La presidenta de la Comisión Europea, Ursula von der Leyen, en una imagen de archivo. EFE/EPA/RONALD WITTEK

Von der Leyen: La UE responderá con medidas firmes y proporcionales a los aranceles de Trump

Estrasburgo (Francia) (EFE).- La presidenta de la Comisión Europea, Ursula von der Leyen, aseguró este martes que la UE responderá con «contramedidas firmes y proporcionales» a los aranceles del 25 % que el lunes impuso el presidente de Estados Unidos, Donald Trump, a todas las importaciones de acero y aluminio.

«Lamento profundamente la decisión de Estados Unidos de imponer aranceles a las exportaciones europeas de acero y aluminio. Los aranceles son impuestos: malos para las empresas, peores para los consumidores», escribió Von der Leyen en una declaración que también divulgó en sus redes sociales.

«Salvaguardar sus intereses económicos»

Por eso, dijo la presidenta de la Comisión, «los aranceles injustificados aplicados a la UE no quedarán sin respuesta: desencadenarán contramedidas firmes y proporcionadas. La UE actuará para salvaguardar sus intereses económicos. Protegeremos a nuestros trabajadores, empresas y consumidores».

Al mismo tiempo, en un discurso ante el Parlamento Europeo en Estrasburgo (Francia), el comisario europeo de Comercio, Maros Secofic, dijo que Bruselas «está analizando actualmente el alcance de las medidas» anunciadas por Trump, antes de anunciar la contraofensiva.

«Esta es la forma de proteger el interés de Europa pero no es nuestro escenario preferido. Seguimos comprometidos con el diálogo constructivo, estamos listos para las negociaciones y encontrar soluciones mutuamente beneficiosas allá donde sea posible», afirmó Sefcovic.

«Hay mucho en juego para ambas partes. Queremos que funcione, porque es lo lógico», continuó el comisario.

ARANCELES TRUMP
Un buque contenedor en la terminal de contenedores de Bremerhaven, en Alemania. EFE/Ingo Wagner

La Eurocámara, a favor de una respuesta proporcional

Una mayoría de los grupos del Parlamento Europeo apoyó este martes la respuesta «firme y proporcional» que ha prometido la presidenta de la Comisión Europea a los aranceles estadounidenses, aunque con matices sobre cómo se debe preservar la relación con Washington y entre críticas de la ultraderecha a las regulaciones comunitarias.

Durante un debate en la Eurocámara sobre la nueva era en las relaciones comerciales globales, el eurodiputado sueco y portavoz popular sobre Comercio Internacional, Jörgen Warborn, incidió en que una guerra de «ojo por ojo, diente por diente» no beneficiará a Europa.

«Tenemos una defensa comercial muy desarrollada y está lista para ser usada, pero sólo después de que fracasen la diplomacia y la negociación. La fragmentación solamente nos debilitará», advirtió el eurodiputado popular, que pidió que la UE responda «unida» a esta imposición de aranceles.

Desde las filas socialdemócratas, su presidenta, la española Iratxe García, se mostró favorable a responder a Trump con «aranceles en sectores estratégicos de la economía estadounidense» y, yendo más allá que los populares europeos, con el uso de las regulaciones de defensa comercial europeas que permitan «cerrar» los mercados europeos a los bienes y servicios estadounidenses.

«El presidente de Estados Unidos piensa que el comercio internacional es un juego que sólo puede tener un ganador, pero la historia nos muestra que es una fuente de riqueza compartida y que el proteccionismo sólo nos lleva a bloqueos y confrontación», insistió García.

La eurodiputada checa de los Patriotas por Europa, Klára Dostálová, criticó por su parte que «mientras otros defienden sus intereses», Europa se dedique a su juicio a «hacer directivas sobre importaciones éticas de plátanos».

Sin pronunciarse específicamente sobre la respuesta a los aranceles, subrayó que Europa debe defender sus propios intereses «porque en el comercio no hay amigos».

Un portavoz del grupo precisó a EFE que los Patriotas «no están a favor de entrar en ninguna guerra comercial» y que «respetan la soberanía de cada país y sus decisiones políticas», al tiempo que exigen que la UE abandone sus políticas climáticas, las cuales consideran «el primer arancel que afecta a los productos europeos».

