El enoturismo debe estar anclado cada vez más en el territorio, según la OMT

Logroño (EFE).- El enoturismo debe estar anclado cada vez más en el territorio, ha afirmado este jueves a EFE la directora del Inteligencia de Mercado y Competitividad de la Organización Mundial de Turismo (OMT), Sandra Carvao.

El papel fundamental del enoturismo en el apoyo al desarrollo rural y la digitalización son ejes que centran la 7ª Conferencia Mundial de Enoturismo de la OMT, que se celebra por primera vez en España con la participación de más 300 expertos de 40 países.

El enoturismo se extiende por todo el territorio y, además de la bodega, que es un polo de atracción, hay en en esta actividad una cultura tradicional del vino y la innovación, ha añadido Carvao, tras inaugurar en Logroño esta Conferencia, que se celebra hasta mañana, viernes, y que organiza la OMT.

En el acto inaugural también han participado el presidente de La Rioja, Gonzalo Capellán; el alcalde de Logroño, Conrado Escobar; y el subdirector general en la Secretaría General de Cooperación y Competitividad Turística del Ministerio de Turismo, Félix de Paz.

Carvao ha resaltado el crecimiento que el enoturismo ha experimentado en los últimos años, entre otros aspectos, por «la búsqueda de experiencias en el territorio, que están conectadas con autenticidad y la profesionalidad del sector».

«Hace años, quizá, había una o dos bodegas que estaban abiertas a visitas, mientras que, en la actualidad, no solo están abiertas, sino que ofrecen experiencias con arte, cultura, gastronomía y «realmente hay mucha innovación y se están digitalizando», ha precisado.

Además, después de la pandemia se ha producido «un aumento de las experiencias en el exterior, más conectadas con naturaleza y con grupos más pequeños», que es «una posibilidad que también ofrece el enoturismo», ha subrayado.

Enoturismo enganchado al territorio

Desde la OMT, ha añadido, «vemos también la capacidad que tiene el enoturismo para avanzar en un espacio rural; está enganchado en un territorio y ese territorio vive de esa cultura del vino».

Carvao ha recalcado que una de las claves del futuro del enoturismo está en avanzar hacia un enoturismo cada vez más sostenible, desde el punto de vista económico, social y ambiental.

A nivel ambiental, ha afirmado que «hay muchas bodegas y regiones que están avanzando mucho, introduciendo tecnologías que le permiten pues tener procesos mucho más eficaces a nivel de desperdicio, de impacto en el consumo de agua y energía y también en la parte turística».

El producto «kilómetro cero» -de proximidad- cada vez está ganando más protagonismo en la gastronomía y el maridaje de los vinos, ha subrayado Carvao, quien también ha destacado la vertiente social de un enoturismo cada vez más pegado al territorio como fuente de empleo para los jóvenes y la inclusión.

Otro de los retos del enoturismo está en que las nuevas generaciones entiendan la cultura del vino y, para ello, es «importante que el sector enoturístico cree nuevos productos que atiendan a los gustos de este segmento de población y a las nuevas formas de consumo», ha afirmado.