Una persona en situación de calle en una imagen de archivo. EFE/ Juan Ignacio

Jóvenes, migrantes y sintecho enfrentan más trabas para el ingreso mínimo vital, según Cáritas

Bruselas (EuroEFE).- Los jóvenes de entre 18 y 25 años, las personas migrantes o refugiados y aquellos sin vivienda estable o que no pueden cumplir «estrictos» criterios de residencia son los que encuentran más barreras de al ingreso mínimo vital (IMV) en Europa, según el último informe sobre renta mínima presentado este martes por Cáritas Europa.

El estudio, que se publica cada dos años y busca analizar las «profundas deficiencias» de los programas nacionales de renta mínima, achacó este problema a que algunos esquemas de a los ingresos mínimos imponen «condiciones de elegibilidad estrictas», como requisitos de residencia prolongada, restricciones de edad y pruebas de activos.

Además, alertó de que casi el 90 % de las 20 organizaciones de Cáritas en Europa de las que extrajo los datos, entre las que se encuentra España, afirmaron que las prestaciones o ayudas mínimas en sus países no cubren las necesidades básicas de los beneficiarios.

Solo cinco países en Europa ofrecen un apoyo que cubre al menos el 75 % del umbral nacional de pobreza: Dinamarca, Finlandia, Irlanda, Malta y Países Bajos.

Durante la presentación del informe en Bruselas, la secretaria general de Cáritas Europa, Maria Nyman, dijo que aunque ha habido cierto progreso y compromiso político en los últimos años, el avance en la configuración de este tipo de programas de protección son «lentos y desiguales en los distintos países europeos».

«Tenemos que asegurarnos de que la gente no solo sobrevive; tenemos que asegurarnos de que pueden planear su futuro, un futuro para toda su familia. Sin embargo, la realidad que tenemos ahora queda aún lejos de este objetivo», indicó Nyman en referencia al título del informe, «Thriving, not just surviving» («Prosperar, no solo sobrevivir»).

Situar a las personas en el centro de la política

También estuvo presente en la cita la eurodiputada socialista y miembro de la Comisión de Empleo y Asuntos Sociales Idoia Mendia, quien aseguró que situar a las personas en el centro de las políticas es el camino para poder llegar a ser más competitivos, pues «invertir en la sociedad es también invertir en competitividad económica».

«Tenemos que seguir trabajando con las organizaciones que tratan con esas personas que se encuentran alejadas del entorno del mercado laboral. Merecen tener el derecho de ser atendidas de manera apropiada», resaltó.

Muchos no acceden al ingreso mínimo por la «complejidad istrativa»

Cáritas advirtió de que, según indicadores de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico (OCDE), ningún país europeo proporciona prestaciones que alcancen plenamente el umbral de pobreza relativo, que se define como el 60% del ingreso medio de un país.

Explicó que muchas personas con derecho a prestaciones no accede a la renta mínima debido a la «complejidad istrativa, excesivos requisitos de documentación, barreras digitales, falta de concienciación y estigmatización».

«La no utilización de la renta mínima es un reto importante en todos los países europeos y debe abordarse como una preocupación política primordial», añadió la organización en un comunicado.

Recomendaciones de Cáritas

Por todo ello, Cáritas recomendó a los líderes nacionales y europeos que garanticen que los ingresos mínimos alcancen al menos el 75 % del umbral nacional de pobreza para todos los tipos de hogares y la simplificación y ampliación de los criterios de elegibilidad para evitar excluir a grupos vulnerables.

También instó a combatir la estigmatización mediante, por ejemplo, actividades de divulgación, impulsar sistemas de solicitud fáciles de usar y pidió a la UE una «acción coordinada» para promover normas vinculantes en materia de renta mínima.

En el caso español, Cáritas Europa subrayó que el país debe mejorar la elegibilidad para grupos como migrantes y jóvenes, la implementación y la coherencia geográfica de los diferentes sistemas y considerar los ingresos «solo de los tres meses anteriores y no del año anterior».