Un veterinario vacuna contra la enfermedad conocida como 'lengua azul. EFE/David Aguilar

Un foco de lengua azul deja a la Feria Ganadera de Zafra sin vacuno, ovino y caprino

Mérida (EFE).- Un foco de serotipo 1 de la enfermedad de la lengua azul en una explotación de la comarca veterinaria de Trujillo (Cáceres) ha obligado a declarar toda Extremadura zona restringida al movimiento y, por tanto, a dejar sin ganado vacuno, ovino y caprino la Feria Internacional Ganadera de Zafra (Badajoz), una de las más importantes de España, que comenzará este jueves, día 26.

Así lo ha comunicado la consejera de Agricultura, Ganadería y Desarrollo Sostenible, Mercedes Morán, tras reunirse este lunes en Mérida con representantes de organizaciones agrarias, cooperativas agroalimentarias y los colegios oficiales de veterinarios, así como con la organización de la feria, asociaciones presentes en esta cita y el alcalde de Zafra, Juan Carlos Fernández Calderón.

El foco, registrado en una explotación con seis ovejas afectadas con síntomas que «no son graves» de una cabaña de un millar, se ha conocido este fin de semana y la notificación oficial ha llegado esta misma mañana.

Unas 1.600 cabezas menos en la feria y vacunación obligatoria

De ahí esta reunión en la que, de acuerdo a la orden ministerial, se declara «zona restringida a toda Extremadura», por lo que la feria de Zafra no podrá tener animales sensibles a esta enfermedad, lo que supone unas 1.600 cabezas de ganado menos, y solo contará con ejemplares de equino, porcino y avícola.

Una decisión que, ha remarcado Morán, se adopta de acuerdo a la normativa nacional pero también por «responsabilidad» para salvaguardar la salud de la cabaña ganadera y que no afecte a la actividad económica» del sector, la cual ha sido apoyada además de forma «unánime».

La Junta de Extremadura va a trabajar «de la mano» del Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación para activar la vacunación, que es obligatoria para todo el ganado ovino y vacuno de más de tres meses en la región, y ya ha ado con diferentes laboratorios para hacer acopio de la vacuna.

En este sentido, ha recordado que en Extremadura hay «un protocolo ya hecho de vacunación del serotipo 4 desde hace 20 años», con lo cual esto va a funcionar de forma «ágil».

Junta pedirá flexibilizar algunos movimientos

El Ejecutivo extremeño va a pedir también una nueva reunión del Comité RASVE, de alerta sanitaria veterinaria, que ya se reunió la semana pasada para abordar el foco de serotipo 3 de lengua azul detectado en explotaciones de ganado ovino de la región lusa de Évora, y que provocó que se cerrase la frontera para los movimientos de ganado de Portugal a España, con vacunación en este caso «voluntaria» en Extremadura.

Morán espera que en la nueva reunión para tratar la presencia de serotipo 1 se pueda alcanzar un acuerdo para «flexibilizar algunos tipos de movimientos teniendo en cuenta una serie de protocolos de seguridad, realizados tanto por los ganaderos como por la istración, para asegurar esa salud animal».

«Un jarro de agua fría» para la feria

El comisario de la Feria de Zafra, Santiago Malpica, ha calificado como «un jarro de agua fría» la restricción de ganado vacuno, ovino y caprino en el certamen internacional, ya que además precisamente este año se habían realizado «grandes inversiones» en las naves que los albergan, con la construcción, por ejemplo, de «74 corrales».

En cualquier caso, los criadores están de acuerdo en la decisión adoptada pues sería «una irresponsabilidad» celebrar la feria con todos los rumiantes cuando son «susceptibles de transmitir la enfermedad» y «si esto se va de las manos, nos echarían la culpa», ha indicado Malpica, quien se ha mostrado convencido de que habrá «más casos» de lengua azul porque ahora es la «época propicia», por las condiciones de temperatura y humedad, para el mosquito vector.

La Feria de Zafra no contará tampoco con las subastas ya que no es posible implantar la modalidad virtual, como se había planteado y se hizo en alguna edición durante la pandemia, al no disponer de tiempo suficiente.