Desde los Conservadores y Reformistas Europeos, su jefe de filas, el italiano Nicola Procaccini, criticó en una rueda de prensa la «falta de preparación» de Bruselas ante un debate que no es nuevo y apuntó que, aunque a su grupo no le gusten los aranceles, son parte del comercio internacional y lo seguirán siendo.

«Debemos estar preparados y ser inteligentes. La única forma de enfrentar este nuevo reto es con un enfoque justo», dijo.

La presidenta de los liberales de Renovar Europa, la sa Valerie Hayer, aseguró que si Trump «sólo responde a la fuerza, la UE debe mostrar los dientes», con «contramedidas apropiadas» y apoyando a sus propios productores», mientras que la eurodiputada de los Verdes Anna Cavazzini advirtió que la UE no debe dejarse chantajear con estos aranceles para retirar sus propias leyes.

Para la líder de la Izquierda, la sa Manon Aubry, los aranceles estadounidenses deberían permitir a la UE «aprender la lección» e impulsar que Bruselas apueste por «acabar con el libre comercio» y recuperar la soberanía en materia energética y alimentaria.

Desde el segundo grupo de la ultraderecha parlamentaria, la Europa de las Naciones Soberanas, el eurodiputado alemán René Aust sugirió «extender la mano a Trump para cooperar» y trabajar para bajar impuestos y obligaciones burocráticas para las empresas. 

La orden ejecutiva que firmó ayer Trump señala que las importaciones de acero y aluminio «amenazan con menoscabar la seguridad nacional», y que los acuerdos vigentes hasta ahora concluyen el 12 de marzo de 2025, fecha a partir de la cual los productos señalados serán objeto de los nuevos aranceles.

Los primeros os entre Bruselas y Washington tras la publicación de la medida llegarán hoy mismo, cuando Von der Leyen se reúna en París con el vicepresidente de Estados Unidos, JD Vance, en el marco de una cumbre mundial sobre la inteligencia artificial.

Sefocvic anunció, además, que se reunirá con su homólogo estadounidense, Howard Lutnick, «en los próximos días».

Scholz afirma que Europa reaccionará unida

El canciller alemán, Olaf Scholz, afirmó este martes que la Unión Europea reaccionará unida a la amenazas arancelarias del presidente estadounidense.

«Ya he mencionado los aranceles estadounidenses que podríamos tener que enfrentar, en primer lugar posiblemente sobre el acero y el aluminio. Si Estados Unidos no nos deja otra opción, la Unión Europea reaccionará de manera unida», señaló.

«Como el mayor mercado del mundo, con 450 millones de ciudadanos, tenemos la fuerza para hacerlo», advirtió durante su discurso en el último debate general en el Bundestag, la cámara baja del Parlamento alemán, antes de los comicios del 23 de febrero.

Recordó que Alemania es un país que se beneficia como ninguno otro de una Europa Unida como mayor exportador de Europa.

«Si la UE es blanco de los aranceles estadounidenses, como se vislumbra con el acero y el aluminio, dependeremos de la solidaridad europea más que ningún otro país», indicó.

Al mismo tiempo, Scholz subrayó que «las guerras comerciales siempre acaban costando prosperidad a ambas partes» al expresar su esperanza de que sea posible evitar «el camino equivocado de los aranceles y contraaranceles».

La Cámara de Comercio de EEUU en Bruselas pide a Trump que exima a la UE de los aranceles

La Cámara de Comercio de Estados Unidos ante la Unión Europea pidió este martes al presidente estadounidense, Donald Trump, que exima «permanentemente» a la Unión Europea de los aranceles del 25 % que ayer anunció a las importaciones de acero y aluminio.

«La UE no es una amenaza para la seguridad nacional de Estados Unidos. Más bien es el socio económico de América más importante. La UE debe quedar permanentemente exenta de los aranceles y ambas partes deben trabajar conjuntamente para abordar el verdadero problema: el exceso de capacidad global causado por prácticas comerciales desleales en terceros países», dijo la Cámara de Comercio en un comunicado.