Madrid (EFE).- Estudiantes de varias universidades españolas han empezado a sumarse con actos reivindicativos y acampadas a las protestas internacionales en apoyo a Palestina que comenzaron hace semanas en Estados Unidos y que se han ido extendiendo por otros países.
Aunque en las últimas horas se están multiplicando las adhesiones por parte de sindicatos estudiantiles en Barcelona, País Vasco, Navarra, Sevilla, Alicante y Madrid, fue en la Universidad de València (UV) donde comenzó el 29 de abril la movilización para exigir «el fin del genocidio en Gaza».
Una veintena de tiendas de campaña permanecen una semana después instaladas a la entrada de la Facultad de Filosofía de la UV.
Los portavoces estudiantiles dicen estar dispuestos a mantener la acampada hasta que el rectorado acceda a reunirse con ellos y atienda sus reivindicaciones.
Tras Valencia, Barcelona, Vitoria, San Sebastián…
Tras la iniciativa de los universitarios valencianos se han ido sucediendo las protestas en otros campus como el de la Universidad de Barcelona, donde decenas de estudiantes permanecen acampados en el Edificio Histórico de la UB.
Allí permanecerán, al menos, hasta la celebración del claustro convocado para este miércoles.
Desde el lunes están en marcha acampadas en los campus de Vitoria, San Sebastián y Leioa (Bizkaia) de la Universidad Pública Vasca, así como en la Universidad Pública de Navarra en Pamplona.
Estudiantes de varias universidades madrileñas, reunidos en asamblea convocados por el Bloque Interuniversitario por Palestina, han decidido este martes sumarse a las protestas e iniciar una acampada indefinida en el campus de la Universidad Complutense de Madrid (UCM).
También en Alicante, donde ya se han llevado a cabo algunos actos de apoyo a Palestina en los últimos días, para este miércoles está convocada otra acampada en la Universidad de Alicante.
Piden romper relaciones institucionales con el gobierno, las empresas y las universidades israelíes.
Qué piden los universitarios en las protestas
Con lemas muy similares a los de sus compañeros de #StudentsforGaza en el resto del mundo, «¡Palestina libre!» o «¡Parad el genocidio!», los universitarios españoles que se están movilizando exigen a sus respectivas universidades que rompan toda colaboración, acuerdo o convenio con empresas y centros universitarios israelíes.
Además, piden el fin de la venta de armas a Israel y que el Gobierno rompa relaciones con ese país.
En muchas de las concentraciones se expresa también la solidaridad con los estudiantes arrestados en las protestas, especialmente en Estados Unidos, y, en el plano estrictamente doméstico, la derogación de la ley mordaza y la Ley de Extranjería.
Por el momento, las acampadas y concentraciones se están desarrollando de forma pacífica en las universidad españolas.
Un portavoz de la Red Universitaria por Palestina, con presencia en más de 40 campus e integrada por profesores y personal no docente, apoya las protestas de las organizaciones estudiantiles en contra del genocidio en Palestina y respetan su autonomía.
Diferencias con la guerra Rusia-Ucrania
Hace unos días, la Red elevó a los rectorados y al Ministerio de Ciencia, Innovación y Universidades sus exigencias: una condena clara contra la destrucción de las universidades en Gaza y un alto el fuego.
Además, dotación de recursos económicos para recibir y proteger a estudiantes y personal académico de Palestina; evitar la cooperación con las universidades israelíes y la ruptura de relaciones diplomáticas entre ambos países.
Por otro lado, ha afirmado este portavoz que «ya está en marcha un proceso de criminalización brutal contra el movimiento estudiantil, utilizando de nuevo vergonzosamente el concepto de antisemitismo, acusándoles de antisemitas, cuando por lo que se están moviendo es por más de 40.000 muertos».
Ha llamado también la atención respecto a la diferente respuesta que han tenido los conflictos de Ucrania y Palestina.

En el primer caso los entonces ministerios de Ciencia e Innovación y el de Universidades anunciaron medidas para suspender relaciones de colaboración científica, académica e institucional con Rusia y Bielorrusia.
La decisión se tomó dos semanas después de la invasión rusa a Ucrania y en solidaridad con el pueblo ucraniano.
El apoyo de la ministra de Ciencia
La ministra de Ciencia, Innovación y Universidades, Diana Morant, ha mostrado este martes su orgullo por los estudiantes que han comenzado a movilizarse en solidaridad con Palestina.
En la rueda de prensa tras el Consejo de Ministros, Morant ha reconocido el derecho a la manifestación de los estudiantes y ha añadido que las universidades no son solo un espacio de formación académica ,sino también de pensamiento crítico.