El presidente del Gobierno español, Pedro Sánchez, durante su comparecencia a petición propia este miércoles en el Congreso. EFE/Javier Lizón

Sánchez abre la puerta a crear un «verdadero» ejército europeo

Madrid (EuroEFE).- El presidente del Gobierno español, el socialista Pedro Sánchez, abrió la puerta este miércoles a crear un «verdadero» ejército europeo formado por fuerzas armadas de los 27 Estados de la UE.

En una comparecencia en el Congreso para explicar la posición de España en el actual contexto internacional, el jefe del Ejecutivo abogó por desarrollar una política común europea de seguridad y defensa con instrumentos de financiación únicos, tal como se hizo en la pandemia con el material sanitario, y con compras conjuntas en Europa.

En esa línea, defendió desarrollar «consorcios industriales panaeuropeos», aumentar la «interoperabilidad» (la capacidad de los sistemas de información para compartir datos y posibilitar el intercambio) y crear un ejército europeo «con la misma bandera y los mismos intereses».

Sánchez llamó a la UE a liderar la respuesta a los desafíos globales y no dejar que otros países definan «qué tiene que ser de la emergencia climática, de la lucha contra la pobreza o de cómo financiar el desarrollo».

Eso implica, a juicio del gobernante español, «sentar las bases de un verdadero ejército europeo» para lograr, por tanto, la interoperabilidad de las fuerzas armadas y desarrollar una industria de seguridad y de defensa «integrada, puntera y autónoma».

«Solo así -argumentó- nos convertiremos en una verdadera unión y garantizaremos una paz duradera en nuestra región».

Fuentes socialistas precisaron que la construcción de este ejército comenzaría por unificar el material en toda la UE para alcanzar una mayor eficiencia.

Algo que, según las mismas fuentes, serviría ya para que el envío de material militar a Ucrania fuera más útil porque, tal como recuerdan, ahora mismo el ejército ucraniano recibe armamento de varios calibres y le dificulta la gestión del mismo.

Avanzar hacia una política de seguridad común

Sanchez apeló a Europa a ser valiente y dar un paso al frente ante la situación geopolítica actual hacia una política de seguridad común.

Describió la situación geopolítica haciendo hincapié en «el regreso de viejas pulsiones neoimperialistas» por parte de Rusia y «un giro copernicano en la política militar y económica de Estados Unidos».

Ante esos «cambios tectónicos», el jefe del Ejecutivo español consideró que los europeos están obligados a dar un paso al frente, ser valientes y completar su integración en política exterior, en seguridad y defensa, y en competitividad.

A su juicio, solo así la UE se convertirá en una «verdadera unión» y garantizará una paz duradera en el continente ya que, según dijo, «Europa carece de una política de seguridad común».

«Hasta hace poco esto no era un problema, pero ahora lo es», remachó Sánchez, quien defendió a su vez su apuesta por la OTAN e insistió en que es el momento de avanzar hacia la integración de una política de seguridad y defensa europea.

Plan para impulsar la industria de seguridad y defensa

Sánchez adelantó que pondrá en marcha antes del verano un plan nacional para el desarrollo y el impulso de la tecnología y la industria de la seguridad y la defensa española.

El plan concentrará el grueso de la inversión adicional exigida para cumplir con los socios europeos y canalizará programas de colaboración público privada.

El objetivo, dijo, es crear «un nuevo salto tecnológico industrial en España».

Sánchez dejó claro que las amenazas a las que se enfrenta España son diferentes a las del este de Europa y destacó la importancia de las amenazas híbridas y los ciberataques.

«No podemos vivir bajo la amenaza de que cualquier día un submarino tripulado interrumpa el tráfico marítimo del Estrecho o corte los cables de fibra que nos conectan con el resto del mundo: o que un grupo de hackers extranjeros hagan colapsar nuestros aeropuertos en plena campaña de verano; o que logren aupar al poder a un títere de Putin, como ya han hecho en varios países de nuestro entorno», señaló.

En este contexto, insistió en la necesidad de impulsar el desarrollo industrial, continuar actualizando el equipamiento de las fuerzas armadas, modernizar los sistemas de protección del espacio aéreo y las fronteras y desarrollar nuevas capacidades para bloquear los ataques cibernéticos y las constantes campañas de desinformación.

El Gobierno quiere apostar por la innovación, por el desarrollo de tecnologías de doble uso, por la creación de nuevas empresas, por impulsar a pymes y startups locales, por la formación, por la protección de las fronteras y por la creación de infraestructuras resilientes.

«Los españoles no somos una amenaza para nadie, pero tampoco queremos sentirnos amenazados. No vamos a atacar a ningún territorio, pero vamos a defender nuestro modelo de vida», afirmó.

Guerra comercial

Por otro lado, Sánchez reclamó al Gobierno estadounidense que, ante su intención de imponer nuevos aranceles, recapacite y dialogue con la Comisión Europea, que es quien centraliza todas las competencias de comercio de lo Estados miembro.

«Que construya puentes, que detenga este sinsentido, porque si no lo hace, tendremos que responder y hacerlo con tres criterios: proporcionalidad, rapidez y unidad», añadió antes de advertir: «Europa es una potencia y responderá como una potencia».

Sánchez hizo hincapié en que Europa no quiere una guerra comercial, pero insistió en que, si hay que darla, está preparada.

Ante esa posibilidad informó de que el Gobierno está negociando con el resto de los Veintisiete esa respuesta «proporcional, inteligente y unitaria».

Pero más allá de esa negociación comunitaria informó de que el Ejecutivo está diseñando también un plan de contingencia para ayudar en España a los sectores de la economía que puedan verse afectados por esa posible guerra comercial, aunque no aportó más detalles al respecto.