Logroño (EFE).- El Ayuntamiento de Logroño trabaja en dos proyectos de integración hidrológica y ambiental, uno localizado en el norte, en concreto, en el barranco de Oyón; y otro en el sur, con el objetivo de alcanzar “el máximo aprovechamiento de las aguas y prevenir procesos de inundación”.
Así lo ha afirmado este viernes el alcalde de la capital riojana, Conrado Escobar, en la primera sesión del ciclo ‘Ciudad al Día, encuentros informativos sobre la ciudad’, que se ha centrado en la estrategia ‘Logroño circular’.
Escobar ha explicado que el proyecto de la zona sur derivará aguas superficiales de áreas inundables para su almacenamiento controlado en redes pluviales y, además, permitirá desarrollar un corredor que se convertirá en un nuevo espacio verde con un itinerario ciclopeatonal.
Respecto a la infraestructura verde, ha proseguido, se trabajará en un proyecto de eficiencia hidroenergética, mejora tecnológica y reutilización de aguas para riego en diversos parques y jardines de la ciudad.
Ha concretado que esta actuación “consistirá en la sustitución del riego con agua potable por riego con agua no tratada, para lo que se mejorarán las infraestructuras existentes y se diseñarán y ejecutarán las nuevas instalaciones con el objeto de conseguir la implantación de un sistema de riego inteligente y centralizado”.
El regidor de la capital riojana ha detallado que las zonas en las que se actuará serán los parques de Valdegastea, La Isla-Salamar-Concordia y Pozo Cubillas-San Antonio, así como en los de los barrios de Piqueras-Cascajos, San Adrián y San Miguel.
Además, Escobar se ha referido a que desde el equipo de Gobierno local se considera en la actualidad la opción de establecer comunidades energéticas tanto en el ámbito urbano como en el industrial.
Por lo que respecta al espacio urbano, ha continuado, “la opción sería plantear la implantación de esta nueva estrategia de urbanismo circular a través de un proyecto piloto, y, de forma inicial, ya existe un estudio de lo que podría suponer en una zona concreta de la ciudad llevar a cabo una serie de actuaciones ambientales y tecnológicas”.
Estas iniciativas se podrían concretar en “la instalación de un centro de producción de energía solar y de aerogeneradores; riego de parterres a partir de agua reciclada; transformación de los envolventes de los edificios para aislarlos térmicamente; y la instalación de una central energética comunitaria”.
