Imagen de archivo de una concentración a favor del abolicionismo. EFE/Biel Aliño

El Partido Riojano propone aprobar una ordenanza en Logroño para sancionar a proxenetas y puteros

Logroño (EFE).- El Grupo Municipal del Partido Riojano (PR+) de Logroño ha propuesto aprobar una ordenanza municipal abolicionista para proteger a las mujeres prostituidas y sancionar a los proxenetas y puteros.

El portavoz regionalista, Rubén Antoñanzas, ha presentado este lunes su propuesta en una rueda informativa, acompañado por la candidata número dos de su lista, Sofía Montenegro, y la representante de la Asociación Feminista Kirké, Isabel Ilzarbe.

El portavoz regionalista de Logroño, Rubén Antoñanzas, en una imagen de archivo. EFE/Raquel Manzanares

Antoñanzas defenderá la aprobación de esta ordenanza en una moción durante el pleno municipal del próximo jueves, 30 de noviembre, y ha confiado en contar con el apoyo de todos los grupos políticos.

Así, Logroño se podría adherir a la Red Libre de Trata y convertirse en un municipio libre de tráfico de mujeres y niñas, como ya son León, Sevilla y Barcelona, entre otras ciudades españolas.

El portavoz regionalista también ha planteado un plan social de atención integral a las mujeres prostituidas y acciones para sensibilizar a la población.

Plan social de atención

Montenegro ha planteado que esta ordenanza comience a redactarse a lo largo del primer semestre de 2024 para que pueda entrar en vigor después del verano, tras superar el periodo de exposición pública.

De forma paralela a la redacción de la norma, ha propuesto también un plan social de atención integral a las mujeres que «quieren salir de la prostitución o que han sido supervivientes de trata».

Para ello, ha demandado que este plan esté dotado con recursos humanos, técnicos y económicos suficientes que permitan garantizar un espacio habitacional seguro y temporal; atención social, psicológica y sanitaria; y formación laboral para favorecer su reincorporación en el mercado de trabajo.

Ordenanza abolicionista

Ilzarbe ha asegurado que «la prostitución no es un trabajo, ni es sexo; es violencia, explotación y esclavitud».

Ha detallado que en la actualidad conviven tres posturas frente a la prostitución: «la prohibicionista, que criminaliza a las mujeres prostituidas; la regulacionista fomentada por proxenetas y puteros para legitimar y perpetuar su enriquecimiento a costa de la explotación sexual de las mujeres; y la abolicionista».

También ha reclamado que se garanticen los derechos de las mujeres y se den más facilidades para resolver de forma urgente el problema del empadronamiento, que es «uno de los medios de coacción más empleados por las mafias».