Madrid (EFE).- El empresario Alberto González Amador, pareja de Isabel Díaz Ayuso, ha presentado una demanda en los juzgados contra el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, y el ministro de Presidencia, Justicia y Relaciones con las Cortes, Félix Bolaños, por referirse a él como un «delincuente confeso».
Los abogados del empresario reclaman 100.000 euros al jefe del Ejecutivo y 50.000 al ministro en sus demandas, presentadas como paso previo a la interposición de una querella por injurias y calumnias, según ha adelantado el diario El Mundo y han informado a EFE fuentes de la defensa.
Cree que vulneraron sus derechos fundamentales
Con esta actuación, la pareja de la presidenta madrileña continúa la ofensiva judicial emprendida contra varios ministros por declaraciones en relación al pacto que ofreció su defensa a la Fiscalía para reconocer dos delitos fiscales y evitar así ir a juicio.
En este caso, la defensa del empresario considera que unas declaraciones del presidente del Gobierno y del ministro Bolaños vulneraron sus derechos fundamentales y, con su demanda de conciliación, busca que se retracten públicamente.

Se refiere, en concreto, a una comparecencia del jefe del Ejecutivo en Bruselas, en la que respaldó al fiscal general del Estado tras abrirle causa el Tribunal Supremo por presunta revelación de secretos del procedimiento que se dirige contra Alberto González Amador en un juzgado de Madrid.
Pedro Sánchez defendió que el fiscal general «ha hecho su trabajo, perseguir al delincuente» y se refirió a González Amador como «un delincuente confeso que ha defraudado a Hacienda, que se ha lucrado y se ha enriquecido con las mascarillas durante la pandemia».
Un día antes, el pasado miércoles, el ministro Bolaños también defendió al fiscal general en una comparecencia desde el Congreso, en la que indicó: «Entre los delincuentes confesos y los fiscales que dicen la verdad, el Gobierno se queda con los fiscales que dicen la verdad»
Ayuso defiende la demanda de su novio
Isabel Díaz Ayuso ha defendido este lunes la demanda que su pareja ya que, según afirma, se trata de «desguazar» a una persona cuando solo «se enfrenta a una posible multa de Hacienda».

«El novio de Ayuso no va a la Puerta del Sol a hacer negocios, cosa que sí hace la mujer del presidente, Begoña Gómez», ha declarado en la Real Casa de Postas a preguntas de los medios tras participar en un acto, el día en el que ha declinado la invitación de Sánchez para acudir el próximo viernes 25 al Palacio de la Moncloa en el marco de las reuniones bilaterales.
A su juicio, el presidente del Gobierno «no puede llamar delincuente a un ciudadano por ser la pareja sentimental de un adversario político y que esto le salga gratis», al igual que el fiscal general del Estado, Álvaro García Ortiz, imputado por revelación de secretos en el caso que afecta a su novio.