Santiago de Compostela (EFE).- El viceportavoz del BNG, Luis Bará, ha avanzado este jueves que su formación exigirá en el Parlamento toda la información relativa al proyecto de Altri en Palas de Rei y aventura que, en el caso de que la Xunta siga sin aportar la misma, los nacionalistas acudirán al juzgado a reclamarla.
En rueda de prensa, Bará ha denunciado la opacidad de la tramitación procesal ya que hay muchos documentos que no se conocen “porque no quieren hacerlos públicos” pese a que así los reclaman tanto los grupos de la oposición como la sociedad gallega.
Ante esta situación de ocultamiento que denuncia, el BNG empleará “todas las vías a su disposición” para poder acceder a los documentos que todavía no han visto la luz.
Primero, continuarán pidiendo estos informes en la Cámara Legislativa pero “avisamos y es que si no nos proporcionan esta documentación vamos a ir a pedirla a los juzgados porque ya está bien de burlarse del Parlamento, de vulnerar los derechos de los diputados y de utilizar de manera antidemocrática este Parlamento como si fuese su finca particular”.
“El expediente completo”
Entre la documentación solicitada por los nacionalistas, destaca “el expediente completo” que dio lugar a la Declaración de Impacto Ambiental favorable porque la parte que se hizo pública es “bastante sospechosa, en la medida en la que se puede deducir que es un documento de parte que da por buenos todos los informes proporcionados por Altri”.
Además, ha insistido Bará en que está firmado por “dos cargos de confianza” del PPdeG pese a que desde la Xunta insistan en que existen 36 informes técnicos firmados por 42 personas técnicas pero que “son secretos”.
Desde el BNG exigen acceder a dichos informes ante la posibilidad de que dichos informes hayan sido confeccionados por personal externo a la Xunta en un movimiento que podría ser “ilegal” y motivo de “nulidad” de la declaración ambiental.
Por otro lado, el Bloque también pide los documentos que dieron lugar, en octubre de 2021, a la firma de un «memorando de entendimiento entre Altri y la Sociedad Impulsa», en la que la Xunta tiene participación mayoritaria -un 40 %-.
Al respecto, Bará ha recordado que los detalles al respecto “se nos denegaron en sucesivas ocasiones” pese a que el Consello de Contas determinó que la sociedad Impulsa “debe someterse a los procedimientos de control de todo al igual que el sistema público autonómico”.
Documentación ambiental
También requieren la documentación relativa a la afección del proyecto industrial sobre hábitats, especies protegidas, y también relacionada con el cambio que se hizo últimamente en la estrategia de infraestructura verde para sacar la protección de la Sierra del Careón y “que coincide casi por completo con los terrenos que pretende ocupar Altri”.
Así las cosas, el diputado del BNG ha recordado que la tramitación de Altri todavía no ha concluido porque “ni siquiera tiene luz verde ambiental, más bien tiene a una luz roja de alarma, de preocupación, de indignación y de reacción social masiva”.
Ha considerado que si el proyecto llega al último trámite, todo el proceso acabará judicializado puesto que ya son numerosas las plataformas que han anunciado que acudirán a la vía judicial mediante un contencioso-istrativo, que según el diputado tiene “ciertas garantías de éxito” porque lo que rodea a Altri ha sido un “proceso lleno de irregularidades”.
El PPdeG asegura que hay «mayoría silenciosa» a favor de Altri
La secretaria general del PPdeG, Paula Prado, ha asegurado que en Galicia hay una «mayoría silenciosa» a favor de la planta de Altri, la que votó por su partido en las elecciones autonómicas, frente a los que «hacen tanto ruido» en contra, tras la manifestación del sábado en A Pobra.
En una rueda de prensa en Santiago de Compostela ha criticado la actitud de la oposición que se mueve «entre los bulos y los cambios de opinión» y especialmente del BNG, al que se ha referido como «Bloque Negacionista» Galego, que solo busca «el alboroto, la manifestación y la conflictividad social» y lleva «años envenenando la política gallega», ha afirmado.
Tanto al Bloque como al PSdeG los ha acusado de haber cambiado de opinión tras las elecciones sobre el proyecto de planta de celulosa para fibras textiles que Altri proyecta en Palas de Rei (Lugo), que ya cuenta con la declaración ambiental positiva de la Xunta y aspira a conseguir financiación de fondos europeos.
Para Prado, el BNG y el PSdeG solo pretenden la «confrontación» con el Gobierno gallego al oponerse al proyecto de Altri, sobre el que los socialistas gallegos sigue «caminando sin rumbo» y con continuos «cambios de opinión».
Así, ha insistido en que los partidos de la oposición han pasado de apoyar el proyecto en el Parlamento, en distintas iniciativas aprobadas por unanimidad en los últimos años cuando «el debate no era si era un proyecto sostenible o no, sino intentar llevarlo a los ayuntamientos donde gobernaban», a querer ahora «boicotearlo» solo por «rédito electoral».
A su juicio, el BNG intenta aprovechar «cada vez que ve la oportunidad de un nuevo Prestige», como con el vertido de pélets que llegó a las costas de Galicia hace más de un año, y quieren convencer a la ciudadanía de que el Gobierno del PPdeG «loqueó y va a intoxicar a los gallegos» con la planta de Altri que va a «contaminar y acabar con un río, la ría, la comarca y la comunidad», según los nacionalistas.
Prado ha reprochado que el Bloque es el partido del «no a todo» y ha relatado una larga lista de cuestiones a las que asegura que se han opuesto a lo largo de los años, desde Alumina Aluminio hace casi cincuenta años a, ya recientemente, los eólicos, «el bilingüismo, la caza, la minas de Touro y San Fiz, Inditex y Ence».