denuncia porque el club de Santiago habría incumplido en el pago de cotizaciones previsionales, lo cual es una infracción para la ANFP, que no lo advirtió.
También se repitieron denuncias en la Copa Chile, principalmente de los clubes aficionados, generando controversias durante la competición. Estas denuncias alteraron una competencia que otorga un cupo para las copas internacionales, aumentando la presión sobre la ANFP.
Gareca y la Roja
La selección chilena cerró el año en la eliminatoria al Mundial 2026 con un rendimiento irregular que le mantiene lejos de la clasificación por tercer ciclo consecutivo, tras no asistir a Rusia 2018 y Catar 2022 y su posición solo le permite aspirar a la repesca para lograr el objetivo.
A principios de año, la ANFP contrató al argentino Ricardo Gareca para intentar un repunte en las clasificatorias. Esto ocurrió después de que, al mando de Eduardo Berizzo, la selección solo sumara cinco puntos de 18 en los primeros partidos disputados en 2023.
La Roja, bajo el mando de Gareca, fracasó en la pasada Copa América en Estados Unidos, quedando eliminada en la fase de grupos. En el reinicio de la eliminatoria, sumó cuatro derrotas consecutivas, incluida una inédita caída como local ante Bolivia.
Llegó a ocupar el último lugar de la tabla, pero un empate ante Perú y una victoria frente a Venezuela cambiaron su panorama. Ahora se encuentra en la novena posición con nueve puntos, a solo cuatro unidades de la séptima plaza que da al repechaje.
Aunque la esperanza en el ciclo de Gareca se diluyó y surgió presión para reemplazarlo, la ANFP enfrenta limitaciones financieras. La prensa chilena señala que los problemas económicos impiden rescindir su contrato, obligando a mantener la apuesta hasta el final.
Gareca se enfrentó, además, a la afición al no convocar al ídolo local, Arturo Vidal, quiwen no solo criticó al técnico en las derrotas, si no que llegó a insultarlo. El argentino, presionado por los resultados, dio su brazo a torcer en la última fecha FIFA, en la que no solo llamó a Vidal, si no que este asumió el brazalete de capitán.
Formación sin dinero
La ANFP, que mantiene una difícil relación con la FIFA y podría ser sancionada por la Conmebol, reconoció en septiembre pasado que no tiene recursos para continuar financiando el fútbol formativo, lo cual trajo una grieta con los clubes a quienes se les pide se hagan cargo para evitar una medida de supresión de categorías que dejaría a miles de jóvenes sin competencia.
“Hasta el año 2022 se jugaban 2.000 y fracción partidos del fútbol formativo, hoy se juegan 7.196 partidos, optimizamos y pasamos de dos mil millones (2 millones de dólares) que costaba a cinco mil 600 millones (5,8 millones de dólares) el costo del campeonato a nivel del fútbol formativo”, reconoció públicamente Milad.
El acuerdo con los clubes se cruza con otros debates clave para la temporada 2025, generando tensiones en la planificación. Entre ellos destacan la regla de minutos para jugadores Sub-21 en Primera División y el cupo de futbolistas extranjeros, actualmente fijado en seis.
La cantidad de jugadores foráneos generó un conflicto entre la ANFP y el Sindicato de Futbolistas Chilenos (Sifup) a inicios de año. Este desacuerdo, que casi derivó en una huelga, podría reflotar ya que el gremio exige reducir el cupo a cinco extranjeros.
La última reunión de Consejo de Presidentes de la ANFP dejó más dudas a los conflictos que el ente debe superar con sus clubes afiliados, luego de que en la programación de la Copa Chile 2025 no estaría previsto la participación de la Segunda División y la Asociación Amateur.
En medio de estos desafíos, la ANFP debe centrarse en la organización del Mundial Sub-20, un evento de gran relevancia internacional. Además, enfrenta el reto de mejorar la infraestructura de los cuatro estadios sede, que, según el comité local, recibieron bajas evaluaciones de FIFA.
Nueva ley para regular el fútbol chileno
El 2025, considerado quizás el año más importante del fútbol chileno, traerá grandes retos para la ANFP en múltiples frentes. Además, deberá lidiar con la nueva ley de deporte, actualmente en discusión en el Senado, que podría cambiar el panorama regulatorio.
Dos son los puntos principales: la separación legal de la ANFP y la Federación Chilena de Fútbol (FchF), que aclararía el flujo financiero. El cambio de persona fiscal de la propia ANFP permitiría auditar sus cuentas y fortalecer la transparencia en la gestión istrativa.
Además, la prohibición de multipropiedad complicaría el amaño de partidos y la acción de los agentes de futbolistas con intereses en varios clubes. Estos agentes, que dirigen varios equipos, se han convertido en uno de los mayores males del fútbol chileno, afectando su integridad.
Males que después tienen reflejo en las canchas: en 2024 se multiplicaron los enfrentamientos entre enfrentamientos entre aficionados y jugadores en las ligas formativas y salieron a la luz varios casos de presuntos escándalos sexuales, con la denuncia de una supuesta violación grupal por parte de jugadores juveniles de Cobreloa, equipo de la primera división.
