Palma (EFE).- El presidente del Parlament balear, Gabriel Le Senne (Vox), abrirá una batalla jurídica para evitar su cese en el cargo, siguiendo así instrucciones de la dirección del partido en Madrid.
Le Senne responde de este modo a la decisión de 5 diputados autonómicos rebeldes de Vox de expulsarle del grupo parlamentario a él y a la presidenta del partido en las islas, Patricia de las Heras, por lo que pasarían a ser diputados no adscritos.
En la reunión de la Mesa del Parlament de este miércoles, Le Senne solicitará dos informes a los servicios jurídicos de la casa: el primero para analizar la legalidad de su expulsión y, en segundo lugar, qué grupos podrían proponer un nuevo candidato para sustituirle.
La petición de Le Senne saldrá adelante porque cuenta con los apoyos necesarios y, de este modo, la Mesa dejará en suspenso la decisión de los 5 rebeldes hasta que se disponga de los referidos informes de los letrados.
Garriga: El Govern balear «afronta una legislatura incierta»
El vicepresidente de Vox, Ignacio Garriga, ha itido este martes que el Govern balear «afronta una legislatura incierta porque está al albur de las decisiones de 5 personas que han demostrado que exclusivamente se mueven por ambiciones personales».
Vox ha abierto un expediente de expulsión de todos ellos y cumplirá los acuerdos políticos alcanzados con el PP en Baleares y el Govern de la popular Marga Prohens, ha garantizado Garriga.

Por su parte, los 5 diputados rebeldes mantienen «la mano tendida» a la dirección de Madrid para solucionar la crisis, pero se reafirman en su voluntad de echar a Le Senne y De las Heras del grupo.
En nombre de ellos, el diputado Sergio Rodríguez ha afirmado que ellos son de Vox, por lo que defienden sus principios ideológicos y el acuerdo político de 110 puntos firmado con el PP al inicio de legislatura. «La gobernabilidad en las Islas Baleares no está en juego», ha subrayado.
Vox no ve «ético» que el PP balear se apoye en «diputados tránsfugas»
En rueda de prensa, la dirección de Vox en Baleares ha advertido que no le parecería «ético» que el Govern del PP de Marga Prohens «se apoye en diputados tránsfugas».
El propio Le Senne y De las Heras han dicho que si Prohens negociara con estos diputados rebeldes, debería haber consecuencias que deberá determinar en su momento la dirección nacional.
«Ellos (los tránsfugas) ya no representan a Vox ni a los ciudadanos que los eligieron», ha dejado claro De las Heras, que ha garantizado a los votantes que tanto ella como Le Senne continuarán defendiendo sus intereses.
Mientras tanto, la presidenta balear, Marga Prohens, ha asegurado en Ibiza que esta crisis «interna» de Vox «no es deseable», pero no distraerá al PP de su programa político autonómico.
El PP dice que no quiere inmiscuirse en los problemas internos de Vox
El portavoz del PP en el Congreso, Miguel Tellado, ha subrayado que no quiere inmiscuirse en los problemas internos del partido de Santiago Abascal, con el que el PP cogobierna en cinco autonomías (Castilla y León, Comunidad Valenciana, Extremadura, Aragón y Región de Murcia). En el caso de Baleares, el apoyo de Vox es externo.
El PSIB-PSOE, el principal partido de la oposición en Baleares, ha registrado una solicitud de comparecencia urgente de la presidenta del Govern para «que explique qué está sucediendo» en esta crisis, «con quien están gobernando, pactando y negociando», y qué sucederá ante la «situación de ingobernabilidad» de la comunidad porque el PP no tiene mayoría absoluta en la cámara.
Los econacionalistas de Més per Mallorca han propuesto introducir un cambio en el reglamento del Parlament que impida que los tránsfugas logren controlar los grupos parlamentarios, como está a punto de suceder en el caso de estos 5 diputados.