Bruselas (EuroEFE).- La vicepresidenta de la Comisión Europea para Transición Ecológica y responsable de Competencia, Teresa Ribera, defendió este jueves que las investigaciones de la Unión Europea (UE) a las grandes empresas tecnológicas en virtud de su nueva legislación digital no son discriminatorias contra ningún Estado.
«Estamos obligados por la ley y, sinceramente, la implementación de cualquier decisión y la aplicación de la ley no es discriminatoria contra nadie (…). Es nuestro deber y no es que vayamos contra los chinos por eso o contra los americanos o los europeos por eso», dijo Ribera en declaraciones a la prensa tras participar en un evento organizado por el centro de estudios Bruegel.
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— Bruegel (@bruegel.bsky.social) 16 de enero de 2025, 13:00
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La vicepresidenta comunitaria respondió así preguntada sobre las informaciones que apuntan a que el Ejecutivo comunitario habría congelado las investigaciones abiertas por un posible incumplimiento de la Ley de Mercados Digitales (DMA, en inglés) a grandes plataformas digitales después de que gigantes como Meta hayan instado a que el próximo gobierno de Donald Trump en EE.UU. reaccione ante una legislación europea que consideran excesiva.
Ribera señaló que «no hay una congelación» de las decisiones, que aquellas que tenían que adoptarse el pasado diciembre se adoptaron y que «la próxima ronda de decisiones se espera en marzo, con el debido proceso de todas las garantías y derecho a la defensa», si bien rehusó pronunciarse sobre casos concretos.
La exministra española señaló que la UE debe aplicar una legislación que dijo será la base del buen funcionamiento del mercado digital y subrayó que «la realidad digital va más allá de las tradicionales fronteras en términos físicos» y «crea posiciones en los mercados que pueden provocar situaciones de abuso de poder de algunos actores».
«Tenemos que prestar atención a esto sin importar si los consumidores son europeos o americanos», dijo la exministra española, quien subrayó que hasta ahora la cooperación entre las autoridades de competencia estadounidenses y europeas «ha sido buena» y se mostró «optimista» sobre que este siga siendo el caso en adelante.
Bruselas tiene abiertas investigaciones a Apple, Meta y Alphabet (matriz de Google) por posibles incumplimientos de la DMA.
A principios de esta semana, el Ejecutivo comunitario aseguró a través de su equipo de portavoces que siguen en marcha los trabajos técnicos en el marco de estas investigaciones y que Bruselas todavía está dentro del plazo de un año que tiene para adoptar decisiones formales sobre las mismas.
Cooperación con otras potencias
Por otra parte, la política española defendió este jueves que la Unión Europea debe cooperar con otras potencias mundiales pero sin caer en la ingenuidad y asegurando la igualdad de condiciones con otros actores.
«La competitividad en la escena global es clave. Ya no somos ese continente capaz (…) de dar forma a la oferta, la demanda, el precio en los mercados globales. Afortunadamente hay muchos otros actores que los tradicionales poderes occidentales que hacen su parte y contribuyen», dijo Ribera.
«Tenemos que actualizar el modo en que nos relacionamos con esos actores, incluidos los mercados financieros (…). No podemos ser ingenuos tampoco, hay que asegurar que ocurre en igualdad de condiciones», añadió la exministra española.
Ribera defendió la necesidad de un «orden multilateral basado en reglas» en un momento en el que algunos actores quieren «romperlo» e insistió en que hay muchos otros actores que comparten la opinión europea. «Nadie ganaría si aceptamos esta ruptura»
«Si aceptamos que es mejor trabajar con cooperación, es bueno saber que hay mucha gente que quiere dar soluciones a nuestros retos. Pero entonces tenemos que cooperar y asegurar una igualdad de condiciones», aseguró.
“It has taken decades of diplomacy to understand that there is nobody in the world that could win in the middle/ long run without an international order based on rules”
— Teresa Ribera (@teresaribera.ec.europa.eu) 16 de enero de 2025, 16:35
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En este sentido, consideró que el acuerdo comercial entre la UE y Mercosur, finalizado en diciembre pasado tras más de dos décadas de negociación, es de la «máxima importancia», puesto que constituye «una enorme expresión de la voluntad de dos regiones de cooperar», y abogó por que la UE siga adoptando este tipo de enfoques, porque «si no, el más fuerte es el que tiene el poder».
«No podemos tratar a los otros con un enfoque de conveniencia bilateral a corto plazo», insistió.
La vicepresidenta comunitaria consideró que estamos en un «punto de inflexión global» en el que la UE afronta «grandes retos», como el refuerzo de su competitividad o la reducción de dependencias del exterior, pero consideró que el bloque también puede encontrar «oportunidades» en torno a los vectores de este cambio global, como la transición climática o energética.
«En demasiadas ocasiones consideramos estos retos como una enorme carga (…) y tendemos a olvidar todas las cosas positivas que hacen de Europa probablemente uno de los mejores lugares del mundo para vivir y para invertir», añadió Ribera, quien citó sus derechos y libertades o una población bien formada e insistió en que la UE debe «mantenerse fiel a sus principales valores».
En este sentido, señaló que el Pacto de Industria Limpia que presentará la Comisión Europea próximamente será el «próximo paso» hacia la descarbonización, el crecimiento y la resiliencia del continente y tendrá una dimensión climática, de competitividad, social y europea.
Aunque no dio detalles del contenido de la propuesta, Ribera defendió que para el refuerzo de la competitividad europea se necesitará financiación tanto pública como privada así como una simplificación de la regulación, al tiempo que la UE deberá «evitar una carrera de subsidios» entre los socios del bloque comunitario.