Bruselas (EFE).- El Consejo de la Unión Europea (UE) aprobó este jueves una declaración con siete compromisos para conmemorar el 40 aniversario de espacio de Schengen, la zona de libre circulación más grande del mundo, que incluyen una «sólida» gestión de las fronteras exteriores y un «alto grado» de seguridad interior.
La Declaración de Schengen, aprobada hoy, subraya la importancia para la cooperación y la integración europeas de esta zona sin fronteras de 29 países ofrece una movilidad fluida a más de 450 millones de europeos.
Compromisos de la UE para preservar Schengen
En tiempos de inestabilidad geopolítica y un panorama de seguridad cambiante, los países de la UE se comprometieron hoy a «seguir invirtiendo en un espacio común sin fronteras interiores, garantizando una sólida gestión de las fronteras exteriores y un alto grado de seguridad interior».
El objetivo es preservar y consolidad Schengen promoviendo y protegiendo «los valores del respeto a la dignidad humana, la libertad, la democracia, la igualdad, el Estado de Derecho y el respeto a los derechos humanos en un espacio único de libertad, seguridad y justicia», señaló el Consejo de la UE en un comunicado.

Se trata de defender la libre circulación sin trabas de las personas garantizando que el restablecimiento de los controles en las fronteras interiores siga siendo una medida de último recurso.
Para ello, se adoptarán todas las medidas adecuadas con respecto a la gestión de las fronteras exteriores, los movimientos secundarios, la migración, el retorno de las personas en situación irregular, así como la prevención y la lucha contra la delincuencia transfronteriza en línea y fuera de línea, el terrorismo, así como las amenazas emergentes como las amenazas híbridas o la ciberdelincuencia.
Los acuerdos
Los Veintisiete acordaron también desarrollar y profundizar la aplicación de la ley y la cooperación interinstitucional y mejorar el desarrollo y el uso de sistemas informáticos a gran escala para garantizar que Schengen siga siendo la columna vertebral de la cooperación europea en materia de seguridad que contribuya a la seguridad de sus ciudadanos.
Otro compromiso adquirido hoy fue rechazar la entrada e impedir el cruce no autorizado de fronteras a quienes no tienen derecho a entrar, y devolver a quienes no tienen derecho a permanecer, de manera humana y digna.
Asimismo, se comprometieron a reforzar la dimensión exterior de Schengen, incluso mediante una política de visados eficaz, la gestión de fronteras y una cooperación eficaz con terceros países en materia de retorno y reisión.
Coincidieron, además, en la necesidad de mantener un alto nivel de confianza mutua entre los Estados y abordar conjuntamente los desafíos a los que se enfrenta el espacio Schengen.
Y por último, se comprometieron a invertir en un espacio Schengen sólido y que funcione bien, mediante una financiación adecuada, innovación centrada en el ser humano y nuevas tecnologías, y una acción proactiva.
Schengen, el destino más visitado del mundo
Dos millones de personas se desplazan diariamente a través de las fronteras interiores de todos los Estados de la UE, excepto Chipre e Irlanda, además de Islandia, Liechtenstein, Noruega y Suiza.

Cientos de millones de personas cruzan legalmente las fronteras exteriores de la UE cada año.
Esto convierte al espacio Schengen en el destino más visitado del mundo, atrayendo el 40 % del turismo internacional.
Schengen facilita además el comercio intracomunitario, que superó los 4 billones de euros en 2024.
De partida, el Acuerdo de Schengen fue firmado el 14 de junio de 1985 por cinco países —Bélgica, Francia, Alemania, Luxemburgo y Países Bajos—, cuyo objetivo era eliminar gradualmente los controles en las fronteras interiores y permitir la libre circulación de sus ciudadanos.
Las disposiciones prácticas para la supresión de los controles fronterizos y el refuerzo de la protección de las fronteras exteriores comunes se establecieron en el Convenio de Schengen de 1990. Este Convenio entró en vigor en 1995 y supuso la supresión efectiva de los controles fronterizos entre los cinco países, así como entre España y Portugal, que se habían adherido entretanto.
Desde entonces, el espacio Schengen sin controles en las fronteras interiores ha crecido hasta 29 países.