San Fernando de Henares (Madrid) (EFE).- El histórico narcotraficante gallego José Ramón Prado Bugallo, Sito Miñanco, ha negado en el juicio de la operación Mito haber intentado en 2017 introducir en España casi cuatro toneladas de cocaína procedente de Sudamérica y haber blanqueado dinero a través de diversas empresas.
La Audiencia Nacional ha iniciado este martes en el juicio la declaración de los acusados, entre ellos Sito Miñanco, para quien la Fiscalía pide 31 años y seis meses de prisión por tráfico de drogas, la ocultación de más de 11 millones de euros y el blanqueo del dinero a través de diversas empresas.
«Soy totalmente inocente», ha asegurado Sito Miñanco, que ha calificado de «mentira» el contenido del escrito de acusación de la Fiscalía. «El fiscal dice 314 veces que trafiqué con drogas pero no ubica la venta de un solo gramo», ha abundado para asegurar que en la época de los hechos se dedicaba a gestionar aparcarmientos y vender teléfonos móviles encriptados, embarcaciones y motores.
Afirma que viajaba por trabajo
Sito Miñanco ha recordado que tras pasar más de treinta años en prisión en 2016 se encontraba terminando de cumplir una sentencia por otra causa relacionada con el narcotráfico en régimen abierto en un centro de Algeciras (Cádiz), donde residía y donde a comenzó a trabajar como encargado de zona de una empresa que gestionaba aparcamientos.
Ha explicado que sus desplazamientos desde Algeciras a Chiclana (Cádiz) y a las localidades malagueñas de Marbella y Torremolinos se debían a la recaudación de dinero de aparcamientos de la empresa para la que trabajaba y no para preparar operaciones de narcotráfico.

Prado Bugallo ha añadido que además se dedicaba a vender teléfonos y que en un momento determinado le presentaron al holandés Raymond V.R., otro de los acusados en esta causa, con quien comenzó a vender móviles encriptados que les proporcionó importantes ingresos ya que cada uno costaba unos 2.000 euros.
«Si el presidente del Gobierno y la ministra de Defensa hubieran tenido teléfonos encriptados no les habría pasado lo que la prensa dice que les pasó», ha comentado Sito Miñanco en referencia al supuesto espionaje que investiga la Audiencia Nacional.
Igualmente ha señalado que aprovechando sus os en Galicia vendió cuando estaba en Algeciras motores fueraborda y embarcaciones semirrígidas pero no para ser utilizadas para el narcotráfico sino para pesca submarina, avistamiento de ballenas y delfines o para abastecer a otros barcos.
Pero ha negado que tenga relación con unos astilleros de Cambados (Pontevedra), en los que según el fiscal la organización supuestamente dirigida por Sito Miñanco fabricaba embarcaciones para el tráfico de drogas.
Durante las pesquisas el 6 de febrero de 2017 les fueron confiscados en el aeropuerto Adolfo Suárez de Madrid-Barajas casi 900.000 euros a Manuel G.R. y otros cuatro acusados que trataban de transportar el dinero a Colombia en varias maletas, según mantiene la Fiscalía.
El abogado Gonzalo Boye, también acusado
Entre los acusados en este juicio se encuentra también Gonzalo Boye, el conocido abogado del expresidente de Cataluña Carles Puigdemont, que se enfrenta a una petición de la Fiscalía de 9 años y 9 meses de prisión por supuestos blanqueo de capitales y falsificación de documento oficial.
Gonzalo Boye, que llevó la defensa de Sito Miñanco en otros procedimientos, está acusado de ayudar a elaborar documentos falsos para justificar la procedencia de los casi 900.000 euros confiscados en el aeropuerto madrileño. Su defensa argumenta que estas acusaciones son infundadas y que su única participación fue de asesoramiento legal.
En la jornada de este martes también han declarado Luis Enrique García Arango y David Pérez Lago, ya condenados en otras causas de narcotráfico, consideradas personas de confianza de Sito Miñanco por la Fiscalía, que pide para ellos 22 y 18 años de prisión, respectivamente, y que han negado su participación en el tráfico de drogas y el blanqueo de capitales.