Valladolid (EFE).- El Fondo Norte 1928 ha hecho un llamamiento a la afición para que deje vacía las gradas del estadio José Zorrilla durante la primera mitad del partido de este viernes ante la U.D Las Palmas, en señal de rechazo por la situación que vive el equipo.
En un comunicado, el Fondo Norte ha convocado a los seguidores blanquivioletas para llevar a cabo una protesta conjunta contra la dirección del club y dejar sin público las gradas durante los primeros 45 minutos del encuentro.
Entrada en la segunda mitad del encuentro
Posteriormente, entrarán en el estadio para presenciar la segunda mitad y continuar con la protesta desde sus localidades, que también estará dirigida a los jugadores, puesto que consideran que estos también son culpables de que el equipo sea colista, con solo 15 puntos en su casillero.
De hecho, en el comunicado, se exige a la plantilla vallisoletana que muestre el respeto que la institución se merece y deje de ensuciar la imagen del club ya que para los futbolistas, su paso por el mismo puede ser pasajero, pero para muchos aficionados es «su vida».

Asimismo, la Federación de Peñas ha hecho circular un vídeo en el que se incide en destacar el fútbol no solo como un deporte, sino como un sentimiento y una seña de identidad, por eso los aficionados están dolidos, tras resultados como el último 7-1 sufrido ante el Athletic en la anterior jornada.
Y, por ello, se adhiere a esa petición de vaciar el estadio este viernes, durante la primera parte ante Las Palmas, a una afición que, a pesar de todo lo acontecido en lo que va de temporada, ha respondido siempre acudiendo en masa a animar a su equipo.
No solo en los partidos de casa
No solo en los partidos de casa, sino también a domicilio, como sucedió en el último choque en San Mamés, al que asistieron 600 seguidores blanquivioletas, para ver cómo los de Bilbao les endosaban un 7-1, que ha terminado de hundirles.
De hecho, tras este «ridículo» sufrido, la misma Federación de Peñas, en otro comunicado, solicitó al Real Valladolid la devolución del importe de las entradas a los aficionados desplazados hasta tierras vascas, y que el mismo fuera costeado por los propios jugadores de la actual plantilla.
En este sentido, entendían que la solicitud estaba sobradamente justificada, «ya que el daño a la historia del club, y el que puede causar a la masa social puede ser irreparable, por lo que no basta con perdones vacíos, sino con acciones propias de jugadores profesionales».
Además, a falta de trece jornadas para el final liguero, exigen «a quien proceda» que tome cartas en el asunto y se respete la historia del club, parando la sangría de récords negativos nunca vistos en los casi 100 años de existencia del Real Valladolid, con una plantilla que, ya no es que no gane, sino que ni siquiera compite.