El resto de la programación se mantiene intacta: las jornadas técnicas, el concurso morfológico de equino o la entrega de premios de merino, cuyo concurso ya se celebró en la feria de primavera de la ciudad, ha señalado el comisario, quien ha remarcado que habrá «muchas actividades, pero no las naves repletas como otros años».

En la reunión se ha puesto sobre la mesa un posible aplazamiento de la feria pero, ha precisado Malpica, es «una organización tan compleja que sería imposible hacerlo en otra época».

Ejemplares de ovejas de merino en la Feria Ganadera de Zafra. EFE/Flores

«Una necesidad mayor», según los ganadores

Las asociaciones profesionales que participan en la Feria Internacional Ganadera (FIG) de Zafra ven la suspensión de las exposiciones y subastas de ganado vacuno, ovino y caprino por los casos positivos de la enfermedad de lengua azul en Extremadura como una “necesidad mayor” para garantizar la salud de la cabaña ganadera.

El presidente de la Asociación Nacional de Criadores de Ganado Merino, Álvaro Álvarez, ha destacado en declaraciones a EFE que “es una pena, porque es una feria muy importante para la que se preparan para subasta los mejores animales de todo el año”.

Además, ha añadido, se trata de un “hecho histórico” porque no recuerda una feria de Zafra sin la presencia del ganado ovino.

Sin embargo, ha reconocido, es necesario “para no poner en riesgo la cabaña” porque al final los perjudicados serían los ganaderos.

Un coste que piden compensar

En total se preveían más de 1.600 cabezas de ganado vacuno, ovino y caprino, de las que unas 470 eran ovinos de raza merina autóctona, y este cambio con poco tiempo de antelación, ya que la FIG comienza este jueves, supone un coste para los ganaderos “que han invertido en la preparación de los animales que se subastan en la feria”, ha explicado Álvarez.

Por este motivo, de las distintas asociaciones ganaderas han solicitado en la reunión de urgencia celebrada este lunes con la consejera de Agricultura, Mercedes Morán, cambiar la partida presupuestaria destinada a la asistencia en la FIG para poder ayudar a estos ganaderos que han preparado la feria con la selección, alimentación y cuidado de sus animales, “porque al final son los ganaderos los que hacen esta feria”.

Esta medida afecta también a la visita de una comitiva internacional de compradores y prescriptores, integrada por de Venezuela, China, Kazajistán y Rusia, que iban a asistir a la FIG para conocer de primera mano las características del certamen, por lo que los ganaderos han trabajado para llevar a los animales “en su máximo explendor”.

Ante el foco de lengua azul y la decisión de que no trasladar el ganado a la FIG, los invitados internacionales no podrán visitar la exposición y subastas en el recinto ferial de Zafra pero sí conocerán algunas explotaciones ganaderas en Trujillo (Cáceres) y en la localidad pacense de Castuera, donde visitarán una ganadería que tiene un innovador programa de reproducción múltiple y un centro de clasificación de la lana. 

El serotipo 1 de lengua azul regresa ocho años después

El foco de enfermedad de la lengua azul del serotipo 1 detectado en una explotación de la comarca ganadera de Trujillo supone el regreso de una enfermedad vírica de dicho serotipo cuya última notificación oficial data de 2016, según datos publicados por el Ministerio de Agricultura.

Antes de este foco, la última notificación por Sanidad Animal (Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación) del serotipo 1 de lengua azul en Extremadura data de 2016, año en el que, entre septiembre y noviembre, se detectaron siete focos en los municipios de Navalvillar de Pela, Barcarrota, Mérida, Valdecaballeros, Azuaga, Capilla y Don Benito.

Tres años antes (2013), se notificaron entre noviembre y diciembre un total de tres casos en Membrío, Saucedilla y Zarza la Mayor, y un año antes, un total de cuatro.

Dichos focos, tres y cuatro, respectivamente, supusieron un claro descenso de la presencia del serotipo 1 de lengua azul en Extremadura, pues en 2011 se contabilizaron seis (Casar de Cáceres, Saucedilla, Membrío, Zarza la Mayor, Carcaboso y Malpartida de Plasencia), y en 2010 fueron más de cuarenta.